Hoy es nuestro último día en la city y estamos con mucha pena, las maletas ya están listas y nos vamos a despedir de la city, no nos hemos ido y ya tenemos ganas de volver.
Primero nos vamos a la Central Station que es otra de las bellezas que hay que repetir siempre que se viene y en la foto aunque lo parezca, noooo no estoy simulando estar meando en la pared jajajajaja es la sala de los susurros, si te pones en una esquina y la otra persona en otra, susurras algo y se oye perfectamente. Aquí nos echamos unas risas diciendo chorradas.
Vamos al metro para llegar a ver el paseo de las antiguas vías del tren que están en la 30th st /11 Av el metro llega muy cerca, hay ampliación de línea de metro hasta aquí. La estación es muy nueva y están renovando toda la zona. Las escaleras mecánicas del metro son mega empinadas.
Este paseo en verano tiene que ser muy agradable en verano, hay zonas para sentarse, tomarse tu café y pasear tranquilamente. También se ven casas curiosas con ventanales donde nos saluda un perro.
¿¿¿ Ves al gorrión ???
Nos vamos al ombligo del mundo a echar un último vistazo a Times Square, Rockefeller y Bryant Park
Para despedirnos nos vamos a comer a Five Guys en Rockefeller que aquí comprobamos que siguen dando los cacahuetes, si no te apetecen coge algunas para luego porque están verdaderamente ricos.
Ahora ya sí que nos despedimos de la gran manzana, queremos volver al apartamento con tiempo para reorganizar las maletas (compras última hora), coger metro, airtrain, pasar aduanas…..
Ha sido un viaje intenso pero muy bien aprovechado, viendo cosas nuevas y recordando tantas otras, es una ciudad a la que hay que ir al menos una vez en la vida, pero ten cuidado que engancha y querrás volver una y otra vez. Mira que la primera vez que fui no me convencía para nada el viaje y me volví una de tantas personas enamorada profundamente de Nueva York.
El vuelo fue rapidísimo porque teníamos viento a favor con lo que conlleva turbulencias pero el vuelo duró 5 horas y media, una auténtica gozada. Ver a unos amigos en la estación de tren fuer el colofón del viaje, no tanto fue el viaje en tren hasta Donosti que se nos hizo un poco insoportable y más por la muñeca de una niña y la niña y su madre con la cancioncita de frozen…. vamos me faltó bien poquito levantarme y tirar a la muñeca por la ventanilla del tren.
FIN