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El viaje lo contratamos a través de una Agencia de viajes, y la oferta consistía en 9 días, 7 noches todo incluído en el Complejo Hotel Palladium .
Teníamos la intención de realizar las excursiones por libre, alquilando un vehículo al llegar al Hotel.
Pagando un suplemento pudimos viajar muy cómodamente en unas plazas del avión llamadas “Confort Class”.
Sinceramente, creo que valió la pena haber pagado un poco más por viajar más cómodo. Ya quisiera yo poder viajar siempre en estas condiciones porque en otras compañías y destinos por el mismo tipo de asiento se llegan a pagar precios desorbitados.
Nos desplazamos en avión hasta Madrid, para coger el Avión de Pullmantur. El vuelo muy cómodo y la atención muy buena del personal.
Fotografías del Menú especial de confort – Class:
Llegamos al Aeropuerto de Cancún:
Cancún y La Riviera Maya son un destino como alternativa ideal para disfrutar de los dos tipos de turismo, el turismo aventura y el turismo cultural. En la península de Yucatán de se encuentra esta zona turística de azules aguas bañadas por el Mar Caribe.
La Riviera Maya se extiende desde el sur de Cancún hasta Tulum, ubicada entre playas y frondosa vegetación, cuyo punto neurálgico es Playa del Carmen y Playacar.
Desde Cancún nos trasladaron en autobús hasta el hotel.
La temperatura en Enero era de pleno verano, a más de 30 grados.
El Palladium es un complejo impresionante delante del Mar, que consta de 4 hoteles, varias piscinas, restaurantes etc….
Nos alojaron en el Hotel Riviera, en una habitación tipo Junior-Suite, equipada con una bañera de hidromasaje muy grande.
Para trasladarse en el interior del Hotel se utiliza un tren, que va parando en distintos lugares, recogiendo pasajeros:
Foto del tren:
Foto recepción Hotel
Fotos habitación complejo Riviera:
Foto de una rana que apareció en la puerta:
Fotos del jardín, Playa y piscina:
El día estaba un poco nublado:
En la recepción del Hotel son muy amables, te informan de todo lo que puedas necesitar y también puedes cambiar moneda a pesos mejicanos.
Todas las comidas están incluidas, disponiendo también de varios restaurantes para cenas temáticas, que hay que reservar previamente.
A mediodía comíamos en el restaurante que hay frente a la piscina.
El que más me gustó fue el Brasileño por su degustación de carne de calidad y el que menos el Japonés.
Por la noche programan varias actividades, tales como teatro, shows diversos, actuaciones en directo, discoteca etc.…..pero suelen terminar pronto.
Hay una parada de taxis en el interior y en la puerta paran las “Van”, que según me comentaron son furgonetas que, previo pago, van efectuando un recorrido y parando en diversos puntos de interés, tales como hoteles y atracciones turísticas de la zona.
También hay unas cabinas de teléfono para llamar a España, pero es muy complicado seguir las instrucciones para hacer una llamada. Mejor que te lo expliquen en recepción o llames directamente desde el móvil.
En el Hotel hay una oficina de Hertz donde alquilamos un coche por 4 días; creo que nos costó unos 70 euros por día con “full cover”. Lo más caro y muy recomendable es pagar este suplemento de seguro a todo riesgo,. Con el coche pudimos desplazarnos por libre a las excursiones y alguna tarde íbamos a pasear al centro del Pueblo.
Para ir de compras por la zona de la Riviera Maya, la zona más destacada es por la Playa del Carmen, donde una calle paralela a ésta, llamada Quinta avenida, se puede encontrar con multitud de bares, restaurantes, tiendas, etc.
Sobre los productos típicos que se venden en el lugar son por ejemplo los productos artesanales o piedras semipreciosas de la Península del Yucatán donde se puede destacar la amatista, el ónix, la turquesa, entre muchas otras, incrustadas en plata, que hacen que sean joyas únicas.
La mayoría de tiendas que puede encontrar a lo largo de la zona de la Riviera Maya, venden los suvenirs típicos como los sombreros, hamacas, pareos, sarapes, ropa y otros objetos
Por la mañana temprano cogimos el coche de alquiler y nos dirigimos hasta Tulum.
Se llega en unos 40 minutos.
Tulum es el único yacimiento maya a orillas del mar y no es sólo eso lo que le diferencia de los demás, aquí no hay pirámides ni templos, sino una fortaleza; ésta fue construida con el fin de defender las rutas comerciales de la época..
La siguiente excursión fue a Chichén Itzá. Nos levantamos a las 6 de la mañana y llegamos a las 8,30 cuando no había prácticamente nadie. Pudimos efectuar la visita comodamente sin agobios.
Chichén Itzá es un sitio arqueológico ubicado en la península de Yucatán en México. Fue la capital maya más importante entre los años 750 y 1200 d.C., sus vestigios muestran que se nutrió de otras corrientes culturales de Mesoamérica.
El edificio más conocido de Chichén Itzá es El Castillo, su pirámide más importante, dedicada al dios Kukulkán. Sus escaleras rematan con dos cabezas de serpiente, y durante los equinoccios de primavera y otoño (21 marzo y 22 septiembre) dan un espectáculo inigualable: el sol a medida que desciende proyecta triángulos que en su conjunto asemejan el cuerpo de una serpiente. El movimiento del sol hace que parezca que la serpiente desciende del templo a la tierra.
A la salida visitamos un Cenote cercano
Los cenotes son una especie de ”pozos” de aguas dulces y cristalinas donde podrás disfrutar de un baño diferente rodeado de naturaleza y tranquilidad.
A la vuelta al Hotel, por la carretera foto curiosa de un cementerio
De una toma de corriente para una casa:
Del Juzgado:
De un bar de carretera:
La última excursión fue a la zona arqueológica de Cobá .
La zona de Cobá es bastante extensa, por lo que nosotros alquilamos una bici-carro en la que un chico nos paseó por el lugar, en cualquier caso, siempre caminar por esta zona es una auténtica gozada.
Se puede pasear entre templos de épocas ancestrales que se levantan entre la maleza de la frondosa jungla.
Las ruinas mayas de Cobá, en la Península de Yucatán, puede que sean las más grandes del área, incluyendo la pirámide más alta construida por los mayas.
Visitamos la pirámide de 42 metros de altura, donde por supuesto, llegamos a la cima para admirar el paisaje y tomar una foto aunque daba un poco de miedo la altura.
A la salida fuimos a visitar otro Cenote.
También hay parques ecológicos como el de Xcaret, el Xel-Ha y Tres Ríos, donde todo el mundo puede descubrir los sistemas ecológicos con distintas actividades turísticas como por ejemplo ir en kayak en los ríos, hacer esnorquel en el arrecife o realizar una excursión rodeado de la vegetación tropical.
El resto de los días los pasamos en el Hotel.
Disfrutar de este Hotel tan maravilloso, con sus enormes piscinas, Playa y Piscina de agua salada, degustando sus comidas temáticas y bebiendo los famosos cócteles caribeños, fue realmente una gozada.
Espero que os hayan gustado al menos las fotos. Es un viaje que recomiendo, en el que nos han faltado días para realizar más excursiones, pero que también hemos disfrutado del Hotel y del relax del caribe.
Un viaje para soñar y volver…………….
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