Nos costó bastante decidir la ruta (queríamos verlo todo, pero con 7 días era pelín complicado), pero quedamos bastante satisfechos con el resultado. Estuvo sujeta a cambios hasta el último segundo (pero literalmente, ya lo leeréis) y aun así creo que no la cambiaría: aprovechamos todo lo que pudimos y vimos más de lo que pensábamos.
Pues ahí va. Aunque incluya los días de desplazamiento y otro que pasamos de conexión en Londres, en total estuvimos 7 días en Noruega.
Día 1:
Salimos en bus a media tarde hacia Bilbao. El vuelo de Norwegian despega a las 20:35 y aterrizamos a cinco minutos antes de la medianoche en Oslo. Noche en la capital noruega.
Día 2:
Dedicado por completo a Oslo. A las 22:25 cogemos el tren nocturno (línea de Sørland) hacia la costa. Llegamos a Stavanger a las 7 de la mañana del día siguiente.
Día 3:
Dejamos las cosas en el B&B y nos vamos a hacer la excursión al Preikestolen. Volvemos sobre media tarde y pasamos el resto del día en Stavanger.
Día 4:
Stavanger por la mañana. A mediodía cogemos un autobús dirección norte y llegamos a Bergen sobre las 19:00. Paseo por la ciudad.
Días 5, 6 y 7:
Madrugón para coger el coche de alquiler y ruta durante tres días (tenemos que devolver el coche antes de las 16:00 del último día, ¡qué rabia!). La ruta no está decidida del todo, pero queremos visitar Gudvangen, Flåm, explorar el Sognefjorden (el fiordo más grande y profundo de Noruega), ver la iglesia de madera de Borgund, hacer la “carretera de las nieves” o el túnel más largo de Europa (los dos no se podía) y, si daba tiempo, acercarnos al glaciar de Nigardsbreen. El último día, a la vuelta, Bergen.
Día 8:
Nos queda la mañana para seguir visitando Bergen. Por la tarde tenemos el tren a Oslo, y rondando la medianoche nos encaminamos al aeropuerto para hacer noche allí. Nuestro vuelo a Londres sale a las 7 de la mañana del día siguiente.
Día 9:
Volamos a Londres y llegamos bien prontito. Tenemos todo el día para explorarlo.
Día 10:
También a las 7 de la mañana (malditos horarios intempestivos de Ryanair) despegamos de vuelta hacia Santander. Llegamos a casa a media mañana.
Pues ahí va. Aunque incluya los días de desplazamiento y otro que pasamos de conexión en Londres, en total estuvimos 7 días en Noruega.
Día 1:
Salimos en bus a media tarde hacia Bilbao. El vuelo de Norwegian despega a las 20:35 y aterrizamos a cinco minutos antes de la medianoche en Oslo. Noche en la capital noruega.
Día 2:
Dedicado por completo a Oslo. A las 22:25 cogemos el tren nocturno (línea de Sørland) hacia la costa. Llegamos a Stavanger a las 7 de la mañana del día siguiente.
Día 3:
Dejamos las cosas en el B&B y nos vamos a hacer la excursión al Preikestolen. Volvemos sobre media tarde y pasamos el resto del día en Stavanger.
Día 4:
Stavanger por la mañana. A mediodía cogemos un autobús dirección norte y llegamos a Bergen sobre las 19:00. Paseo por la ciudad.
Días 5, 6 y 7:
Madrugón para coger el coche de alquiler y ruta durante tres días (tenemos que devolver el coche antes de las 16:00 del último día, ¡qué rabia!). La ruta no está decidida del todo, pero queremos visitar Gudvangen, Flåm, explorar el Sognefjorden (el fiordo más grande y profundo de Noruega), ver la iglesia de madera de Borgund, hacer la “carretera de las nieves” o el túnel más largo de Europa (los dos no se podía) y, si daba tiempo, acercarnos al glaciar de Nigardsbreen. El último día, a la vuelta, Bergen.
Día 8:
Nos queda la mañana para seguir visitando Bergen. Por la tarde tenemos el tren a Oslo, y rondando la medianoche nos encaminamos al aeropuerto para hacer noche allí. Nuestro vuelo a Londres sale a las 7 de la mañana del día siguiente.
Día 9:
Volamos a Londres y llegamos bien prontito. Tenemos todo el día para explorarlo.
Día 10:
También a las 7 de la mañana (malditos horarios intempestivos de Ryanair) despegamos de vuelta hacia Santander. Llegamos a casa a media mañana.