El día amanece soleado y sin viento, lo que nos hace afrontar con optimismo el plato estrella de este día y quizás de todo el viaje; el Tour de avistamiento de ballenas en el Eyjafjördur. Así que tras un animado desayuno en compañía de una familia francesa que conocimos en el alojamiento, partimos hacia Arskógssandur, un pequeños pueblo pesquero situado a pocos kilómetros de Hjalteyri desde donde se iniciará el tour. Reservamos el tour con el touroperador "Get your Guide" con varios meses de antelación. Esta opción cuenta con el atractivo de que puedes anular sin coste hasta la semana anterior de la fecha seleccionada y no te cobran nada hasta 4 días antes.
Tenemos hora a las 10, pero siendo previsores vamos con bastante tiempo de antelación. El punto de encuentro es el hotel Kali, situado junto a un pequeño puerto pesquero, donde llegamos sobre las 9. Allí, una amable recepcionista nos indica que en la salida de las 9 hay muy poca gente si nos interesa adelantar el tour, y hacia allá vamos. Son las 9 y cuarto y ya estamos dentro del barco pesquero, que por cierto es precioso. Tiene capacidad para 60 personas pero sólo somos 20 con lo que tendremos libertad de movimientos . Antes de zarpar, hacen la típica charla de seguridad y nos entregan un mono de cuerpo entero que nos protegerá del viento y el frío, parecemos astronautas.
Tenemos hora a las 10, pero siendo previsores vamos con bastante tiempo de antelación. El punto de encuentro es el hotel Kali, situado junto a un pequeño puerto pesquero, donde llegamos sobre las 9. Allí, una amable recepcionista nos indica que en la salida de las 9 hay muy poca gente si nos interesa adelantar el tour, y hacia allá vamos. Son las 9 y cuarto y ya estamos dentro del barco pesquero, que por cierto es precioso. Tiene capacidad para 60 personas pero sólo somos 20 con lo que tendremos libertad de movimientos . Antes de zarpar, hacen la típica charla de seguridad y nos entregan un mono de cuerpo entero que nos protegerá del viento y el frío, parecemos astronautas.

Durante el trayecto hacia las inmediaciones de isla de Hrísey, Kate, una bióloga marina que hace las veces de guía, nos explica que el fiordo está lleno de alimento para las ballenas, lo que le da al agua un color bastante oscuro. También nos comenta que conocen a las ballenas que acuden al fiordo a alimentarse , siempre son las mismas y les hacen un seguimiento continuado.

Durante las 2 horas y media que dura el tour, tuvimos ocasión de apreciar la belleza del fiordo desde el agua, así como las montañas nevadas y un buen número de cascadas que caen directamente sobre el mar. Los avistamientos de las ballenas en un principio resultaron algo caóticos. Suben a la superficie aproximadamente cada media hora a respirar, y es aquí cuando todos los barcos y lanchas rápidas que patrullan la zona en su busca se avalanzan sobre ellas, molestándose unos a otros. Así que, tras estar más de una hora en esa lucha con avistamientos bastante lejanos, Kate decidió tomar otra dirección lejos de la isla más hacia el interior del fiordo, y bien que acertó! Estábamos solos, y después de un buen rato de búsqueda, apareció unos metros a estribor una ballena. Hasta allí nos acercamos silenciosamente y pudimos apreciar a sus maniobras a escasos metros de distancia, fue increíble!! Estábamos nosotros solos apreciando aquel espectáculo de la naturaleza… sólo por esto ya valió la pena el viaje. El resto de embarcaciones se veían a lo lejos, seguían peleando por conseguir la mejor posición.

Durante este tour, tuvimos la suerte de conocer a un grupo de amigos Malagueños que nos fuimos encontrando el resto del viaje. Más adelante compartieron con nosotros información muy valiosa sobre las mejores ubicaciones para ver el volcán en erupción y las auroras Boreales que nos ayudaron mucho. Nos pasaron todos los videos de las ballenas, y nosotros a cambio les pasamos nuestras fotos. Gran colaboración!!

Durante la vuelta a puerto nos sirvieron un chocolate caliente con unos pastelitos de canela, una delicia acompañada de una interesante explicación sobre las ballenas que acabábamos de ver. En concreto , en los 5 avistamientos pudimos apreciar 2 ejemplares hembra de la ballena Minke, una especie de ballena barbada que puede alcanzar los 11 metros de largo y 10 toneladas de peso. La ballena respira de tres a cinco veces a intervalos cortos antes de 'sumergirse profundamente' durante dos a 20 minutos. Estas inmersiones profundas están precedidas por un pronunciado arco de la espalda. La velocidad máxima de natación de los minkes se ha estimado en 38 km / h, y se alimentan principalmente de arenques, anguilas y Krill, que se encuentran de forma abundante en las aguas del fiordo.

