La ruta a Rivendell es sencilla y agradable, siempre entre bosques típicos neozelandeses con densa vegetación y despedidos del parque por este ave, que veríamos bastante a lo largo del viaje, llamado Pukeko (corríjanme si me equivoco).
Se necesita una 1h aprox para llegar hasta Rivendell y el puente colgante que allí hay, y una vez allí, la verdad es que deja un poco frio, ya que aunque hay numerosos carteles orientativos de cómo estuvo todo montado, hay que tirar mucho de imaginación. En esta ocasión montaron y desmontaron todo para la película, y dejaron un tótem y un portal élficos bastante chulos, tipo este último al que aparece en la despedida de la Comunidad del Anillo al partir de Rivendell
Esta excursión esta ofertada desde Wellington en viajes especializados del señor de los anillos, ahí te muestran con fotografías/tablets los momentos en los que se puede mejor apreciar el lugar a tu alrededor, creo que es una de esas visitas que si merecería la pena hacer con guía.
Apuntar que si no sois unos yonkees del trekking como nosotros, se puede ir con el coche hasta el mismo Rivendell directamente, entrando por el aparcamiento llamado Pakuratahi Car Park.
Tras recoger nos ponemos rumbo a Wellington, pensábamos recorrer los puntos más importantes y dar una vuelta por sus calles, pero entre comer tranquilamente, hacer una compra de provisiones en el New World, y perdernos un poco en el coche por ahí… no vimos mucho la verdad, así que llenamos el depósito carísimamente y tiramos para el Ferry que no queríamos correr riesgos fatales para el desenlace de nuestro viaje.
La compañía elegida fue Interislander, ya que el horario era el que mejor se ajustaba a nosotros.
Wellington desde el Ferry.
El viaje se hizo muy cómodo, tiene todas las comodidades, sushi a 1NZ, wifi durante 3h, asientos donde puedes dormir si gustas… y para colmo final faltando 5min para llegar unos compañeros de viaje nos sorprendieron a los pocos valientes que nos atrevimos a salir para observarlos (llovía y hacia viento)
Esto unido a que pude reservar el aquataxi con mi cupón ARRIVAL vía emails durante el viaje para realizar la ruta de Abel Tasman al día siguiente hizo del viaje en ferry un gran viaje!
El camino hasta Abel Tasman se alargó más de lo esperado, carreteras lentas, y la noche cerrándose, hizo que en vez de dormir a la intemperie nos acomodásemos en un camping que ya teníamos fichado, el Barn, y muy bien que hicimos, camping muy agradable, muy internacional en sus huéspedes, y con muchas comodidades por 24NZ.
Se necesita una 1h aprox para llegar hasta Rivendell y el puente colgante que allí hay, y una vez allí, la verdad es que deja un poco frio, ya que aunque hay numerosos carteles orientativos de cómo estuvo todo montado, hay que tirar mucho de imaginación. En esta ocasión montaron y desmontaron todo para la película, y dejaron un tótem y un portal élficos bastante chulos, tipo este último al que aparece en la despedida de la Comunidad del Anillo al partir de Rivendell
Esta excursión esta ofertada desde Wellington en viajes especializados del señor de los anillos, ahí te muestran con fotografías/tablets los momentos en los que se puede mejor apreciar el lugar a tu alrededor, creo que es una de esas visitas que si merecería la pena hacer con guía.
Apuntar que si no sois unos yonkees del trekking como nosotros, se puede ir con el coche hasta el mismo Rivendell directamente, entrando por el aparcamiento llamado Pakuratahi Car Park.
Tras recoger nos ponemos rumbo a Wellington, pensábamos recorrer los puntos más importantes y dar una vuelta por sus calles, pero entre comer tranquilamente, hacer una compra de provisiones en el New World, y perdernos un poco en el coche por ahí… no vimos mucho la verdad, así que llenamos el depósito carísimamente y tiramos para el Ferry que no queríamos correr riesgos fatales para el desenlace de nuestro viaje.
La compañía elegida fue Interislander, ya que el horario era el que mejor se ajustaba a nosotros.
Wellington desde el Ferry.
El viaje se hizo muy cómodo, tiene todas las comodidades, sushi a 1NZ, wifi durante 3h, asientos donde puedes dormir si gustas… y para colmo final faltando 5min para llegar unos compañeros de viaje nos sorprendieron a los pocos valientes que nos atrevimos a salir para observarlos (llovía y hacia viento)
Esto unido a que pude reservar el aquataxi con mi cupón ARRIVAL vía emails durante el viaje para realizar la ruta de Abel Tasman al día siguiente hizo del viaje en ferry un gran viaje!
El camino hasta Abel Tasman se alargó más de lo esperado, carreteras lentas, y la noche cerrándose, hizo que en vez de dormir a la intemperie nos acomodásemos en un camping que ya teníamos fichado, el Barn, y muy bien que hicimos, camping muy agradable, muy internacional en sus huéspedes, y con muchas comodidades por 24NZ.