El cuarto día, después de levantar-nos en el albergue pudimos guardar las maletas en recepción. Nos dirigimos a visitar el funicular Floybanen (es una de las atracciones más importantes de Bergen), el funicular nos costó 6 €/persona solo ida, ya que bajamos a pie porque hay buenas vistas. Las vistas son espectaculares, dependiendo de la temporada puedes ver cruceros. Compramos para la familia un par de salmones salvajes envasados (26 €).
Después de comer, cogimos un ferri dirección Stavanger con una duración de cuatro horas y media. El ferry era de la compañía Norled y nos costó 32 €/persona, lo reservamos desde su web un mes antes, esto nos permitió conseguir un descuento de más del 50 %.
Cuando llegamos, ya era muy tarde y fuimos directamente hasta el St. Svithun Hotel (al lado del hospital, lo reservamos porque era uno de los más baratos (77 € dos personas con desayuno), pero no valió la pena, porque estaba demasiado lejos del centro de Stavanger, es por eso y porque ya era tarde y no había servicio de autobuses que tuvimos que coger un taxi para llegar hasta el hotel que nos costó 15 €).
Después de comer, cogimos un ferri dirección Stavanger con una duración de cuatro horas y media. El ferry era de la compañía Norled y nos costó 32 €/persona, lo reservamos desde su web un mes antes, esto nos permitió conseguir un descuento de más del 50 %.
Cuando llegamos, ya era muy tarde y fuimos directamente hasta el St. Svithun Hotel (al lado del hospital, lo reservamos porque era uno de los más baratos (77 € dos personas con desayuno), pero no valió la pena, porque estaba demasiado lejos del centro de Stavanger, es por eso y porque ya era tarde y no había servicio de autobuses que tuvimos que coger un taxi para llegar hasta el hotel que nos costó 15 €).