3 Semanas de Septiembre en Nepal 2011 ✏️ Blogs de Nepal

Ya tocaba hacer uso del mismo transporte del que hacen uso los nativos, y os puedo asegurar que no es una experiencia que querría repetir si se pueve evitar, se puede regatear pero nosotros tampoco lo intentamos, pillamos el billete en el hotel por 500 rupias, y a primera hora de la mañana nos fuimos a coger el autobus.

Fueron unas horas muy duras en un autobus que lo mismo tenía 50 años, por una carretera (la única en esa dirección del pais) que a ratos no estaba asfaltada, con atascos, con un calor de aupa y con pinchazo incluido... una experiencia poco agradable y aunque son solo 100 km son muchas horas, con suerte creo que 5, pero nosotros tardamos 6 horas y media.

Cuando llegamos a Sauraha había un montón de gente de los hoteles esperando en jeeps para convencer a la gente de que se hospedase en su lugar. Se que se están ganando la vida pero a mi me ponen nervioso así que salimos andando hacia la zona de hoteles, hay un montón y todos muy parecidos asi que no os voy a recomendar el nuestro. Supongo que casi todos como el nuestro tienen restaurante, aire acondicionado y mosquiteras, aseguraros de que tiene de todo que merece la pena, el calor y la humedad son bastante insufribles. Además todos tienen buenos jardines:


Cuando dejamos las cosas y nos sentamos a descansar unos minutos ya era casi de noche, así que fuimos a dar una vuelta hasta llegar a una especie de playa fluvial con varios bares con tumbonas que hacen que el lugar sea ideal para ver el atardecer.



Las barcas que estaban ahí varadas atraían a pasear por el río como haríamos un par de días despues... pero la mañana siguiente tras hacer todas las reservas de actividades llovió de forma copiosa y aunque no nos detuvo las ganas no eran tantas y más sabiendo que había cocodrilos:


Por la tarde dimos un paseo en:


No es muy comodo pero te permite ir dentro de la selva sin seguir caminos a mirar los animales más de cerca. Nosotros lo mejor que vimos es la típica estampa que siempre te pinan de un rinoceronte con un pajarito encima. Además vimos un monton de gacelas, cocodrilos pequeños que hay por allí... estuvo bien.


Por la noche cenamos en uno de los restaurantes del pueblo. La verdad es que poco importa, despues de un día cansado cualquier lugar es bueno.

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Y llegó la primera aventura en la naturaleza. Habíamos contratado un día con guías, lo podéis hacer en cualquier hotel o agencia del lugar y el precio variará bastante. Por vuestra cuenta eso si imposible y en todo caso hay que comprar un permiso a los militares para poder entrar.

Empezamos cogiendo las canoas que os he enseñado de la etapa anterior y bajamos río disfrutando del paisaje que nos permitía ver el paseo. Vimos ghariales, una especie de cocodrilos con la boca muy fina, elefantes y un montón de pajarillos.




Y finalmente las canoas nos dejaron en el lado del río en el que está la selva. Todo el día de un lado a otro, lo que más vimos fueron insectos si os digo la verdad:




Y el día era caluroso y con un buen sol que se entreveía entre los árboles... hasta que paramos a descansar, el cielo se nubló y nos vimos en medio de una catarata de media hora:



Es lo malo de ir en época aun de lluvias. Tras el descanso andamos hasta un refugio que hay en medio del parque natural en el que hay una reserva de cría de ghariales:


La verdad es que vistos de cerca no dan tanto miedo.

Y despues de la comida el día volvía a ser soleado y caluroso.


Las vistas todo el día eran una maravilla.

Decir que lo único realmente desagradable fue la cantidad de sanguijuelas... nos pillaron varias, pero vamos, que la única palabra es desagradable, porque doler no duele y lo malo es que la herida tarda mucho en cerrarse, y cuando digo mucho es que 24h despues muchas de las veces seguían saliendo gotitas de sangre.

Antes de salir del parque natural nos llevaron a ver unas crias de rinoceronte que habían recogido los militares:


Volvimos en jeep, parándonos a ver monos que dentro del parque natural eran más vergonzosos pero que fuera parecen gustarse de la compañía humana.

Una vez de vuelta a Sauraha nos despedimos de la selva desde la playa ya que el día siguiente partíamos hacia la zona de los Annapurna.

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Toca escapar del la selva para viajar a la montaña. El autobus lo reservamos en el hotel y a primera hora volvimos al martirio de un autobus de linea nepalí, otra vez mucho calor, los baches en la "carretera" y nuevamente tráfico.

Nada más llegar a la estación de largo recorrido de Pokhara un montón de "agentes" de los hoteles vendrán a convenceros de ir a su hotel. Nosotros nuevamente pasamos de ellos y cogimos un taxi por 150 rupias que nos dejó en la zona de los turistas, el "lake side". Y una vez allí nuevamente nos asaltaron varios "agentes" otra vez, y ahora si entramos a ver varios hoteles y regateamos. Tras media hora nos quedamos con uno, no tiene sentido que os diga cual es porque muchos eran parecidos pero este simplemente le pudimos regatear más (decir que en algún hostal conseguimos rebajar el precio a un tercio de lo que nos pidieron de primeras, al final pagamos 450 rupias por cada habitacion doble).

Tras un primer paseo vimos anochecer junto al lago Phewa.


Al día siguiente comenzamos a prepararnos para las etapas siguientes. Lake side está lleno de tiendas de material de montaña (muchas veces de baja calidad). Fuimos a sacarnos los permisos para entrar en el parque natural de Annapurna (obligatorio para poder hacer cualquier ruta). Hay que sacar 2 permisos, el primero en el centro de conservación, y si vais sin guía/serpha (como nosotros) os harán ir a un segundo lugar que os indicarán (no está muy lejos) a registraros.

Este día en la retina nos quedó la cantidad de gente haciendo parapente.



Y despues de comer comenzamos el ascenso a Sarangkot, la montaña al norte de Pokhara. No es más que un aperitivo de lo que se va a hacer si entrais a Annapurna pero si hace bueno (no como a nosotros) podréis observar la cordillera sin nada que os estorbe.


Al final del día hablamos con el dueño de nuestro hotel para que nos consiguiera un taxi para ir a la parada de autobús que nos llevaría a la siguiente etapa. De restaurantes... hay un montón y casi todos están bien en Lake Side, a lo largo de los días probamos un montón aunque yo muchas veces acabase tomando un solomillo de buff (cabra) que es un plato que me hizo la vida más fácil (yo lo tomaba con ajo y gengibre, pero también lo hay con queso y ron por ejemplo) y por poco más de 230 rupias. Nos acostamos pronto, había que descansar que el día siguiente a las 7 comenzaríamos las primeras jornadas de montaña.

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