CHEFCHAUÉN
¡¡Chefchauén de día!! toda una explosión de color.
Entrar en la medina de día fue descubrir algo increíble: casa pintadas de azul claro y blanco, con las puertas también azules en distintas tonalidades.
Cuando llegamos, las calles estaban casi desiertas, pero según fue avanzando la mañana, empezaron a llenarse las calles y callejuelas de mujeres bereberes vendiendo sus cosas de la huerta, extendiendo por el suelo sus mantas llenas de tomate, pepino, calabacines, melones,... que, junto con su indumentaria, daban más color si cabe a la estampa.
Estuvimos toda la mañana paseando por la medina, perdiéndonos por sus callejuelas azules y coloristas, encontrándonos a muy pocos turistas, prácticamente a ninguno ya que los pocos que habría estarían durmiendo la fumada del día anterior (porque por si no lo sabéis, esta ciudad es el paraíso de hachís y está lleno de porreros que viene a pasarse una semana fumados )
Después de pasar la mañana en Chefchauén, nos cogimos el coche para ir hacia el sur. De camino, decidimos ir hacia Meknes, una de las ciudades imperiales, pero antes paramos en Mulay Idriss.
MULAY IDRISS
Es la ciudad santa dentro del territorio de Marruecos, ya que aqui está el mausoleo de Idriss I, fundador de Marruecos y nieto de Alí. Al parecer, la peregrinación a este mausoleo cinco veces, para aquellos sin dinero para ir a La Meca, vale como una peregrinación allí (nosotros ya tenemos 1/5 )
La verdad es que fue algo impactante, porque creo q fue la única ciudad que vimos que no tiene casi ningún contacto con turistas extranjeros, y el ambiente es algo hostil. Como no podía ser de otra manera, la entrada al mausoleo estaba prohibida a los no musulmanes (y bien grande que lo ponía).
Es una pena, porque nos subimos a un mirador que hay en la parte alta de la ciudad, y alli vimos que era inmenso, y si a eso sumas la buena pinta que tenía la decoración exterior...
MEKNES
Llegamos a Meknes a media tarde, ya con un poco de prisa para poder llegar a Fez de día (conducir de noche en este país es un suicidio) y además mi novia estaba empezando a sentirse mal después de todo el trajín del día y de chuparnos una buena cantidad de calor.
Así pues, únicamente nos dimos un pequeño paseo por la ciudad, y nos asomamos a la ciudad imperial. Por eso, no tengo mucho que comentar, porque prácticamente no vimos nada salvo el mercado principal, con su calle llena de carnicerías "made in Marruecos" con las cabezas de las vacas en el mostrador, haciendo filetes de corazón... vamos, que muy pintoresco, pero un poco desagradable.
No quedaba mucho para la noche, por lo que decidimos coger la autopista hacia Fez; por 1.5€ 60 Km de ¡¡autopista de verdad!! que se podía ir a 120 km/h y no había ningún miedo en que te saliera un burro o algo similar!!
FEZ
Cuando llegamos a Fez, teníamos muy claro que no íbamos a estar en la Fez-el-Bali (la medina), sino que mejor nos quedábamos en la ciudad nueva, mas exactamente en el Hotel Splendid, donde nos encontramos con una pareja de barceloneses habían llegado dos días antes y que se iban a ir al día siguiente al desierto. Nos gustó mucho hablar con ellos, porque tenían ya hecha un poco más la idea de viaje que iban a hacer, y nos estuvieron contando un poco que partes de Marruecos podían valer la pena, etc...
Llegamos muy cansados al hotel, que por cierto, no he mencionado pero no está nada mal, limpio, buena cama, y una apetitosa piscina con terrazita; y decidimos darnos únicamente un paseo nocturno por la medina. Allí nos dimos cuenta que como buena ciudad turística, no sigue los horarios locales, sino los que manda el turismo, y a las 8 de la tarde no quedaba nada abierto, sólo los restaurantes, y parecía fantasmal.
Cenamos en uno que tenía pinta de ser para los locales, barato y con buen trato, y junto con una llamativa pareja de franceses de unos 60 años, que hablaban árabe con el dueño y que parecía que vivían alli.
El menú consistió en un tajín de carne con limón y verduras (mira que estaba malo el limón...), ensalada, aceitunas muy buenas y un surtido de dulces locales (entre ellos la mejor shebbakia de todas)
¡¡Chefchauén de día!! toda una explosión de color.
Entrar en la medina de día fue descubrir algo increíble: casa pintadas de azul claro y blanco, con las puertas también azules en distintas tonalidades.
Cuando llegamos, las calles estaban casi desiertas, pero según fue avanzando la mañana, empezaron a llenarse las calles y callejuelas de mujeres bereberes vendiendo sus cosas de la huerta, extendiendo por el suelo sus mantas llenas de tomate, pepino, calabacines, melones,... que, junto con su indumentaria, daban más color si cabe a la estampa.
Estuvimos toda la mañana paseando por la medina, perdiéndonos por sus callejuelas azules y coloristas, encontrándonos a muy pocos turistas, prácticamente a ninguno ya que los pocos que habría estarían durmiendo la fumada del día anterior (porque por si no lo sabéis, esta ciudad es el paraíso de hachís y está lleno de porreros que viene a pasarse una semana fumados )
Después de pasar la mañana en Chefchauén, nos cogimos el coche para ir hacia el sur. De camino, decidimos ir hacia Meknes, una de las ciudades imperiales, pero antes paramos en Mulay Idriss.
MULAY IDRISS
Es la ciudad santa dentro del territorio de Marruecos, ya que aqui está el mausoleo de Idriss I, fundador de Marruecos y nieto de Alí. Al parecer, la peregrinación a este mausoleo cinco veces, para aquellos sin dinero para ir a La Meca, vale como una peregrinación allí (nosotros ya tenemos 1/5 )
La verdad es que fue algo impactante, porque creo q fue la única ciudad que vimos que no tiene casi ningún contacto con turistas extranjeros, y el ambiente es algo hostil. Como no podía ser de otra manera, la entrada al mausoleo estaba prohibida a los no musulmanes (y bien grande que lo ponía).
Es una pena, porque nos subimos a un mirador que hay en la parte alta de la ciudad, y alli vimos que era inmenso, y si a eso sumas la buena pinta que tenía la decoración exterior...
MEKNES
Llegamos a Meknes a media tarde, ya con un poco de prisa para poder llegar a Fez de día (conducir de noche en este país es un suicidio) y además mi novia estaba empezando a sentirse mal después de todo el trajín del día y de chuparnos una buena cantidad de calor.
Así pues, únicamente nos dimos un pequeño paseo por la ciudad, y nos asomamos a la ciudad imperial. Por eso, no tengo mucho que comentar, porque prácticamente no vimos nada salvo el mercado principal, con su calle llena de carnicerías "made in Marruecos" con las cabezas de las vacas en el mostrador, haciendo filetes de corazón... vamos, que muy pintoresco, pero un poco desagradable.
No quedaba mucho para la noche, por lo que decidimos coger la autopista hacia Fez; por 1.5€ 60 Km de ¡¡autopista de verdad!! que se podía ir a 120 km/h y no había ningún miedo en que te saliera un burro o algo similar!!
FEZ
Cuando llegamos a Fez, teníamos muy claro que no íbamos a estar en la Fez-el-Bali (la medina), sino que mejor nos quedábamos en la ciudad nueva, mas exactamente en el Hotel Splendid, donde nos encontramos con una pareja de barceloneses habían llegado dos días antes y que se iban a ir al día siguiente al desierto. Nos gustó mucho hablar con ellos, porque tenían ya hecha un poco más la idea de viaje que iban a hacer, y nos estuvieron contando un poco que partes de Marruecos podían valer la pena, etc...
Llegamos muy cansados al hotel, que por cierto, no he mencionado pero no está nada mal, limpio, buena cama, y una apetitosa piscina con terrazita; y decidimos darnos únicamente un paseo nocturno por la medina. Allí nos dimos cuenta que como buena ciudad turística, no sigue los horarios locales, sino los que manda el turismo, y a las 8 de la tarde no quedaba nada abierto, sólo los restaurantes, y parecía fantasmal.
Cenamos en uno que tenía pinta de ser para los locales, barato y con buen trato, y junto con una llamativa pareja de franceses de unos 60 años, que hablaban árabe con el dueño y que parecía que vivían alli.
El menú consistió en un tajín de carne con limón y verduras (mira que estaba malo el limón...), ensalada, aceitunas muy buenas y un surtido de dulces locales (entre ellos la mejor shebbakia de todas)