QUE HACER DURANTE TRES DÍAS EN OSLO ✏️ Blogs de Noruega

Empezamos a utilizar el Oslo pass sobre las 11 de la mañana, cogiendo el ferry desde Aker brygge hasta Bygdoy, donde se encontraban la mayoría de los museos que queríamos visitar.
Como estaba lloviendo, empezamos por los cubiertos, Frammusset (museo de los barcos que llegaron a los polos, en uno de ellos pueden entrar dentro del barco), Kon-Tiki Museet, (en los que puedes ver unos barcos de juncos, con los que se cruzó el pacífico) y Museo Marítimo (para mi, el menos interesante). De ahí, y en bus, nos desplazamos a ver el museo del holocausto, en el que estuvimos una media hora y cogiendo de nuevo el bus, nos dirigimos al Vikingskipshuset o museo de los barcos vikingos, donde pudimos ver algunas de las piezas de la época de los vikingos que allí aparecen. Cerca de éste (aunque fuimos también en bus, ya que era gratis) nuestro último museo de la zona fue el Norks Folkemuseum, el museo del pueblo noruego. Es un museo al aire libre, con casitas de diferentes épocas, en las que puedes entrar e incluso encontrar algún aldeano de la época que te explique un poco cómo se vivía en aquel entonces.
Sobre las 16:00, cogíamos de nuevo el Ferry para llegar a la fortaleza Akershus, en la que entramos y pudimos ver el castillo por dentro.
Sobre las 17, cierran casi todos los museos de Oslo, por lo que cogimos el metro (línea 6), desde Karl Johans, hacia el lago Songsvann, un sitio precioso, en el que dimos un paseo (más corto de lo que nos hubiera gustado, ya que estaba bastante nublado).
Volvimos a Oslo y nos desplazamos en tranvía (líneas 18 y 19) al Ekebergparken, en el lado opuesto de Oslo. Es una zona de montaña, con muchos árboles, en la que puedes ir paseando e ir encontrando diferentes obras de arte. Llegamos allí sobre las 19:00 y salimos de allí sobre las 20:30. En noruega amanece muy pronto y anochece tarde.
Queríamos cenar en la plaza Olaff, así que volvimos a coger el tranvía hacia el centro y allí, la línea 13. No encontramos lo que buscábamos y acabamos cenando en el Burguer King…. Carísimo!!! Nos costó lo mismo que la cena en el vietnamita de la noche anterior.
Sobre las 22:30 estábamos llegando a casa, literalmente reventados…

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Era el último día de nuestra estancia en la ciudad, así que madrugamos un poquito e “ignorando las protestas de nuestro cuerpo maltrecho” jeje, cogimos el autobús de las 9:18 hasta Drobak (con el Oslo pass, nos costó 30 coronas a cada uno).
Las “Casa de papá Noel y de los duendes” estaban cerradas, ya que no abren los domingos, así que nos dedicamos a pasear por el pueblo, por la playa (si, tiene una pequeña playa), buscar la parada del ferry de Oscarbor (que finalmente encontramos, pero que no podíamos coger por tiempo) ver la iglesia por fuera, y volver al puerto (la parada de ferry está pasadas las sirenas, con las que nos hicimos fotos) para coger el ferri (número B21) que nos llevaría haciendo un minicrucero por el fiordo de Oslo, hasta el Aker brygge. Cogimos el crucero a las 12:40, y enseñando el Oslo pass (que por cierto, se nos había caducado mientras esperábamos a subir al barco, cosa que no miraron), nos cobraron 20 coronas por el viaje a cada uno (más barato que el bus). Este viaje es totalmente recomendable ya que el barco va haciendo paradas a lo largo de las diferentes islas para dejar y recoger gente (es un transporte público) por lo que haces un crucero, por un precio muy bajo.
A las 14:10 estábamos en el puerto, y queríamos aprovechar para visitar el Ayuntamiento por dentro (no olvidéis ir a la parte trasera, es bastante bonita), pero estaba cerrado (por alguna razón que desconozco), pero sí vimos en la zona delantera una pequeña exposición de arte.
De ahí fuimos a la Galería nacional de arte, situada detrás de la universidad, cerca del parlamento, (que tiene entrada gratuita los domingos), y pudimos ver las diferentes colecciones de arte de diversas épocas que allí se encuentran, incluido uno de los ejemplares de “El Grito” de Munch, así como otras de sus piezas (la niña enferma, la madonna…) . Salimos de allí a las 16:00 y nos acercamos a ver la catedral por dentro, pero ya había cerrado, por lo que nos desplazamos de nuevo en tranvía hasta la zona de la plaza Olaf donde tomamos café en una cafetería que hace esquina(calle Grüners) que según nuestro anfitrión, tenía el mejor café de la ciudad. (y la verdad es que era muy bueno. Ojo, cierra a las 5). Si tenemos en cuenta que muchos cafés de la zona son cafés recolados…. Este era espectacular.
De ahí, y dando un paseo, nos dirigimos a comprar los últimos detalles que habíamos olvidado y de nuevo a nuestra casa, para preparar las maleta, ya que nuestro avión salía de madrugada.
Lo dejamos todo preparado y nos acercamos a un restaurante de sushi (con un precio similar a los españoles), que estaba en una placita a 1 minuto de nuestro apartamento, y sobre las 10:30, estábamos durmiendo.
A las 3:30 de la madrugada sonó el despertador, y como lo teníamos todo preparado, no tuvimos más que vestirnos y acercarnos a coger el bus a la estación, que salía a las 4 de la mañana (en combinación de nuevo con los vuelos de Ryanair).

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En conclusión: 3 días, en los que como podéis leer, no paramos ni un momento, pero que valieron la pena. Estaba un poco asustada porque había leído que la ciudad era muy fea, y aunque no es París, tiene su encanto, unido a unos parque preciosos en el interior de la ciudad , ríos, y naturaleza por todas partes en sus lindes. Es fantástico tener un lago tan cerca de una ciudad industrial, así como unas vistas como las que se pueden disfrutar desde el ferry.
Los almuerzos y las comidas los hicimos todos a base de bocatas (que rellenábamos de lo que habíamos traído de España), dejando las cenas para comer por ahí.
El Oslo pass está muy bien, y más que amortizado en cuanto entras a dos o tres museos ( 38€ por persona el de 24 horas). Calculado por lo bajo, lo que hicimos con él nos habría costado unos 100€ o más a cada uno.
El bus del aeropuerto a Oslo vale unos 28€ por persona con descuento de estudiante (vale cualquier carnet). Para el Oslo pass piden el carnet semestral (que no teníamos).
Los horarios no son muy diferentes a los nuestros (aunque comen y cenan antes puedes cenar a las 22:00 en muchos sitios) y en cuanto al pago, en prácticamente todas partes se puede pagar con tarjeta (incluso en los autobuses…). Los supermercados tienen unos horarios muy amplios, de 7 de la mañana a 23 de la noche, pero no abren los domingos.
Si vais a ver museos, controlad bien los horarios, ya que cierran todos bastante pronto.
Y como punto final, deciros que entre el avión (107€), la estancia (165€) el Oslo pass, los bocatas, los detallitos que compramos, las 3 cenas, el bus…… nuestro viaje salió por unos 300€ por persona, bastante barato hablando de Noruega.

Un saludo y espero que os sirva de algo!!

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