GUANAJUATO
Después de unas pocas horas en bus desde Morelia llegamos a Guanajuato de día, con el problema que era Jueves Santo y no teníamos hotel.
Caminamos mucho con las mochilas, había mucha gente, y al final encontramos el Hotel San Diego en el centro, excesivamente caro para lo que era, pero no podíamos pedir más, sino no hubiéramos tenido habitación para dormir. Por unos 85 eur/noche/2 pers con baño privado y sin desayuno el hotel no era nada del otro mundo pero estaba limpio y en el centro.
*En agosto de 2014 me alojé en Hotel Mesón del Rosario, correcto, 60 eur por una habitación de 4 pers. Los precios de alojamiento en Guanajuato son altos, es bastante turístico.
Guanajuato es una de las atracciones turísticas de México, vale la pena visitarlo, muy bonito y característico con sus casas de colores, iglesias y centro colonial muy bien conservado y cuidado.
Lo malo que era temporada altísima, noche de procesiones y repleto de turistas, tanto locales, como gringos y guiris.
Está sobre una montaña y agujereado por túneles para los coches, muy curioso como si fuera Mónaco, y de esta manera por todo el centro histórico no transita ningún carro y es peatonal.
Hay bastante oferta de apartamentos y pisos particulares donde dormir así que si vais sin reserva podéis pasear o preguntar por el centro que os indicarán dónde están estas habitaciones.
Importante subir al mirador del Pipila para tener una bonita vista del pueblo, todo coloreado, aquí una muestra mía de instagram:

Nuestra estancia estuvo muy marcada por la semana santa, así que todo eran procesiones y misas en las iglesias, no lo recomendaría por la cantidad de gente que hay y porque son muy parecidas a las que vemos en España, por tanto no es nada que os vayáis a perder y mejor disfrutar del pueblo en temporada baja con poca gente.
Curiosa la visita que realizamos al Museo de las Momias, se tratan de unas momias que se encontraban en las catacumbas de la antigua iglesia y que se exponen en el museo, no son milenarias ni nada parecido. Abstenerse aprensivos, jaja.
Por lo que respeta a la gastronomía probad el molcajete, típico de la zona, carnes hechas en el mortero de piedra, bastante sabrosa y económica por ser de buena calidad (una de las pocas carnes a la brasa que probé que por defecto no estaba rebozada en chile :P). Justo en frente de nuestro hotel San Diego, probamos uno muy correcto y a buen precio, en un local bonito decorado tradicionalmente mex.
Así pues nos dirigimos hacia la penúltima etapa en Zacatecas. Cogimos un bus de día ya que no eran muchas horas. Decir que nos hubiera gustado ir hasta San Miguel de Allende que tenía muy buena pinta, pero lo dejaremos para la próxima.*
*Así fue y la siguiente visita en agosto de 2014 tuve la oportunidad de turistear por San Miguel de Allende, bonita ciudad, más pequeña que Guanajuato, bastante invadida por guiris viviendo allí y tenía pinta de ser un poco más cara. Vale la pena acercarse.
También pasamos por Dolores Hidalgo, cuna de la independencia mexicana, pequeña y bonita si pasáis cerca visitadla sino no hace falta que os desviéis de la ruta. Comimos muy bien en su mercado.

