Día 8: Viernes 22 de Agosto
A las 7 de la mañana bajo a poner el ticket del parking de una hora gratuito, y a las ocho le añado 3€, tendremos suficiente para visitar tranquilamente la ciudad en 6 horas.
Así que después de almorzar tranquilamente, y con el el sol saliendo entre las nubes de la mañana nos dirigimos hacia al centro de la villa. Fundada en el S. X, Skofja Loka es una joya medieval perfectamente conservada famosa por su arquitectura tradicional y su atmósfera. El centro histórico de la ciudad está dominado por el Castillo, construido en el S. XIII y por su pintoresca plaza principal donde se encuentra la Iglesia parroquial de San Jacobo. Cuando se construyó el castillo, la ciudad estaba rodeada de murallas, que tenían cinco torres y 5 puertas de entrada a la ciudad. Hoy en día se conservan aún algunos tramos de la muralla.
[align=center]Skofja Loka
Así que después de almorzar tranquilamente, y con el el sol saliendo entre las nubes de la mañana nos dirigimos hacia al centro de la villa. Fundada en el S. X, Skofja Loka es una joya medieval perfectamente conservada famosa por su arquitectura tradicional y su atmósfera. El centro histórico de la ciudad está dominado por el Castillo, construido en el S. XIII y por su pintoresca plaza principal donde se encuentra la Iglesia parroquial de San Jacobo. Cuando se construyó el castillo, la ciudad estaba rodeada de murallas, que tenían cinco torres y 5 puertas de entrada a la ciudad. Hoy en día se conservan aún algunos tramos de la muralla.

La ciudad también es conocida por sus festivales culturales y eventos folclóricos y aún se mantiene alejada de las principales rutas turísticas del país, lo que evita la masificación de turistas. En 1987, Skofja Loka fue declarada monumento Cultural.
La visita nos llevó alrededor de 2 horas, aunque nos encontramos el castillo cerrado por obras. De estar abierto la visita se habría alargado. Los lugares más destacados son el puente de los capuchinos (S. XIV), que presume de ser uno de los más antiguos puentes de piedra de Europa Central. Junto a este puente se encontraba una de las puertas de entrada a la ciudad, así como una de las torres de vigilancia. Poco antes de llegar al puente encontramos la Iglesia de los Capuchinos, que data de principios del S.XVIII, y aunque no llama mucho la atención, separa el casco antiguo de una parte más moderna de la ciudad.
Pasamos el resto de la mañana callejeando por las calles de una ciudad que te traslada a otra época. En la plaza donde se encuentra la iglesia de las monjas, tienes diversos lugares para hacer un break, y también puedes ver una maqueta del casco antiguo. Muchas calles con encanto y también muchas obras, lo que deslució un poco el paseo. Algo que nos llamó la atención, fue la gran cantidad de motivos religiosos que se pueden observar por el centro, no sabíamos que la religión católica estuviese tan arraigada en Eslovenia. Pero sin duda los mejor son las vistas desde la parte alta de la ciudad, con el río Selska como telón de fondo.

Tras tomar un tentempié en un bar situado junto a uno de los puentes que cruza el río, volvimos a la autocaravana, era la hora de comer y aún nos quedaba un rato del ticket del parking. Aprovechamos para comer y poner rumbo Ljubljana, la capital del país, pero antes pasamos por el LIDL para comprar provisiones, ya que disponemos de tiempo. Esta tarde la dedicaremos a buscar sitio para dormir en la capital y descansar después de días de emociones fuertes.
Total Recorrido: 30 Km.
Precio Área Ljubljana: 0 €
Día 9: Sábado 23 de Agosto
Amanece el día soleado en el área de Autocaravanas y campers a las afueras de Ljubljana donde hemos pasado la noche. Se encuentra frente a un restaurante en cuyo parking también puedes trasnochar las caravanas, pero éste es de pago. No nos quedó muy claro si el nuestro lo era y se pagaba en el mismo sitio, pero nadie pagaba, así que no pagamos.
Después de un buen desayuno, nos disponemos a visitar la capital del país. Nos encontramos a 1,5 Km del centro, pero el paseo no se hace pesado. Así que en menos de media hora ya estamos callejeando por el casco antiguo de la ciudad que, con sus calles adoquinadas y edificios coloridos te invita a descubrir los cafés, boutiques y galerías de arte que regentan sus calles. Así nos encontramos con la Plaza de la Ciudad (Mestni Trg), donde se encuentra el ayuntamiento y también una copia exacta de la Fuente Robba, el monumento barroco más importante de la ciudad. El original, datado en 1751, se encuentra en la Galería Nacional de Ljubljana. Aquí también puedes encontrar un buen número de tiendas de Suvenirs donde hacer tus compras de detalles para regalar y, a pocos metros, la Catedral de San Nicolás donde decidimos no entrar ya que había que abonar entrada. La verdad es que en su parte exterior no es nada del otro mundo.

De pronto nos topamos casi sin querer con la entrada al funicular que te lleva al Castillo de Ljubljana y nos decidimos a subir. La entrada familiar (dos adultos y un menor) con subida y bajada en funicular y subida a la torre sale por 46€. El castillo, que ofrece distintas atracciones, primeramente te encuentras con el patio de armas, que está rodeado por varios edificios. Recomendamos explorar cada rincón, ya que podréis encontrar todo tipo de exposiciones y museos sobre la historia del país, salas inmersivas, restos arqueológicos, una capilla gótica, un museo de marionetas y lo mejor de todo: la torre con vistas de toda la ciudad. Esta torre tiene la peculiaridad de que se sube y se baja por distintas escaleras de caracol, así no te cruzas con los que circulan en dirección contraria. Incluso tuvimos la suerte de presenciar cómo se realizaba un reportaje fotográfico de una boda, lo estaban haciendo en el castillo. De todas maneras creo que el precio es excesivo para las dos horas que dura la visita.

Tras salir del castillo, nos dirigimos hacia el mercado Central, ideal para pasear sin rumbo entre las paradas para acabar en el puente de los Dragones (Zmajski most), . Y es que los dragones son el símbolo de la ciudad y puedes encontrar representaciones por muchos rincones de Ljubljana. Y tras ver a lo lejos el original puente triple, dimos por concluida la visita y regresamos a la autocaravana siguiendo el curso del río Ljubjanica que atraviesa la ciudad. Pasamos por el Super (Merkator) para aprovisionar y tras la comida abandonamos la capital. La visita había sido breve pero bastante intensa.

