Como esta mañana tenemos visita guiada por Atenas, nos lo tomamos relativamente tranquilos.
Desayunamos debajo de casa (unos 4 €/persona) y nos dirigimos andando al Arco de Adriano, donde comienza la ruta gratuita:
FREETOUR ATENAS
En verano hay grupo en español a las 9:45 h. y otro a las 17:00 h. Todos los días.
La guía creo que era colombiana. Bien, pero al final se hizo un poco “pesadito” de tanto que nos explicó. El grupo de unas 20 personas.
Recomendable 100 %. Vista completísima de Atenas. Todo el tiempo andando. No se visita la zona de la Acrópolis. Hay que llevar mucha agua. Se puede comprar a un vendedor ambulante por 0,50 € una botellita helada, en un parquecito cruzando la avenida frente al Estadio Olímpico (mitad del recorrido).
Comenzamos con el Templo de Zeus. Bueno, con lo que queda de él.
Seguimos por un parque estilo romántico, hasta el edificio que alojó a los primeros atletas olímpicos en los primeros Juegos Olímpicos de la era moderna, celebrados en Atenas en 1896. El edificio es lujoso, todo en mármol por dentro, con columnas en estilo dórico, jónico y corintio. Actualmente se usa para acontecimientos de "alto nivel". Lo visitamos por dentro un rato.
Vemos por fuera también el Estadio Olímpico de los primeros juegos. Todo en mármol. Con capacidad para 50.000 espectadores. Aun se usa para celebrar algunos acontecimientos.
Hace un calor intenso, aunque vamos buscando las sombras para las explicaciones.
Junto al Palacio Presidencial...
cada hora hay un cambio de guardia. Más pequeñito que el que se produce cada domingo en la Plaza Sintagma, de lo cual ya hablaré.
La ventaja es que se ve más cerca y sin tanta gente.
Cruzamos el parque central de Atenas (con sus miles de ejemplares de árboles diferentes y sus cientos de tortugas) y llegamos a la famosa
Plaza SINTAGMA
Centro de tantas protestas, manifestaciones, huelgas y casi revoluciones. La preside el edificio del Parlamento.
Continuamos hacia la catedral. De camino, algo curioso: Se ha construido un hotel súper moderno pero han conservado debajo de su entrada una de las iglesias más antiguas de Atenas.
Llegamos a la Catedral Ortodoxa de Atenas. Lugar dónde se casó por este rito la Reina Sofía con el Rey Juan Carlos.
Más tarde visitamos las Ágoras (lo que podría ser nuestras plazas mayores de ahora), tanto la Griega como la Romana.
Terminamos la visita en el exterior del Templo EL HEFESTIÓN. Bestial.
Ha sido un recorrido increíble. Ha durado en total 3,5 h. (de 10:00 h. a 13:30 h). Se paga al final la voluntad. Casi todo el mundo pagó aproximadamente 10 €/pax.
Ha merecido la pena. A los niños se les hizo más pesado al final.
Finalmente, un grupito vamos con la guía de vuelta hasta Plaka, donde nos indica varios sitios para comer, especialmente en uno, y es donde nos quedamos, recomendable 100 %. Hablan perfectamente español. Comida totalmente griega, fresca y de calidad y aun precio similar o inferior al resto de la zona. Sombra con aspersores en la terraza, rodeados de árboles.
Buen colofón, para una gran mañana.
Por cierto, a nosotros nos ha gustado mucho Atenas. En muchos aspectos está decadente, pero es muy agradable, con muy bonitas casas, gran cultura, gente muy maja. Una gran ciudad.
Como estamos cerca de casa, a descansar. Siesta, internet, cambiarnos, etc.
Ha sido reparador.
A eso de las 18:30h., cuando el sol pega algo menos fuerte (aun así hará unos 33 grados a la sombra), cruzamos la calle y ya estamos en las taquillas para visitar la colina de la Acrópolis.
ACRÓPOLIS
Precio (2017): 20 € cada adulto, los menores de 18 años gratis. Hay una entrada de 30 € que incluye el resto de monumentos y recintos de Atenas, aunque se ven perfectamente desde fuera.
Hay que subir durante 1,5 kilómetros colina arriba. Mucho calor. Llevad mucha agua. Durante la subida se ven algunas columnas, edificaciones y los antiguos teatros que usaban los atenientes (pudientes) de la época.
Uno griego
y otro romano
Ya solo eso, merece la pena.
Al llegar arriba…el acabose.
En el mismo recinto se encuentran:
El Erechtheion
Con la fachada de las Cariátides (reproducción). Las originales están en el Nuevo Museo de la Acrópolis (luego las veremos).
El Propylaea, el Temple of Athena Nike y por supuesto, el archiconocido Patrimonio de la Humanidad (que solo por él ya merece el viaje),
EL PARTENÓN
Estar ante estas maravillas del mundo, al atardecer, que no calienta tanto, y viendo la ciudad a tus pies… es un momento único. En familia se disfruta más.
En esta se ve el nuevo y moderno museo de la Acrópolis.
Una hora y media y un millón de fotos después, salimos del reciento para ver anochecer desde la colina de la Acrópolis en un lugar especial en el que todos los días hay una gran grupo de personas (especialmente jóvenes) viendo cómo se pone el sol. Dos días seguidos con una experiencia igual. En el crucero que nos espera, todavía tendremos ocasión de disfrutar de anocheceres increíbles.
Una vez anochecido, bajamos la colina. Pasamos frente a la embajada de España que está en uno de los mejores lugares de Atenas.
A las 20:30 h. entramos en el NUEVO MUSEO DE LA ACRÓPOLIS.
Un edificio singular construido a la falda de la colina y con unas maravillosas vistas de la Acrópolis, especialmente de noche.
Los viernes el museo cierra a las 22:00 h. así que el plan para cerrar este día por Atenas no puede ser mejor.
Precio (2017): 5 € los adultos. Gratis los menores de 18 años.
El museo no es muy grande, pero tiene piezas únicas.
A mitad del recorrido, el plato fuerte. Las originales Cariátides que casi se pueden tocar.
El último piso del edificio está dedicado al Partenón. Con piezas originales y todos los espacios necesarios para que los británicos no pongan disculpas para devolver los objetos originales a los griegos con pretextos de que no pueden custodiarlos con garantías. En este edificio lo pueden hacer tan bien o mejor que en el British Museum, que se encuentran actualmente.
El museo se completa con una cafetería y restaurante para cenar con unas vistas y un ambiente relajado de primer nivel. El único problema que es un poquito caro para 4. Creo que para una pareja es un buen lugar para tener en cuenta.
Con una sonrisa de oreja a oreja. Salimos del museo hacia las 22:00 h., hora perfecta para ir a cenar al barrio de Plaka, llena de restaurantes y muy cerca de donde nos encontramos.
Finalmente cenamos en uno, casi pegado a donde comimos esta mañana. El reclamo es que la bebida es gratis (lo cual está muy bien para tomar una local muy fría).
La calidad peor que por la mañana, pero correcto. No muy caro. Muchas cosas no les quedaban.
Tras cenar y pasear por el bullicio de la zona, última visitilla a nuestra terraza favorita...
(similar vista AL RESTAURANTE DEL MUSEO)
A descansar que mañana madrugamos un poco para poder ir a visitar la ciudad de Delfos, dónde el famoso oráculo.
Desayunamos debajo de casa (unos 4 €/persona) y nos dirigimos andando al Arco de Adriano, donde comienza la ruta gratuita:
FREETOUR ATENAS
En verano hay grupo en español a las 9:45 h. y otro a las 17:00 h. Todos los días.
La guía creo que era colombiana. Bien, pero al final se hizo un poco “pesadito” de tanto que nos explicó. El grupo de unas 20 personas.
Recomendable 100 %. Vista completísima de Atenas. Todo el tiempo andando. No se visita la zona de la Acrópolis. Hay que llevar mucha agua. Se puede comprar a un vendedor ambulante por 0,50 € una botellita helada, en un parquecito cruzando la avenida frente al Estadio Olímpico (mitad del recorrido).
Comenzamos con el Templo de Zeus. Bueno, con lo que queda de él.
Seguimos por un parque estilo romántico, hasta el edificio que alojó a los primeros atletas olímpicos en los primeros Juegos Olímpicos de la era moderna, celebrados en Atenas en 1896. El edificio es lujoso, todo en mármol por dentro, con columnas en estilo dórico, jónico y corintio. Actualmente se usa para acontecimientos de "alto nivel". Lo visitamos por dentro un rato.
Vemos por fuera también el Estadio Olímpico de los primeros juegos. Todo en mármol. Con capacidad para 50.000 espectadores. Aun se usa para celebrar algunos acontecimientos.
Hace un calor intenso, aunque vamos buscando las sombras para las explicaciones.
Junto al Palacio Presidencial...
cada hora hay un cambio de guardia. Más pequeñito que el que se produce cada domingo en la Plaza Sintagma, de lo cual ya hablaré.
La ventaja es que se ve más cerca y sin tanta gente.
Cruzamos el parque central de Atenas (con sus miles de ejemplares de árboles diferentes y sus cientos de tortugas) y llegamos a la famosa
Plaza SINTAGMA
Centro de tantas protestas, manifestaciones, huelgas y casi revoluciones. La preside el edificio del Parlamento.
Continuamos hacia la catedral. De camino, algo curioso: Se ha construido un hotel súper moderno pero han conservado debajo de su entrada una de las iglesias más antiguas de Atenas.
Llegamos a la Catedral Ortodoxa de Atenas. Lugar dónde se casó por este rito la Reina Sofía con el Rey Juan Carlos.
Más tarde visitamos las Ágoras (lo que podría ser nuestras plazas mayores de ahora), tanto la Griega como la Romana.
Terminamos la visita en el exterior del Templo EL HEFESTIÓN. Bestial.
Ha sido un recorrido increíble. Ha durado en total 3,5 h. (de 10:00 h. a 13:30 h). Se paga al final la voluntad. Casi todo el mundo pagó aproximadamente 10 €/pax.
Ha merecido la pena. A los niños se les hizo más pesado al final.
Finalmente, un grupito vamos con la guía de vuelta hasta Plaka, donde nos indica varios sitios para comer, especialmente en uno, y es donde nos quedamos, recomendable 100 %. Hablan perfectamente español. Comida totalmente griega, fresca y de calidad y aun precio similar o inferior al resto de la zona. Sombra con aspersores en la terraza, rodeados de árboles.
Buen colofón, para una gran mañana.
Por cierto, a nosotros nos ha gustado mucho Atenas. En muchos aspectos está decadente, pero es muy agradable, con muy bonitas casas, gran cultura, gente muy maja. Una gran ciudad.
Como estamos cerca de casa, a descansar. Siesta, internet, cambiarnos, etc.
Ha sido reparador.
A eso de las 18:30h., cuando el sol pega algo menos fuerte (aun así hará unos 33 grados a la sombra), cruzamos la calle y ya estamos en las taquillas para visitar la colina de la Acrópolis.
ACRÓPOLIS
Precio (2017): 20 € cada adulto, los menores de 18 años gratis. Hay una entrada de 30 € que incluye el resto de monumentos y recintos de Atenas, aunque se ven perfectamente desde fuera.
Hay que subir durante 1,5 kilómetros colina arriba. Mucho calor. Llevad mucha agua. Durante la subida se ven algunas columnas, edificaciones y los antiguos teatros que usaban los atenientes (pudientes) de la época.
Uno griego
y otro romano
Ya solo eso, merece la pena.
Al llegar arriba…el acabose.
En el mismo recinto se encuentran:
El Erechtheion
Con la fachada de las Cariátides (reproducción). Las originales están en el Nuevo Museo de la Acrópolis (luego las veremos).
El Propylaea, el Temple of Athena Nike y por supuesto, el archiconocido Patrimonio de la Humanidad (que solo por él ya merece el viaje),
EL PARTENÓN
Estar ante estas maravillas del mundo, al atardecer, que no calienta tanto, y viendo la ciudad a tus pies… es un momento único. En familia se disfruta más.
En esta se ve el nuevo y moderno museo de la Acrópolis.
Una hora y media y un millón de fotos después, salimos del reciento para ver anochecer desde la colina de la Acrópolis en un lugar especial en el que todos los días hay una gran grupo de personas (especialmente jóvenes) viendo cómo se pone el sol. Dos días seguidos con una experiencia igual. En el crucero que nos espera, todavía tendremos ocasión de disfrutar de anocheceres increíbles.
Una vez anochecido, bajamos la colina. Pasamos frente a la embajada de España que está en uno de los mejores lugares de Atenas.
A las 20:30 h. entramos en el NUEVO MUSEO DE LA ACRÓPOLIS.
Un edificio singular construido a la falda de la colina y con unas maravillosas vistas de la Acrópolis, especialmente de noche.
Los viernes el museo cierra a las 22:00 h. así que el plan para cerrar este día por Atenas no puede ser mejor.
Precio (2017): 5 € los adultos. Gratis los menores de 18 años.
El museo no es muy grande, pero tiene piezas únicas.
A mitad del recorrido, el plato fuerte. Las originales Cariátides que casi se pueden tocar.
El último piso del edificio está dedicado al Partenón. Con piezas originales y todos los espacios necesarios para que los británicos no pongan disculpas para devolver los objetos originales a los griegos con pretextos de que no pueden custodiarlos con garantías. En este edificio lo pueden hacer tan bien o mejor que en el British Museum, que se encuentran actualmente.
El museo se completa con una cafetería y restaurante para cenar con unas vistas y un ambiente relajado de primer nivel. El único problema que es un poquito caro para 4. Creo que para una pareja es un buen lugar para tener en cuenta.
Con una sonrisa de oreja a oreja. Salimos del museo hacia las 22:00 h., hora perfecta para ir a cenar al barrio de Plaka, llena de restaurantes y muy cerca de donde nos encontramos.
Finalmente cenamos en uno, casi pegado a donde comimos esta mañana. El reclamo es que la bebida es gratis (lo cual está muy bien para tomar una local muy fría).
La calidad peor que por la mañana, pero correcto. No muy caro. Muchas cosas no les quedaban.
Tras cenar y pasear por el bullicio de la zona, última visitilla a nuestra terraza favorita...
(similar vista AL RESTAURANTE DEL MUSEO)
A descansar que mañana madrugamos un poco para poder ir a visitar la ciudad de Delfos, dónde el famoso oráculo.