Hoy comenzamos la parte holandesa de nuestro viaje, con sede en casa de nuestros amigos en La Haya (Den Haag, en holandés, aprendéroslo por que en todos los carteles utilizan este nombre, ni si quiera el inglés). Cómo estábamos cansados del día anterior nos prepararon un tour local.
Por la mañana nos acercamos a la playa de La Haya. Se llama scheveningen. Bueno realmente era un pueblo que fue absorbido por la expansión de La Haya. Nos llevamos el coche por que en la zona de la casa de nuestros amigos había zona hora (bueno en toda Holanda debe haber zona hora...) asique lo mismo nos lo daba pagar en un lado que en otro.
Nos pegamos un buen desayuno en los chiringuitos que dan a la arena y estuvimos después toda la mañana paseando por la playa, por la arena y el paseo. Hacia sol, pero también mucho viento y la temperatura no era muy alta... yo iba con intención de bañarme pero se me quitaron las ganas cuando llegamos. Los lugareños aprovechaban para hacer kitesurf. Nos comimos unos churros españoles (eso ponía en los letreros...), tengo que decir que no estaban malos...
A las 2 de la tarde se terminaba la zona hora en la zona de la casa de nuestros amigos, así que fuimos a dejar el coche allí y nos acercamos a la estación central andando para alquilar un par de bicis. Con ellas recorrimos la ciudad por la tarde cómo buenos holandeses. Las bicis que nos dieron eran con el típico freno holandés (se frena dando pedaladas en el sentido contrario de la marcha) y al principio es una sensación muy rara, pero después de una vuelta a un parque para acomodarnos, ya eramos todo unos profesionales.
Si te mueves con la bici por Holanda, tienes que tener mucho cuidado con los coches, los peatones y los tranvías... siempre hay algo por algún lado, los holandeses lo hacen desde pequeñitos y lo llevan interiorizado, a nosotros nos falta mucha educación vial.
Lo primero que hicimos fue ir a la plaza Plaats a comer en una terracita unos bagels estupendos. Lo que para nosotros era una comida tardía para ellos era una cena temprana. Cuando fuimos a pagar nos encontramos con una sorpresita con mucha razón:
Muy cerquita vimos este escudo con el nombre de Holanda en ruso
Despues de eso fuimos a ver el Binnenhof, una especie de parlamento europeo (o algo así entendí) con una laguito fuera muy mono y unos jardines interiores bonitos, aunque no había jardines, era cómo una plaza...
Después de esto seguimos dando una vuelta por el centro pero no mucho más... a las 17:30 empezó a cerrar todo y la gente se fue recluyendo en sus casas y eso que todavía quedaba por delante muchas horas de sol.
Nosotros nos fuimos a casa a descansar y preparar la visita del día siguiente.