
Nos trasladamos a Tavira y salimos del horno hotel de Albufeira.
Primera parada en Faro, se tarda 35 minutos, es la capital del Algarve con su amurallada Cidade Velha, es la única parte antigua que queda después del terremoto de 1755. Destaca su puerta de entrada Arco Da Vila, la Catedral en Largo da Sé y en la plaza da Libertade la iglesia do Carmo con sus dos torres iguales (dentro está la capilla de los huesos bastante descuidada, nosotros no entramos).

Desde aquí salen barcas para visitar las playas y la isla Barreta en la Ría Formosa.
Nos acercamos a Olhao que es un pueblo pequeño pero encantador, piérdete por sus callejuelas, su mercado… una manera de recorrer el pueblo es haciendo la ruta de las 5 leyendas. Algunas calles nos recuerdan a nuestra querida Grecia.
La ruta de las Leyendas:
Leyenda de Marim, Rua da Fábrica Velha
Leyenda de Floripes, Patrao Joaquim Lopes
Leyenda do Moura, largo da Gaibéu
Leyenda de Menino dos Olhos Grandes, Largo do Carolas
Leyenda de Arraúl, Largo Joao da Carma

Pasado el mercado están los puestos para comprar los tickets de los barcos que llevan a las diferentes islas, nosotros queremos ir mañana a Culatra, la ventanilla para comprar la abren como media hora antes de la salida de cada barco. (ida 9:00, 11:00, 15:00, vuelta 13:00, 15:30, 17:45, 20:00). Para aparcar el coche lo hemos dejado en el parking de un supermercado cercano, mañana haremos lo mismo.
Comemos en una cafetería de la zona bocata de atún, tortilla de camarones, napolitana y pasteis de nata.

Seguimos directos a la playa do Barril, aquí hay parking de pago, es zona de urbanizaciones. Al cruzar el puente está el tren que te acerca hasta la playa, también hay camino para ir andando, hace muchísimo calor y decidimos coger el trenecito. Andando dicen que son como 20 minutos.
El tren i/v 3’60€
Al llegar, la zona de las anclas está a la izquierda. Es muy fotogénica con sus casas antiguas de pescadores convertidas hoy en tiendas de artesanía y restaurantes, la playa es inmensa de grande igual que sus olas hoy… ¿¿¿ aquí tampoco me voy a poder bañar tranquilamente??? Odio el Algarve.
El cementerio de las anclas es un homenaje al asentamiento de los pescadores del pasado.

De aquí al hotel que está en plena plaza al lado del puente. Está genial el alojamiento, hoy cenamos en la habitación y a dormir.


Nos despertamos con vistas al puente de Tavira.
Tavira es un pequeño pueblo con encanto a orillas del río Gilao, callejuelas empinadas, casas encaladas, sensación de tiempo detenido y con su isla que es un pequeño paraíso natural de mar cristalino y dunas.

Vamos a Olhao y dejamos el coche en el parking del supermercado Continente. Al puerto desde aquí son como unos 10 minutos andando. La caseta de tickets abre 30 minutos antes de cada barco.
Nosotros cogemos i/v a Culatra (3’50€), otra opción que hace mucha gente es ida a Culatra y volver desde Farol. Hasta Farol se llega a lo largo de la playa como 40 minutos.
La isla Culatra tiene dos pueblos, Culatra y Farol unidas por la playa. Desde el puerto del barco hasta la playa se tarda unos 20 minutos por una pasarela de madera, el paisaje es impresionante.
También puedes ir a Armona, son islas estancadas en el pasado, calles de arena con pasarelas, casas de pescadores de colores, sin vehículos.

Nos alejamos de las hamacas que están en primera zona y luego ya estás prácticamente solo. Aquí hay menos olas que en el resto del Algarve, nos podemos bañar tranquilamente porque el agua tiene una temperatura normal, no congelada.
Comemos en Culatra en un restaurante más cercano al puerto, sanwich y tostadas de pollo y de queso de cabra con miel y una Caipirinha.
El barco de vuelta que cogemos es el de las 15:30, el siguiente es a las 17:45 y nos parece ya muy tarde y queremos aprovechar para dar una vuelta por Tavira que bien merece un paseo, para despedirnos nos tomamos unas tortitas y unos helados en la heladería debajo del hotel.
