Viajando al paraíso prácticamente gratis - Maldivas 2016 ✏️ Blogs de Maldivas

Cerrad los ojos e imaginad (luego abridlos para seguir leyendo Nuestra cámara sumergible no hace buenas fotos con tanta oscuridad, así que el material gráfico para esta etapa flojea

*** Imagen borrada de Tinypic ***

Hace tiempo que quería hablaros de una de nuestras mejores experiencias viajeras, hacer snorkel nocturno en Maldivas ha sido una de las cosas más increíbles que hemos hecho nunca y aún nos emocionamos al recordarlo.

Hicimos mucho amistad con los chicos del Royal Inn Rasdhoo, especialmente con Ahmed y uno de los días nos propuso hacer snorkel nocturno con ellos, no lo ofrecían como actividad para los huéspedes, pero nos dijeron que ellos lo hacían y que nos encantaría.
El atolón de Rasdhoo tiene uno de los mejores fondos marinos de toda Maldivas y es uno de los lugares favoritos de los buceadores.

Mi cara de susto era importante y tenia un debate interno porque me daba un poco de miedito, Edu se hacia el valiente, pero tenia el mismo susto que yo, pero finalmente nos decidimos y fue la mejor decisión que pudimos tomar.

Quedamos a las 6pm, de noche cerrada ya, nos subimos en el barquito, ellos 3 y nosotros 2, sin más herramientas que gafas, tubo, aletas y una linterna por persona.
Ahmed nos explicó como encenderla y apagarla y nos dijo que siempre enfocáramos hacia abajo y sin más explicación, "al agua patos".

La sensación de verlo todo oscuro y únicamente iluminado aquello que enfocaban nuestras linternas, no me tranquilizó mucho en un principio, pero la vista era increíble,

Por la noche el agua cambia totalmente, es más fácil ver peces, ya que muchos duermen en el fondo o cerca de los corales, otros simplemente duermen flotando, las morenas salen a cazar ... es un espectáculo realmente impresionante.

Mientas nadábamos veíamos cada vez más y más peces y más movimiento entre los corales. Peces que no habíamos visto en ningún momento por el día. Había una tortuga durmiendo con los ojos cerrados y con la cabeza y patas fuera del caparazón, bajo un coral y esto hacia más difícil ser presa de los depredadores nocturnos. Estábamos muy muy cerca de ella y la despertamos un poco sin querer con la luz de las linternas, pero siguió durmiendo sin hacer mucho más movimiento, fue precioso, nos emocionamos muchísimo! Era la primera vez que veíamos una tortuga y tan cerca y relajada.

Seguimos nadando y ante nosotros apareció un tiburón, de coral, pero bastante grandecito, Ahmed lo iluminó con la linterna, sus ojos brillantes los tengo grabados en la retina. No había pasado mucho tiempo cuando Ahmed nos miró e hizo señal de que apagáramos las linternas, quedando todo a oscuras con la sola iluminación de la suya... (música de suspense...) .Al salir nos explicó que el tiburón llevaba ya un rato nadando en círculos, cosa que hace con sus presas, y aunque sea de coral, por la noche es cuando salen a cazar, así que... imaginad el susto!

Vimos un par de tiburones más, estos pasaron de largo; pero no dejaba de rondarme la idea de que pudiera estar detrás de nosotros, aunque me girara, no se veía nada más que oscuridad!
Vimos también un pez león impresionante (cuidado con tocarlos que son altamente venenosos); una majestuosisima mantarraya nadando con ese movimiento elegante que las caracteriza y una morena con cara de muy pocos amigos, el mejor momento para verlas es sin duda de noche y un montón de peces más.

Saqué la cabeza un par de veces para ver donde estábamos exactamente y se veía Rasdhoo a lo lejos, el cielo estrellado y un mar en calma negro, negro, nada más.

Después de algo más de una hora y agotada, más por la tensión que por nadar, hicimos luces y el barco vino a buscarnos, volvimos a Rasdhoo con la sensación de haber vivido algo increíble y los seguimos recordando con la misma emoción.

Un año después volvimos a Maldivas, esta vez la isla elegida fue Omadhoo y volvimos a hacer snorkel nocturno, cerca de uno de los arrecifes de la isla que ya habíamos visitado de día, fue espectacular, aunque no vimos tantos tiburones como la primera vez, las morenas estaban buscando su cena, aunque la primera experiencia es la que realmente nos marcó para siempre, increíble.

Si vais a Maldivas, que no os asuste la oscuridad del fondo marino, la experiencia vale muchísimo la pena!

Precio de la actividad 30- 35 $


*** Imagen borrada de Tinypic ***

Como ya os he comentado, las fotos son un horror, pero para que podais entender "la oscuridad"

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