En apenas 8 meses ya estamos de vuelta en Portugal, nos queda sólo 1km para cruzar la frontera
De nuevo, pasamos por Miranda do Douro ya que nos pilla de paso en nuestra ruta, pero será una visita muy breve ya que la hacemos como parada técnica para descansar y estirar las piernas, ya que tenemos que continuar viaje a nuestro próximo destino. A la entrada de Miranda, nos encontramos un camión cisterna de los bomberos súper grande. Aquí descansamos un rato y continuamos ruta.
A las 11h de la mañana, llegamos a Vila Real y nos reciben estas lindas buganvillas, me encanta esta planta, da mucha vibra
Nos vamos a ver la Iglesia del Buen Jesús del Calvario. La fachada está cubierta con azulejos en dos colores, azul y blanco y está coronada por el escudo de la orden tercera, a la que pertenece. Se encuentra en una plataforma que hace de mirador y que se eleva por encima de las murallas de la ciudad sobre el Jardim da Carreira con excelentes vistas. Sus orígenes se remontan a una pequeña capilla construida y financiada por una hermana religiosa, pero la estructura actual es fruto de la ampliación llevada a cabo por la Orden Tercera de San Francisco en el siglo XVIII. Es una iglesia de trazas tardo-barroca y neoclásica. Alberga en su interior varios retablos de talla dorada, destacando especialmente el Crucificado que preside el altar Mayor. No la vimos por dentro al estar cerrada. Alrededor de la iglesia hay un viacrucis formado por 15 cruces de granito, y las esculturas de San Francisco de Asís y Santo Domingo, talladas también en granito.
Muy cerquita se encuentra la Iglesia de San Pedro, que destaca por su capilla mayor decorada con azulejos policromados del siglo XVII que representan escenas piadosas y por su bello artesonado tallado y dorado y su fachada con dos imponentes torres con campanario que hacen de esta iglesia un ejemplar único en el municipio. El edificio original fue construido en 1528 y en él fueron introducidas varias alteraciones a lo largo del tiempo hasta conseguir la arquitectura que puede verse hoy en día. La mayor parte de las alteraciones fueron realizadas durante el siglo XVIII, de estilo barroco. El retablo mayor y las capillas son también de estilo barroco.
Cogemos el coche y nos vamos al Parque Corgo que está junto al río del mismo nombre, estando conectado con el Parque Forestal. Aquí encontrarás cancha polideportiva, merendero, piscinas municipales, parque infantil, cafés y salones de té en cuestión de ocio, pero también disfrutarás de un entorno natural muy bonito y relajante. Descansamos un rato y comimos algo antes de continuar viaje.
Después de comer y pasear un rato por el parque continuamos ruta a nuestro próximo destino, un lugar que teníamos muchas ganas de conocer
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