Volamos desde Madrid con Qatar Airways a Colombo vía Doha.
Llegamos al aeropuerto de colombo de madrugada. Los trámites de inmigración fueron rápidos porque habíamos hecho el visado electrónicamente a través de la web www.eta.gov.lk/.
A la salida nos estaba esperando nuestro conductor y guía Dayan, lo habíamos contratado desde España para que nos llevase por todo el recorrido que queríamos hacer por el país y nos cobró unos 400€ en total, incluido el combustible. Se puede alquilar coche y conducirlo tú mismo, pero no lo recomiendo, ellos conducen muy "a su manera" y además por la izquierda, así mejor que lo haga un experto.

Los hoteles los reservamos por nuestra cuenta con Booking.
Tras los saludos, emprendimos el viaje a Habarana. Por el camino nos fuimos haciendo una idea de los paisajes del país, árboles frondosos y exuberante vegetación, todo muy verde, eso me encantó porque correspondía a la idea que yo tenía de cómo sería Sri Lanka.
Tras algo más de 3 horas, llegamos a Habarana. Habíamos reservado el hotel Cinnamon Lodge (321€ 3 noches). Solo viendo la recepción y el cálido recibimiento te hacías a la idea de la calidad del hotel. Cuando tras darnos la llave, nos acompañaron a la habitación y fuimos viendo el entorno en el que está ubicado, nos encantó. Las habitaciones están en edificios de dos plantas y bungalows, rodeando una laguna, la piscina era espectacular y vimos también un centro de masajes ayurvédicos.

La habitación nos gustó mucho, era amplia y bien decorada.

Quedamos con Dayan para el día siguiente y nos dedicamos a descansar y a disfrutar de la fantástica piscina.

Tengo que decir que en Sri Lanka, en la mayoría de los hoteles, dan alojamiento y comida de cortesía a los conductores, lo que también supone un ahorro para los clientes porque si no, sería un gasto a añadir al precio del tour.
Cenamos en el hotel, el restaurante está al borde de la piscina, todo estuvo muy rico y bien de precio.