EN EL DIA 7 EXPLICO COMO CONTRATAMOS LA EXCURSIÓN A MACHUPICHU
Bien temprano, nos levantamos y desayunamos en el Hotel. Un Hotel muy familiar pequeño, pero buen servicio. Incluso pudimos dejar allí nuestras mochilas, para no cargar de más hacía el Machupichu.
Llegamos a la zona donde se coge el Bus para la subida al Machupichu y aquel lugar ya estaba lleno de gente. Se formaba una fila para coger los buses, nos situamos y nuestro guía no daba llegado, habíamos quedado con él la noche anterior en aquel lugar. Estábamos nerviosos, nos iba a tocar subir en el Bus y nuestro guía, que debía venir con nosotros no aparecía.
Esperamos unos minutos más y allá lo vemos venir, afrontado, se disculpa, “ no importa, estamos a tiempo”.
Total que la subida en Bus no es coña, el camino se las trae, con las pendientes y las curvas del trayecto, mamma mia!!!!
Llegamos y debemos sellar nuestro Boleto Turístico, al igual que sellamos nuestros pasaporte con el sello del Machupichu “yo estuve aquí”. Jejejjeej!!!! Típico.
Toda la ciudadela es magnífica, un lugar fascinante, lleno de encanto, sobre todo por el enclave en el que está situado. Es alucinante.
El lugar donde está situado, todo sus alrededores, esa selva virgen es fascinante, y todavía mas fascinante aún, dejarse las tripas para subir al famoso Huainapichu. Costar costó lo suyó. Primero bajar para luego subir y subir. Pero las vistas desde el lugar son merecedoras del esfuerzo. Ver toda la ciudadela del Machupichu a vista de pájaro no tiene precio.
Toda la ruta de subida y bajada al Huainapichu trascurre por un lugar único, donde las raíces de los árboles son tus mejores aliadas, pero desde luego merece la pena el esfuerzo.
A las 16:13Horas teníamos la reserva del Tren de MachuPichu a Poroy, por lo que sobre la 13:00h de la mañana bajamos nuevamente en autobús desde Machupichu a Aguas Calientes, recogimos nuestras mochilas y cogimos el tren de vuelta.








Por la noche, al llegar a Cuzco, decidimos tomar un café y cenar en un local que nos recomendó Cleixon, “El Trotamundos”. Una muy buena elección, si señor!!! Perfecto y buenísimo todo.

