Ya estoy hecho a los gallos y cada día duermo mejor. También al Nescafé, que me da hasta subidón. Hoy me apetece desayunar otra cosa, que encima no tengo Island Hoping, menos mal, ya estaba un poco harto de agua todo el día. Hoy voy a alquilar moto y a explorar por mi cuenta total, que es lo que a mí realmente me apasiona.
Desayuno arroz con pollo, para coger fuerzas desde tempranito y me voy a gitanear una motillo, aunque en Corón está la cosa cara, el más barato que encontré, 500 pesos 24 horas. Reggie, el de mi hostel, era eso pero 12 horas, así que se la alquilè a Boyet, el cariñoso, que no tenía las dos cualidades por excelencia del filipino clásico, ni era simpático ni era delgado. Pero bueno, dame el amotillo, te dejo el DNI, te doy 500 pesos, que no me bajó naaaa, y hasta el día siguiente a las 9:30 am.
Joder! Me sentía radiante subido a mi moto de 70 kilos, sintiendo la libertad total que me da ir en dos ruedas y sin ningún tipo de compromiso ese día.

El tío se enrolló lo máximo, y mira que parecía serio te al principio. Me pregunta si se nadar bien, le digo que si, nos quitamos los chalecos y al agua los dos. Me dió la vuelta a un islote con un montón de vida marina y preciosos corales. Él a una distancia, no me agobiaba lo más mínimo y me iba indicando de vez en cuando que si una tortuga, que si un pez tal, otro cual, y yo allí flipando. Después de una hora, nos subimos al barquito y nos vamos a otro islote, que recorremos nadando y haciendo snorkel como el anterior. Eché allí dos horas y media mágicas.


Después me fuí a una playita cercana llena de rostros pálidos,no recuerdo ni el nombre. Una horita allí y me voy a comer a una carendaria, euro y medio, arroz con pescado más un euro de la cerveza. Y ahora me voy a ver un pueblecito que se llama Guadalupe ,a algo más de una hora en moto.


Y ya me digo, ya que estoy aquí, tiro para las Seven Falls. Joer, me pasé al menos 6 kms por un camino de piedras que para mí lo quiero. Cuando encontré a alguien humano, le pregunté y me dijo que me había pasado. Pero si no he visto ni una indicación!
Doy la vuelta y ahora si que veo dos motos aparcadas. Está empezando a oscurecer, pero ya allí, en medio de toda esa naturaleza, tiro andando camino abajo y allí están dos adolescentes ingleses en calzoncillos, disfrutando de un baño en aguas dulces fresquitas.
Yo llevo el bañador puesto, así que me voy a la roca más alta y al agua a bomba. Me lo pasé de pm media hora allí con los chavales.
Salgo pitando con la moto, ya que quería subir al famoso mirador en el que están las letras CORON , a lo Hollywood encima de un monte. Llegué de noche, pero los colores de la bahía, eran preciosos, con todas las casas iluminadas. 735 escalones tiene la broma de subir allí. Y no contento con eso, me voy a ver un partido de baloncesto al aire libre, porque en Filipinas,
el baloncesto es el deporte Rey.
