Hoy hemos quedado a las 10 de la mañana en la Plaza de Neptuno para que nos recoja el bus que nos llevará a nuestro destino: el desconocido pueblo madrileño de Colmenar de Oreja


¡Menos mal que se me ocurrió llamar el viernes antes de la quedada para confirmar el bus, porque ellos habían entendido que quedábamos en la Plaza de Castilla! Si no llego a llamar la quedada se va al garete

Como yo soy demasiado previsora, quedé con la gente a las 10 y con el bus a las 10,30, pensando que el personal, después de la juerga nocturna, se retrasaría. Pero no. ¡Qué va! Allí estaban todos a las 10 en punto en el lugar de la cita


Aprovechando la espera, Pippi y Annie se escabulleron y desaparecieron de la vista pues se traían entre manos un misterio muy misterioso y no querían que nos enterásemos. ¡Estaban preparando bolsas sorpresas para rifar durante el viaje y evitar, así, que el personal se aburriera!

Por fin llegó nuestro autocar, de la empresa JOLCAR, muy profesionales, un autocar moderno y con cinturones de seguridad en todos los asientos pero con goteras. (ya os lo contaré un poco más tarde).

Y, por último, ¡¡¡¡tatatachan, tachan, tachan!!! Aquí llegan las malagueñas y la valenciana, todas juntas y en unión


Ya estamos todos y podemos subir al bus e iniciar nuestro viaje. Según vamos subiendo nos entregan unas papeletas metidas en un sobre.
Nos aposentamos cada uno a nuestro gusto y como veo que Piloto se ha quedado desparejado le presento a la valenciana, que tenía un asiento libre al lado y ¡ya está! Todo el mundo acompañado.

Una vez que tomamos la carretera que nos conducirá a nuestro destino, Pipi toma el micrófono y nos cuenta cómo va a funcionar la rifa: Ella irá diciendo el premio a conseguir y después dirá un país.

Cada uno de nosotros tiene que comprobar si el sobre que le han dado contiene la capital del país y ¡ya está! Regalo adjudicado. ¿Sencillo, verdad?

Por qué, a ver, ¿quién de vosotros sabe de qué país es capital TIMBU?




Además debo contaros que hubo una mano inocente que iba sacando los regalos y las papeletas: Grimpow. Inocente, inocente, no sé, la verdad es que no sé



Y así, sin darnos cuenta llegamos a nuestro destino, contentos como colegiales de excursión. El bus nos dejó en donde encontró un lugar apropiado y desde allí nos dirigimos en montón hacia adelante. Digo yo que alguien debía saber a dónde íbamos y como llegar porque el hecho indiscutible es que llegamos.
COLMENAR DE OREJA
En la época romana existió en esta zona una ciudad romana denominada Aurelia y también existía un asentamiento dedicado a la producción de miel y a la extracción de la piedra caliza. Más tarde los árabes levantaron aquí un castillo conocido como Castillo Aurelia, este castillo fue conquistado por el rey Alfonso VII y posteriormente fue entregado a la Orden de Santiago siendo denominado “Castillo de Oreja” junto con las aldeas que lo rodeaban, entre ellas de la Colmenar y por eso a esta aldea se la pasó a conocer como Colmenar de Oreja.
A lo largo de su historia el pueblo siempre ha sido famoso por su miel y la calidad de su piedra caliza usada en la construcción de catedrales y palacios, entre ellos los palacios reales de Madrid y Aranjuez. Además el pueblo se especializó en la fabricación de tinajas para vino y aceite, llegando a contar con varios hornos.
Primero visitamos el museo de Ulpiano Checa, colmenareño de pro y un excelente pintor y, para mi gusto, mejor escultor. La visita me gustó mucho pues era guiada y nos iban explicando la vida del artista y los cuadros y sus medallas y logros. Y la pintura muy buena, realmente buena y bonita. Un pintor de principios de siglo, pintando su idea sobre Roma, el desierto, etc., etc., Nos contaron que sus cuadros y proyectos sirvieron de base, años más tarde, para las escenas de BEN HUR, y había cuadros que te recordaban la peli de tal forma que parecías estar viendo a Charlton Heston subido a la cuadriga y arreando sus caballos en el momento más álgido de la carrera. Y unos maravillosos cuadros de color dorado mostrando las arenas del desierto, y unas damas elegantísimas y esbeltas como juncos, y ….. Bueno, que hay que verlo que contado no es lo mismo.
Después tocaba visitar el pueblo debidamente acompañados por una guía oficial que nos llevó en primer lugar a la plaza del pueblo. Construida con el típico estilo castellano con soportales en la planta baja, para guarecerse del sol y una segunda planta con balcones corridos que, seguro, que alguna vez se utilizó para las corridas de toros.
Me gustó mucho esta plaza, muy de pueblo y muy bien conservada. Lástima que permitan aparcar en el centro pues desmerece mucho la vista

Desde aquí visitamos la Iglesia de Santa María. Esta iglesia tiene sus inicios en el siglo XIII, cuando las órdenes de caballería conservaban mucho de su esplendor y todavía se conserva parte de la primitiva estructura normanda aunque luego fue ampliada varias veces presentando características góticas y renacentistas. Es curioso ver en el exterior la zona de las puertas de acceso pues se notan unas hermosas construcciones renacentistas que están a medias, como si se hubiera caído la edificación, pero no, lo que sucedió es algo muy de actualidad: la crisis y los consiguientes recortes

El interior muestra bóveda gótica y contiene un hermoso retablo renacentista y otros dos de estilo barroco en las naves laterales.
Luego fuimos a visitar uno de los lugares más característicos y más curiosos de este pueblo:
El TÚNEL DE ZACATÍN.
El diccionario de la lengua nos dice que se denomina “zacatín” a un mercado donde se venden telas, palabra de origen árabe. Así que debemos suponer que en la Edad Media aquí debía celebrarse un mercado de tejidos, encajes, ropas y demás.
La guía nos contó que en la antigüedad el pueblo se dividía en dos partes, la parte que crecía alrededor de la iglesia y los arrabales, habitados por los judíos y los moros. Estos dos barrios estaban separados por un barranco por lo que se construyó un puente para unir ambas partes. Con el tiempo el pueblo creció y creció y no se daba abasto con un puente, así que construyeron otro y otro, hasta que decidieron juntar todos y hacer una plaza encima de los puentes y hacer un túnel para que por él pasara el río.
Y, al final del túnel, al fondo del barranco todavía se conserva la Fuente de Zacatín, con sus tres partes claramente diferenciadas: la primera en dónde se aprovisionaban de agua para beber, la segunda servía para el lavado de la ropa y la última para abrevar a las bestias.
Bueno. Ya hemos visto este hermoso lugar y ahora toca acercarnos hasta el teatro municipal o teatro Diéguez. Un pequeño y coqueto teatro al que no le falta ni un detalle: escenario, telón, butacas, palcos, lámparas, etc. Sigue en uso pues hay mucha afición en el pueblo y tienen un grupo de teatro y todo.
Después de esta visita estábamos todos derrotados, cansados, hambrientos y sedientos. Sobre todo esto último. Menos mal que la visita guiada incluía una cata de vinos en una de las famosas bodegas del lugar.
Bueno, aquí nos tenéis, ¡por fin! Dispuestos a saciar nuestra sed y a acabar con las existencias del famoso vino de Colmenar. Nos dieron a probar un vino tinto que a mí me pareció un poco recio aunque muchos dijeron que estaba buenísimo (yo soy más de los ribera del Duero), un vino blanco buenísimo, fino y de gran calidad, otro vino un pelín dulce, también riquísimo y un moscatel bastante bueno, aunque las malagueñas dijeron que no se podía comparar con el de su tierra.
Y después de bien abrevados, nos fuimos a reponer fuerzas al restaurante, que todos teníamos un hambre de lobo. Y, además, llegábamos con más de media hora de retraso.
A todo esto el cielo amenazaba lluvia, negros nubarrones cubrían el cielo y soplaba un aire fino que se colaba por todas las costuras.

Nuestro restaurante, “Café Checa”, estaba en la misma Plaza así que hacia allí nos volvimos y pudimos, de nuevo, recrearnos con su belleza. Nuestra mesa estaba situada en el piso de arriba y tenían las mesas preparadas, digo bien con lo que mesas, porque no cabíamos todos en la grande y habían preparado otra un poco apartada para el resto. Este fue uno de los detalles que no nos gustó y protestamos debidamente


El menú consistía en platos típicos de Colmenar pues tienen su propia gastronomía: Queso de Colmenar, Croquetas, Patatas chulas y pozas. Este último plato tuvo una enorme acogida, consiste en un trozo de pan de pueblo al que se le ha quitado la miga y se rellena el hueco con un picadillo de cebolla, tomate y escabeche y aderezado con pimentón y sal. De segundo se podía elegir entre Patatas al desarreglo y Bacalao al horno.
Nosotros pedimos uno de cada para probar los dos y si la carne estaba rica, el bacalao era insuperable: sabroso, en su punto de cocción, meloso, suave, …Vamos que os juro que no he tomado un bacalo más rico en ningún otro sitio.


Y, naturalmente, pan, postre, bebidas.
Y mientras comíamos empezó a tronar y luego a llover. Todos decíamos, ¡va, es una nubecilla, pasará pronto! Ya veréis como cuando terminemos ya habrá escampado.
¡qué te lo has creído! Chuzos de punta caían cuando salimos


Y mientras hacíamos tiempo Pipi se fue a ver si le echaba cara al asunto y conseguía premios, muchos premios para otra rifa. Veréis, os cuento. El asunto es que hay una tarjeta gratuita que en las oficinas de información y cada vez que haces gasto en un establecimiento de algunos de los 5 pueblos adheridos, pues te dan puntos que puedes cambiar por regalos. Pero, estas tarjetas son familiares y no puedes cargar el gasto de un grupo a una tarjeta, pero….. Pues el hecho es que Pipi, con su carita de buen e inocente, consiguió un montón de regalos que luego se volvieron a rifar en el trayecto de vuelta.

Cuando salimos del restaurante corrimos todos como posesos, procurando taparnos con lo que buenamente podíamos pero el agua era implacable y acabamos todos calados como peces. Al final nos guarecimos en un soportal y alguien fue a buscar al autobusero para que viniera hasta allí a recogernos, mientras también le llamamos por teléfono para que estuviera preparado.
Y por fin llegó nuestro bus y abrió todas sus puertas y salimos disparados hacia ellas para poder resguardarnos del aguacero. Tuvimos que quitarnos los abrigos y dejarlos en los asientos vacíos del final, pues estaban empapados.
Y aquí estamos ¡por fin! Secos, calentitos, bien comidos y abrevados y la modorra se nos echa encima y Pipi coge el micrófono y nos cuenta que tiene un nuevo alijo para rifar y entretenernos un rato con la nueva rifa.
Y, de repente, empieza a llover en el bus. Justo encima del pasillo hay una gotera por la que se cuela el agua y cada vez que el bus toma una curva, salpica alegremente a los de un lado o a los de otro

A pesar de la lluvia, la caminata, la comilona y el buen bebercio, llegamos a Madrid en perfecto estado pero derrengados, así que decidimos que cada mochuelo se fuera a su olivo y nos volviéramos a ver de nuevo en el Palacio de Anglona, el restaurante que habíamos reservado para cenar esa noche.
Realmente necesitábamos este descanso pues, por ejemplo, yo tenía los pies empapados y estaba cansada y deseando una ducha calentita. Y eso es lo que hice en cuanto llegué. Yuna vez limpia, caliente y con ropa nueva me senté tranquilamente a descansar el ratito que me quedaba hasta la hora de volver a salir para la cena. ¡Qué paz! ¡Qué gusto sentarse en el sofá con el perro al lado!

¿Y qué le pasa al perro que tiene un ojo a la “virulé” y el otro a dos colores, mitad blanco y mitad rojo sangre?




Así que no os puedo contar lo que sucedió durante la cena pero, me he tomado la molestia de preguntar y me ha contado un pajarito que estuvo muy bien, que las cantidades no eran excesivas pero como se había comido de más pues tampoco había mucha hambre, que la comida estaba buena y que lo mejor fue la compañía y la charla amena y relajada.
El menú consistió en Salmorejo, ensalada de espinacas, croquetas, rollitos vietnamitas, tostas, tortilla de patata, tortellini y albóndigas, todo ello para compartir y postre.

Y después hubo fiestorro, el personal se fue a la sala que tienen para el copeo y allí se montó el jolgorio con bailongo y todo. Algunos acabaron la noche pasadas las 4 de la madrugada.