Día 18/01. VALENCIA – MADRID.
Decidimos trasladarnos a Madrid el día antes de la salida del vuelo, para evitar sorpresas y tener más tranquilidad.
A las 18:10, salimos en el AVE hacia Madrid, llegamos a las 19:48. Qué maravilla viajar en Ave, cómodo y rápido, en poco más de hora y media estamos en Madrid. (63,90 euros por persona, ida y vuelta)
Cogemos el metro (línea 5, hasta Canillejas) desde allí cogemos un taxi y en cinco minutos estamos en el Hotel Axor Feria. Hotel nuevo, agradable, buen desayuno, a 10 minutos del aeropuerto y con servicio de transfer gratuito (91 euros A/D en booking). A cinco minutos, paseando, se encuentra un centro comercial con diversas opciones para cenar.
Decidimos trasladarnos a Madrid el día antes de la salida del vuelo, para evitar sorpresas y tener más tranquilidad.
A las 18:10, salimos en el AVE hacia Madrid, llegamos a las 19:48. Qué maravilla viajar en Ave, cómodo y rápido, en poco más de hora y media estamos en Madrid. (63,90 euros por persona, ida y vuelta)
Cogemos el metro (línea 5, hasta Canillejas) desde allí cogemos un taxi y en cinco minutos estamos en el Hotel Axor Feria. Hotel nuevo, agradable, buen desayuno, a 10 minutos del aeropuerto y con servicio de transfer gratuito (91 euros A/D en booking). A cinco minutos, paseando, se encuentra un centro comercial con diversas opciones para cenar.
Aprovechamos el viaje para quedar con unos amigos y cenamos con ellos.
Día 19/01. MADRID-BANGKOK.
09:00, Salida hacia el aeropuerto con el transfer del hotel.
11:35, Vuelo Madrid-Bangkok, Thai airlines. El avión es un Airbús A300, con asientos amplios y cómodos y con pantalla individual. El servicio fue muy bueno, continuamente pasaban a ofrecer bebidas. Nos entregan una carta con el menú en tailandés, inglés y español, en el que hay dos opciones para elegir. Sirvieron una comida y un desayuno.
Día 19/01. MADRID-BANGKOK.
09:00, Salida hacia el aeropuerto con el transfer del hotel.
11:35, Vuelo Madrid-Bangkok, Thai airlines. El avión es un Airbús A300, con asientos amplios y cómodos y con pantalla individual. El servicio fue muy bueno, continuamente pasaban a ofrecer bebidas. Nos entregan una carta con el menú en tailandés, inglés y español, en el que hay dos opciones para elegir. Sirvieron una comida y un desayuno.
El colorido de los asientos y de los vestidos de las azafatas contribuyen a reducir la pesadez del largo viaje.
Al llegar al aeropuerto de Bangkok se tiene que andar un largo trayecto hasta llegar al control de pasaportes.