Danubio en bicicleta ✏️ Blogs de Austria

Tras habernos estrenado el año anterior con varias excursiones de un día alrededor de la Bretaña, este verano nos decidimos a realizar nuestra primera ruta. La Passau – Viena es, seguramente, la ruta cicloturista más popular de Europa, y la que cuenta con mejores infraestructuras y servicios enfocados específicamente al turismo en bicicleta. La ruta se encuentra dentro de la Eurovelo 6, siendo este su tramo más popular.


Por qué elegimos esta ruta?

Tras habernos estrenado el año anterior con varias excursiones de un día alrededor de la Bretaña, este verano nos lanzamos a nuestra primera gran ruta. El recorrido es prácticamente llano en su totalidad. La principal dificultad fueron las altas temperaturas debidas a la ola de calor que padeció Austria durante estos días. La Passau – Viena es, posiblemente, la ruta cicloturista más popular de Europa, y la que cuenta con mejores infraestructuras y servicios enfocados específicamente al turismo en bicicleta. Se trata, por tanto, de un recorrido ideal para iniciarse en el mundo del ciclismo con alforjas.


Alquiler de las bicis


Cerramos alquiler de las bicicletas antes de salir de Madrid, con Bikehaus, en el centro de Passau. Ofrecen la posibilidad de recoger las bicicletas en Passau y devolverlas a la llegada a Viena, simplemente, dándoles la dirección del hotel donde estamos alojados. En nuestro caso, al salir del hotel de Viena, dejamos las llaves del cierre al recepcionista del hotel y no volvimos a saber más, señal de que pasaron a recoger las bicis y no hubo ningún problema.

Las bicis eran de trekking con 7 marchas, con el cierre incorporado en la rueda trasera. Estaban perfectamente adaptadas al recorrido y no tuvimos ningún problema mecánico durante el viaje.


Características de la ruta


Completamente llana y por asfalto, por carriles bici segregados del tráfico. Transcurre paralela al Danubio, aunque, en ocasiones, se adentra en diferentes poblaciones o a través de bosque y campos agrícolas, lo cual se agradece para no caer en la monotonía del paisaje. En casi todo el recorrido, existe carril bici en las dos orillas del río. Solamente, hay que tener en cuenta la localización de los puentes de acuerdo con nuestro destino final o los puntos que queramos visitar.

A lo largo del camino, hay multitud de pueblecitos donde parar a descansar o a tomar algo, y pequeñas playas donde hacer un picnic o refrescarse, aunque incluso en plena ola de calor, el agua del Danubio nos pareció demasiado fría.

Como señalaba anteriormente, la ola de calor que padeció Austria en áquellos días, supuso la mayor de las dificultades.


Hoteles


Reservamos los hoteles a través de booking.com. En todos los destinos nos alojamos en pequeños hoteles familiares, excepto en Linz donde dormimos en un hotel más grande y en Melk, que lo hicimos en un hostel. En todos ellos existía un lugar habilitado para dejar las bicicletas por la noche.


Lo que más nos gustó


La zona fronteriza entre Alemania y Austria, y, principalmente, la zona del meandro de Schlögen, cuyos paisajes son, sencillamente, espectaculares.

A nivel general, lo cuidado de la ruta y el enfoque centrado en el cicloturismo.


Y lo que menos

El calor!! Y quizás el tramo entre Tulln y Viena, con menos encanto y con la depresión de ser el último día.

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Volamos con las alforjas desde Madrid hasta Viena. Aterrizamos a mediodía, y nos dirigimos a la Viena Hauptbahnhof para coger el tren a Passau (2horas, 24 euros). Compramos el billete en la estación y allí mismo comemos algo antes de salir.

Llegamos a Passau y salimos a dar una vuelta por el centro y las inmediaciones del río, donde encontramos un tradicional Biergarten, donde se servía cerveza, carne a la barbacoa, y, por supuesto, salchichas alemanas. El lugar tenía mucho ambiente y nos quedamos a cenar.



Passau (50mil habitantes), es conocida como la ciudad de los tres ríos, al encontrarse en la confluencia de los ríos Danubio, Eno e Ilz, cuyas aguas tienen una tonalidad azul , verde y oscura, respectivamente, generando un curioso contraste. El centro histórico tiene su encanto, con las casas bajas típicas de Baviera y destacando la Catedral de San Esteban. Tanto el centro de la ciudad, como la orilla de Danubio, contaba con bastante animación en esta época del año.

En Passau, nos alojamos en el hotel Attium (75 euros, habitación doble sin desayuno), situado a 5 minutos andando del centro.

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Desayunamos en una cafetería del centro y nos vamos a recoger las bicis, sin embargo, nos comentan que todavia no las tienen listas y que deberiamos esperar en torno a una hora, asi que, aprovechamos para pasear por el centro de Passau.

Finalmente, salimos de Passau sobre las 11, en una ruta perfectamente señalizada, a pesar de que los primeros kilometros transcurren al lado de una carretera principal.


Cuando llevamos una hora de camino, decidimos hacer la primera parada del día. Sólo vamos a estar un día en Baviera, y debemos parar en algun Biergarten. Elegimos uno curioso, con decoración texana, y tomamos la primera jarra de cerveza de la ruta. Reanudamos la marcha, y el camino, poco a poco, abandona el lateral de la carretera para adentrarse en el bosque. Paramos a comer sobre el km. 30, en un camping con zona de baño junto al rio en el que aprovechamos para refrescarnos. Ya por la tarde, sin darnos cuenta, cruzamos la frontera con Austria y, tras cruzar el río en una pequeña barca, nos dirigimos hacia el meandro de Schlögen, la principal atracción del día, y una de las imágenes características de esta ruta. El lugar no decepciona, es impresionante la sensacion de recorrer las curvas que va dibujando el rio entre la frondosidad del bosque.


Nos alojamos a orillas del Danubio en el Idylle am Donaufer Hotel (55 eur, habitacion doble con desayuno). Pequeño hotel familiar, situado, como su propio nombre indica, en un paraje idílico, y que tambien cuenta con restaurante, donde cenamos.

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