DIA 14: VIÑALES – CIENFUEGOS
Antes de subirnos a nuestro taxi colectivo,desayunamos bien tempranito 1 café y un sandwich de jamón y queso por 3CUC en nuestra casa.
El taxi pasó a recogernos sobre las 9. Al principio íbamos un poco asustados, porque Adrián nos dijo que no nos subiésemos con nadie que no fuese el amigo que nos había dicho que nos llevaría, pero este taxista pasó por alli, nos dijo: para Cienfuegos? Y hayá que fuimos! Además el taxi era enorme, cabían unas 20 personas y mientras iban subiendo nos dábamos cuenta que eramos los únicos que íbamos hacia Cienfuegos, lo que nos hacía preocuparnos aún más! Ya para colmo, cuando acabamos de recoger a todos, casa por casa, la policía paró al taxista y lo multaron! Supuestamente era porque había estacionado en un sitio que no debía haberlo hecho, pero todos pensábamos que fué porque sería taxista ilegial. Aún así continuamos allí subidos y ya entendimos que teníamos que hacer transbordo, que algunos seguirían para La Habana y los demás hacía su siguiente destino. Por el taxi pagamos 30CUC/persona y tardamos unas 5 horas y media en llegar.
Aquí nos alojamos en el hostal Lourdes, la señora era súper amable!! Nada más llegar lavamos alguna de nuestra ropa y la tendimos en un pequeño patio que tiene justo al lado del habitación.
Cienfuegos no tenía mucho que ver, así que decidimos salir a verlo todo: la plaza Martí, el teatro, el palacio y Punta Gorda, que por cierto, cuando estábamos llegando empezamos a ver que el cielo cada vez se ponía más oscuro y de repente empezó a llover! Pero no fueron 4 gotitas, no... Tuvimos que quedarnos una media hora debajo del porche de una casa intentando no mojarnos aún más y esperando a que escampara al menos un poco para poder volver, porque había "un trocito" andando.


A la vuelta, nos entró un poco de hambre y paramos en una gasolinera a comernos 2 pizzas jamón y queso, 2 Coca Colas y un paquete de galletitas por 103.75MN. Eso si, las pizzas no eran las mejores ni mucho menos!
Y continuamos andando hasta la heladeria Copelia, donde no se elige el sabor de helado, sino que te toca el que haya ese día! Era naranja y naranja-piña y la verdad es que estaba rico. El sundae valía 2.50MN y la bandejita 3.50MN.