Recorriendo Italia en coche (Florencia, Roma, Venecia y más). ✏️ Blogs de Italia

Nos esperaba un nuevo día en Florencia. Nos levantamos pronto y fuimos directos hacia nuestra primera parada en la ruta del día, el Palazzo Pitti. Vimos solo el exterior, nos hubiese gustado visitar los jardines de Bóboli, pero no había tiempo suficiente, como tampoco lo había para la Galería Palatina, que también quedó pendiente.

Seguimos hacia el Ponte Vecchio, paseando entre la gran cantidad de joyerías que se encuentran en él. Es el puente más antiguo de la ciudad y sin duda uno de los lugares mas fotografiados de Florencia.

Nuestra siguiente parada en la ruta era, de nuevo, la Galería de la Academia. Como dije, no llevábamos entradas pues pensábamos que no las necesitaríamos pero el percance del día anterior nos había hecho cambiar los planes. Cuando llegamos la cola para entrar era enorme, y solo pensábamos en que nos iba a ser imposible completar el itinerario del día. Después de unos minutos de espera nos enteramos que en una librería situada justo enfrente de la entrada a la Galería vendían las entradas con un pequeño suplemento para entrar al museo a partir de las 16,00 h con acceso directo. Así que eso hicimos, compramos nuestras entradas y continuamos con el recorrido planificado.

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Eran casi las 16,00 h, así que había llegado el momento de volver (por tercera vez desde que estábamos en Florencia ) a la Galería de la Academia. Con nuestras entradas pasamos directamente y una tras otra, recorrimos todas las salas del museo hasta, por fin, entrar a la sala del David, donde al final de la misma se encuentra imponente la estatua de Miguel Ángel. Me quedo con la boca abierta , de verdad me impresiona mucho más de lo que hubiese podido imaginarme, y las proporciones, simplemente, son perfectas. Y a pesar de no poderse hacer fotos, se nos escapa alguna…

Sin duda, la visita mereció la pena, y la espera del día anterior también. Continuamos hacia la Iglesia de San Lorenzo, vimos el exterior del Palacio Medicci, seguimos hacia la Plaza de la Republica para llegar por fin, al mercado del Porcellino y tocarle el hocico a la famosa estatua, volveremos a Florencia!!!

Y, para terminar, no pudimos acabar mejor el día que visitando la Plaza de la Signoria, la mayor plaza de Florencia. Me encantó el lugar, lleno de esculturas entra las que destaca la réplica del David de Miguel Ángel, y con el imponente Palazzo Vecchio dominado la plaza, palacio que es en la actualidad la sede del ayuntamiento de la ciudad. Y aprovechando que era gratis, entramos hasta el primer patio del palacio para poder ver "algo" del interior. Después cenamos en la misma plaza, en la terraza de un restaurante (no recuerdo el nombre ) mientras algunos músicos tocaban junto a las mesas, el ambiente era genial. La verdad es que recuerdo aquella noche cenando en la Plaza de la Signoria como uno de los momentos más especiales del viaje .

Nuestra visita a Florencia se acababa, habíamos pasado día y medio en la ciudad, poco sin duda para lo que tiene que ofrecer. Florencia nos encantó, nos pareció una ciudad hermosa y fácil de recorrer a pie. La mayoría de sus obras de arte y arquitectónicas de encuentran agrupadas en un "pequeño" centro histórico que como digo es muy accesible.

Florencia, en mi opinión, se merece al menos tres días si se quieren conocer todos sus rincones y visitar sus museos. Nosotros, a pesar de haber estado sólo día y medio, nos llevamos la sensación de haber aprovechado el tiempo al máximo.

👉 Ver Etapa: Un día completo en Florencia. ⏫ Volver arriba Compartir:

Nos levantamos por la mañana diciendo hasta pronto a Florencia. El destino final del día de hoy es Roma pero la idea es aprovechar el día visitando la ciudad de Siena.

Cuando llevábamos más de media hora de viaje vimos el desvío a San Gimignano en la carretera. Aunque ya habíamos hablado sobre la posibilidad de visitar el pueblo este día, finalmente desechamos la idea por falta de tiempo y decidimos que sería mejor centrarnos en Siena y conocer a fondo la ciudad. Pero habíamos madrugado mucho… y pensamos que era posible acercarnos a San Gimignano aunque no para visitarlo a fondo, sino con la única idea de hacer la típica fotografía del pueblo con sus torres.

La idea de desviarnos del itinerario inicial nos permitió ver unos paisajes que de otro modo no hubiésemos conocido: el típico paisaje toscano, con suaves colinas y muchos muchos viñedos. Me encanta!

Pero no conseguimos divisar la famosa vista de San Gimignano, y eso que entramos y salimos por diferentes carreteras con el fin de hacer la conocida foto. Al final, la mejor instantánea que conseguimos de las torres de San Gimignano es esta …

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Ahora si, nos pusimos rumbo a Siena, a menos de media hora de San Gimignano. Al llegar dejamos el coche en el Parking de S. Caterina. Este parking se encuentra justo al lado de unas escaleras mecánicas que te suben hasta al centro de Siena, al lado de la Piazza del Campo y la Piazza del Duomo. La verdad es que Siena está llena de cuestas muy empinadas y esto te evita subir a pie todo este tramo. Esta información la tenía gracias a Xaica, la verdad es que una vez allí lo agradecí muchísimo porque nos ayudó mucho a no perder el tiempo buscando parking, una de las muchas veces que me han ayudado desde el foro .

Compramos las entradas para la catedral, museo de la ópera, cripta y baptisterio, todo por 10 €. Lo primero que hacemos es dirigirnos al Museo de la Ópera para subir al Panorama del Facciatone, por una estrecha escalera de caracol de 131 escalones. La subida no se hace muy pesada y las vistas merecen mucho la pena. La panorámica de Siena es excelente.

Nuestra siguiente parada es el Duomo, sus suelos de mármol están adornados con más de 56 escenas bíblicas e históricas. Nosotros tenemos la suerte de verlo completamente descubierto. Las fechas en las que se desvela todo el pavimento del Duomo son entre el 21 de agosto y el 27 de octubre.

Bajando un tramo de escaleras desde el Duomo llegamos a la Cripta, descubierta en 1999, con sus paredes cubiertas de pintura. Y, finalmente visitamos el Baptisterio de San Giovanni, situado enfrente de la cripta. Nuestra última parada en Siena antes de marchar a Roma no podía ser otra que la Plaza del Campo, en la que anualmente se celebra Il Palio, la famosa carrera de caballos.

Para llegar a Roma aún nos faltaban 2 horas y media. Ya casi anocheciendo llegamos a la capital italiana, teníamos por delante cuatro días completos para conocer la ciudad…

👉 Ver Etapa: Un paseo por la Toscana: San Gimignano y Siena. ⏫ Volver arriba Compartir:

Nos levantamos pronto con la ilusión de que en unas horas íbamos a hacer la visita a la Necrópolis Vaticana (en la primera etapa del diario cuento como realizar esta visita). Teníamos hora a las 9,45 y sobre las 9,30 nos dirigimos a la Guardia Suiza que hay junto al columnario izquierdo de la Plaza de San Pedro, tal como indicaba el papel que enviaron al realizar la reserva de la visita. Nos recogieron las reservas y pasamos el primer acceso con control de seguridad incluido, unos metros mas tarde el proceso se repitió, nos volvieron a pedir las reservas y por fin llegamos al punto de encuentro para acceder a la Necrópolis. Éramos solamente siete personas, y la visita duró aproximadamente hora y media y es muy recomendable. Si tenéis oportunidad no dudéis en hacerla pues merece mucho la pena.

En la visita a la Necrópolis está completamente prohibido hacer fotografías, por lo que no tengo ninguna para ilustrarla, pero si queréis haceros una idea de lo que váis a ver durante la visita podéis acceder a la visita virtual de la página del Vaticano. Y juzgar vosotros mismos si merece la pena...

Después de ver la “supuesta” tumba de San Pedro, punto último del recorrido por la Necrópolis, salimos a las grutas vaticanas y desde ahí teníamos acceso directo a la Basílica de San Pedro. Pasamos algo más de media hora en la Basílica, vimos la Piedad de Miguel Ángel y la tumba de Juan Pablo II, trasladada desde las grutas vaticanas al interior de la Basílica.

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Había reservado la entrada a los Museos Vaticanos a las 14,00 h, pero a las 13,30h ya habíamos terminado de comer así que nos dirigimos a los Museos Vaticanos. Desde la Basílica de San Pedro hasta el acceso a los museos hay 1 km aproximadamente, cuando llegamos apenas había cola para entrar, y nos dejaron acceder media hora antes sin problemas.

La verdad es que los Museos Vaticanos son inmensos, pasamos allí mucho tiempo recorriendo todas las salas, hasta llegar al final del recorrido: la Capilla Sixtina. Vimos entre otras obras (en las fotografías inferiores) Laocconte y sus hijos, el Torso de Belvedere, la sala de los mapas y la famosa escalera helicoidal. A medida que el número de las salas disminuía nos íbamos encontrando más cerca del destino final, y por fin, accedimos a la Capilla Sixtina, que en la actualidad es la sede del cónclave donde los cardenales eligen al nuevo Papa.

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👉 Ver Etapa: Primer día en Roma: El Vaticano. ⏫ Volver arriba Compartir: