LA VUELTA AL MUNDO EN 3 SEMANAS ✏️ Blogs de Global

El jueves 24 de mayo nos dimos el penúltimo madrugón del viaje para coger el siguiente vuelo: a las 10:15 salía nuestro avión de la compañía Delta desde el aeropuerto internacional de Denver con destino a LaGuardia, en Nueva York. 534 € los tres billetes incluyendo maletas, que facturamos aparte. Tras devolver el Hyundai a eso de las 7:30 un shuttle nos acercó al aeropuerto, que tiene esta forma curiosa desde el cielo:


Pues sí, tiene forma de cruz gamada... Resulta que sobre este lugar existen un montón de teorías conspirativas, historias sobre masonería y secretos ocultos que incluyen a antiguos nazis, pasadizos subterráneos que comunican con el cercano Rocky Mountain Arsenal National y rituales iniciáticos sobre sociedades secretas... No hay más que hacer una búsqueda en google para asombrarse sobre lo que hay publicado sobre este aeropuerto:




El vuelo salió puntual y tras cuatro horas aterrizamos en LaGuardia sobre las 16:00 horas. El aeródromo está ampliándose, así que las obras complican el tráfico mucho más de lo que lo debe estar habitualmente; por lo que el proceso de recogida del (último ya, por fin) coche del viaje fue un poco más lento de lo habitual. La reserva era con Alamo, y nos entregaron un Ford Escape nuevecito por el que pagamos 219 € por tres días, incluyendo la tasa one-way ya que lo devolvimos en Boston. Una vez instaladas las maletas en el coche pusimos rumbo al Woodbury Common Premium Outlets, centro comercial muy conocido y en el que ya habíamos estado el año anterior, que era el momento que teníamos previsto desde antes de iniciar el viaje para hacer algunas compras. La verdad es que el tráfico en Queens era horrible y nos llevó más de dos horas completar un trayecto que en circunstancias normales no pasaría de 50 minutos; lo que hizo que apenas dispusiésemos desde las 7 hasta las 9 para recorrer el enorme mall y hacer las compras previstas:



Al anochecer, una vez que cerramos el centro comercial, nos dirigimos a nuestro último alojamiento del viaje, un hotel que también conocíamos del pasado año: el Meadowlands River Inn, en Secaucus (Nueva Jersey). Lo elegimos por varios motivos: económicamente porque no tiene comparación con lo caros que resultan los hoteles en Manhattan; y porque está perfectamente ubicado al lado de una parada de autobús en la que se puede coger el 320 (4,25 $ el trayecto por persona), que te deja en la Port Authority de la 8ª avenida con la calle 42 en 20 minutos escasos. Pagamos 251 euros por una habitación triple con desayuno decente y aparcamiento, dos noches.

Tras descansar de una jornada que se había hecho larga, el viernes día 25 nos dispusimos a disfrutar de nuestro último día completo de vacaciones paseando por Manhattan, que ya conocíamos bien de viajes anteriores (en mi caso era la cuarta visita que hacía a la isla). Tomamos nuestro café habitual en Bryant Park (Joe Coffee: 10,21 $ por dos cortados), visitamos la Biblioteca Pública de Nueva York y pusimos rumbo al sur alternando las avenidas 5ª, 6ª y 7ª con Broadway, parando en muchas tiendas, plazas y parques:







Comimos en el Whole Foods de Greenwich St. (41,00 $) y por la tarde curioseamos por las tiendas del SoHo, el centro comercial Century 21 (lleno de españoles, como siempre) y la nueva estación del World Trade Center, con su llamativo Oculus:





Al atardecer subimos andando por la Quinta Avenida hasta la Port Authority para coger el bus de vuelta, no sin antes darnos un último garbeo por Times Square. Tras aprovisionarnos para la cena en el Walmart que teníamos casi al lado del hotel (enorme, baratísimo y abierto 24 horas) nos retiramos a descansar, que además había que dejar lista la maleta para emprender el regreso a casa. Al día siguiente, check-out muy temprano y carretera hasta Boston, en donde cogeríamos el vuelo de Tap Portugal con destino a La Coruña vía Lisboa. Tras aproximadamente cuatro horas y media de viaje aparcamos el coche en el parque Boston Common, en pleno downtown, y en las dos o tres horas que nos quedaban hasta dirigirnos al aeropuerto paseamos por los primeros tramos de la Freedom Trail, esa línea roja adoquinada que transcurre por los puntos más estratégicos del centro de la ciudad. Ya la habíamos recorrido unos años antes, por lo que nos resultó muy familiar. Era el último fin de semana del mes de mayo, es decir, que estábamos en pleno Memorial Weekend, lo que significaba que íbamos a ver la bandera norteamericana por todos lados:







Comimos algo ligero en un Paul de la calle Washington (18,14 $ por un café, una coca cola light y dos pasteles), tomamos un helado en el Common, pagamos el parking (18 $ por unas tres horas) y nos dirigimos al aeropuerto, dando prácticamente por finalizado nuestro ESPECTACULAR viaje alrededor del mundo. Sólo nos quedaba subirnos al avión, hacer una escala en Lisboa tras poco más de seis horas de vuelo y, hora y pico después, aterrizar sanos y salvos en nuestra casa de La Coruña (por cierto, muy bien los vuelos con Tap Portugal: la tendremos en cuenta para nuestros próximos saltos al continente americano. )

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Bueno, pues llega el momento de hacer un breve resumen de datos, valoraciones y opiniones. Empiezo con unos cuantos recortes de documentos en word donde recojo gastos de hoteles, alquileres de coches y vuelos. Para los alojamientos siempre busco en booking.com; conmigo siempre se portaron bien cuando hubo algún problema, y tengo que decir además que encuentro el mejor precio habitualmente. Los coches los termino reservando en autoeurope.es; y para los vuelos siempre, siempre consulto primero en skyscanner, aunque reconozco que muchas veces termino en las páginas de las propias compañías aéreas:




Y también dejo unos pantallazos de las rutas principales por Australia, por el medio oeste americano y el trayecto Nueva York - Boston:




Vamos con algunas consideraciones:

- Dar una vuelta al mundo en tres semanas es una auténtica locura. Pero una vez más nuestro pequeño grupo viajero puso de manifiesto lo que llevamos comprobando muchos años: en cuestión de viajes, querer es poder. Nosotros sólo disponíamos de ese tiempo, y queríamos hacer esto. Así que, sin más, lo programamos, lo preparamos, nos concienciamos y lo hicimos. Pero es una locura, qué duda cabe...

- Fumar puede resultar complicado en según qué sitios. En Singapur hay ciertas restricciones para introducir tabaco en el país, pero no es tan fiero el león como lo pintan: se supone que escanean todo el equipaje en busca de cigarrillos, alimentos, semillas... pero al final todo es más laxo de lo que parece. En Australia pasa algo parecido. Nosotr@s nos pasamos de prudentes y no llevamos más de una cajetilla cada uno, pensando en comprar el tabaco en ruta; pero aunque llevábamos asumido que nos iba a salir caro, terminamos pagando por el vicio mucho más de lo que pretendíamos: hasta 14 euros por cajetilla en Singapur, 12 en Melbourne, 11 en Hawaii y bueno... en el continente americano ya fue el despiporre total por el tema de la libertad de precios que tienen los yanquis en todo: llegamos a pagar unos 11 euros en Las Vegas y poco más de 6 en Georgetown, Colorado por cada paquete de Marlboro.

- Conducir en Australia es una auténtica maravilla, al menos en mi experiencia. Incluso en las ciudades: yo lo hice por los downtown de Melbourne, Canberra y Sidney y sí, hay tráfico, pero nada que ver con lo que te encuentras en Europa, y no digamos en Asia. La gasolina está a un precio muy similar al de España, incluso algo más barata por lo bien que estuvo en mayo el cambio dólar australiano / euro (por otro lado, el cambio dolar USA / euro estuvo horroroso para nosotros...). Y los trayectos, sobre todo la Great Ocean Road, son fantásticos y muy fotogénicos.

- Lo que más nos gustó del viaje: Hawaii. Sólo estuvimos en la isla de O'ahu, pero es una auténtica maravilla. Qué playas, qué selvas, qué montañas... Eso sí: Honolulu es la peor ciudad norteamericana para conducir. Sólo tienen una autopista y da la sensación de que siempre está colapsada, así que desplazarse desde Waikiki a cualquier parte de la isla require de grandes dosis de paciencia. En segundo lugar yo me quedo con Monument Valley. Ya lo conocíamos; pero da igual las veces que lo veas, en persona o en películas: impresiona la inmensidad del terreno, la majestuosidad de The Mittens, Merricks Butte, John Ford's Point... Increíble de verdad. Y tengo que hacer una mención a la piscina del hotel Marina Bay Sands de Singapur: es una turistada y una boutade, lo sé. Pero diosssssssss... ¡qué vistas...1

- Una vez en la vida hay que darse una vuelta por el medio oeste americano. Como ya dejé constancia en las etapas del viaje, las carreteras de Arizona, Utah y Colorado quitan el hipo a cualquiera; y si te gusta conducir es, probablemente, una de las mejores experiencias que puedes vivir como conductor. En esta parte del país la gasolina sí es más barata, y fuera de las ciudades el resto de la vida también es más asequible, al menos para el turista.

- En Aspen, Colorado sufrimos un poco con la altitud. Tiene 2.438 metros de elevación sobre el nivel del mar, y se nota. Sobre todo por las mañanas, cuando sentíamos un ligero mareo, cansancio y cierta dificultad al respirar. Muy leve todo, pero para quien vive al borde del mar como nosotr@s la sensación era un poco extraña. Allí hacen bromas con ese asunto (los souvenirs, por ejemplo, tienen frases como 'need oxygen yet?'), pero esas mismas bromas te alertan de la necesidad de tomar precauciones.

- Algo que tenemos muy claro los tres es que la tarjeta de crédito cada vez está más extendida como único medio de pago en Occidente. Nosotr@s cambiamos cien euros en dólares singapurenses, otros cincuenta en dólares australianos y otros tantos en dólares USA, pero sólo por si acaso: sí, en algunos sitios de carretera de Hawaii o de Australia sólo admitían cash, pero son poquísimos. Y cada vez más también se usa el móvil como medio de pago, sobre todo la gente más joven. Pudimos comprobar, por cierto, que en USA no necesitan ni siquiera datáfono: conectan un pequeño lector a la tablet o incluso al teléfono móvil y con la aplicación adecuada lo convierten en una máquina de cobro. Firmas con el dedo en pantalla y punto. Me entró curiosidad y al llegar a casa comprobé en Amazon que sí, esos artilugios están a la venta pero únicamente funcionan en Estados Unidos, Australia y Japón. Pero esos sí que son realmente el futuro.

Poco más puedo añadir. Por suerte hemos podido disfrutar de muchos viajes estos últimos años, pero ahora teníamos muchas ganas de hacer una pequeña locura como esta.

Y estuvo muy, muy bien. ;). La próxima vez elegiremos, no sé... ¿la Luna...?

¡Gracias por llegar hasta aquí!




::ACTUALIZACIÓN DEL 12 DE JULIO DE 2018::
(comentario de otra de las Viajeras: Ángeles)

Hola a todos, acabo de leer el blog y recordar a través de las palabras y las fotos el estupendo viaje que hace apenas dos meses realizamos, y lo primero que viene a mi cabeza es lo difícil que es expresar con palabras e incluso con imágenes las sensaciones que uno experimenta cuando viaja.
Cómo contarle a nadie el azul del cielo de Monument Valley, su tierra roja, los interminables horizontes de Nevada, Arizona o Utah; el muro que rodea Moab que parece una trampa de la que nunca podrás salir, la exuberante vegetación que te envuelve en la isla de Oahu (incluso los centros comerciales se montan alrededor de árboles), las montañas que recorren el estado de Colorado con sus cumbres nevadas a finales de mayo y pueblos como Aspen o Vail que parecen directamente traídos de la Suiza más exclusiva; la sensación de bañarse rodeada de surfistas en la exótica Honolulu!!!! Eso sólo lo veía en las pelis!!!!!; y mil sensaciones más que podría intentar describir pero que creo ya ha hecho eldemontealto estupendamente a través de estas páginas, así que sólo voy a añadir un par de cosas:
primero, que estos viajes tan estupendos son posibles gracias al impresionante trabajo previo que hace antes eldemontealto. Empieza a prepararlo meses antes, consulta vuelos, hoteles, carreteras, alquiler de coches, países, ciudades, pueblos, y lo hace con absoluto mimo a través de todas las herramientas de las que hoy disponemos, google maps, booking….. todo ese curro que hace que nosotras nos dediquemos a disfrutar del propio viaje y poco más… con lo cual todo es mucho más fácil para nosotras, así que gracias cari.
Segundo, que a la pregunta típica de ¿y qué fue lo que más te gustó? que tan difícil resulta responder, contestaría Hawaii. ¿Por qué? Porque me sorprendió enormemente, porque esperaba un Benidorm y me encontré con una isla completamente distinta, quizás Honolulu sea una ciudad como muchas otras pero guarda toda la esencia de la isla pese a la multitud de turistas, porque desde que llegas sientes que estás en el otro lado del mundo… Y el resto de la isla sigue pareciendo virgen, playas preciosas que piensas que a lo mejor nunca pisó nadie… rodeadas de palmeras, de montañas, vegetación exuberante por doquier y flores!!!! La flor hawaiana que todas las mujeres llevan en el pelo, síiiiii esas que yo creía que sólo salían en las pelis y no!!! Tú llegas a Hawaii y lo primero que haces es ir a comprar la flor para el pelo y cuando te vas te ponen tu collar y todo parece natural, nada impostado. Me encantó, así que mahalo Hawaii.
Y por último contaros que lo que más disfrutamos en este viaje, creo que coincidimos los tres, fue el viaje en carretera (road trip?). Realmente todas las horas pasadas en el coche parecieron pocas porque tanto en Australia como en Estados Unidos el camino fue immmmmpresionante. Atravesar estados como Utah, Arizona y Colorado en USA en coche te deja sin aliento así que no os lo penséis mucho y si tenéis la oportunidad hacedlo ya!!!!!

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