Empezamos este día en Dubai, ya que estuvimos de escala durante tres días para conocer la ciudad (otro diario que tengo que hacer,jajaja), y el vuelo salía rumbo a Tokio a las 02:50 de la madrugada.
Embarque muy bien, vuelo perfecto, servicio estupendo, comidas bastante bien...y entre una cosa y la otra llegamos a Tokio a las 17:25 hora local.

Nada más bajar del avión, todo es otro mundo, desde los carteles hasta el mismo aeropuerto en sí.
Hicimos la cola en inmigración, previo relleno de los papeles de inmigración y aduanas que nos proporcionan en el avión, todo muy ordenado.
Estaríamos en cola alrededor de 10 minutos, y una vez echa la foto de cara y tomarnos las huellas dactilares, un sellito en el pasaporte y adentro!!!.
Lo siguiente fue coger la maleta, que ya estaba en la cinta dado vueltas, y una japonesa con un cartel estilo "azafata del precio justo" paseándose por la cinta anunciando el número de vuelo.
Seguidamente fuimos a cambiar dinero, quise hacerlo en madrid y en dubai, pero la comisión por cambiarlo era tan exagerada, que me quise esperar, aunque no lo cambié todo, pero si lo suficiente como para estar en Tokio tranquilos, el cambio fue muy bueno, puesto que estaba el yen por euro a 117 y nos dieron 113, la verdad que no nos pudimos quejar.
Buscamos la oficina del tren KEISEI SKYLINER, ya que no íbamos a activar aún el JRPASS, y como nos quedábamos en Ueno, esta era la mejor opción para nosotros.
El trayecto de solo ida nos costó 2470 yenes por persona, y llegamos a Ueno alrededor de 40 minutos más o menos.
Salimos de la estación del KEISEI, y cruzamos la calle para coger el metro en dirección a nuestro hotel.
Sacamos una PASMO para cada uno, y una vez llegados al hotel, salimos a cenar y de regreso a descansar del vuelo tan largo y empezar a adaptarnos al horario, ya que los próximos días serían de andar mucho...