DIA 29 DE DICIEMBRE ✏️ Diarios de Viajes de Emiratos A. U.

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A las 8:30 ya estaba despierto, más o menos como en España. La diferencia es que a esa hora el sol está ya más alto de lo que estamos acostumbrados y hay más vida ya por la calle. Algo parecido ocurre para los que conocemos las zonas de Caribe. Hemos estado pensando por dónde empezar las visitas. El problema es que al estar en casa de familiares dependes un poco de todos y no puedes ir de independiente total. Así que mientras unos terminaban de arreglarse y otros de hacer las cosas que tenían pendientes del día a día, nosotros decidimos coger el coche y adentrarnos en la ciudad sin un rumbo fijo. Nos sirvió de punto de referencia la torre más alta del mundo, el Burj Khalifa y hacía allí fuimos

Entramos en el parking del Dubai Mall (www.thedubaimall.com) , el centro comercial más grande del mundo con 1200 tiendas. Os puedo asegurar que cualquier otro centro comercial que hayáis conocido, es de risa al lado de este. Encontrareis todas las marcas internacionales que busquéis y también españolas, restaurantes de todo tipo de comida, etc etc. En el interior del centro comercial está el acuario más largo del mundo (aunque yo he visto el de Valencia y pasé de entrar…), una cristalera impresionante con todo tipo de tiburones, rayas marinas y otras especies.

Estuvimos haciendo tiempo allí hasta que nos reencontramos todos y salimos para ver el espectáculo The Dubai Fountain, un juego de luces y chorros de agua en sintonía con ritmos árabes. Las fuentes, que está a los pies de la torre y en el exterior del centro comercial, estaban atestadas de gente. Supongo que sería entre otras cosas porque es época navideña y somos muchísimos turistas, y además era jueves por la tarde y el viernes es festivo para el mundo musulmán, por lo tanto estaba media ciudad en las calles y centro comerciales. Está considerado como el mejor espectáculo del mundo de esas características, pero tampoco sería algo por lo que yo cambiaria mis planes…, creo que me entendéis

En fin, que cuando nos dimos cuenta eran casi las 8 de la tarde, se nos había ido toda la tarde!!.
De regreso a casa decidimos ir a cenar a un restaurante que según mi cuñado, estaba en el desierto. Cogimos ropa de abrigo ya que la temperatura en el desierto baja drásticamente y salimos hacía lo que yo suponía era un restaurancito en medio de la nada. Como a 5 km., empecé a divisar unas luces a lo lejos. Cuando llegamos me di cuenta de que aquello no era un simple restaurante.

Era todo un resort de lujo, en el cual había la opción para los que no se hospedaban allí de poder cenar en uno de los restaurantes de los que disponían. En cuanto aparcamos el coche, seguimos una senda de piedra por en medio de las dunas, todo iluminado pero muy sutilmente con luces muy tenues, tan tenues que de repente se cruzaron en nuestro camino 2 crías de ciervo salvajes que estaban jugando por la zona. Caminamos como 5 minutos escuchando música árabe a lo lejos, que conforme nos acercábamos se hacía más evidente de que procedía de donde nos dirigíamos nosotros. Al llegar a la cúspide de una duna, apareció el restaurante abajo. Tenía forma circular, como un poblado árabe antiguo, lleno de luces y con la música tradicional sonando en directo. En cuando traspasamos la entrada me dio la impresión de estar en un cuento de Aladino, era como un mercado, lleno capazos de especias por todas partes, y diferentes puestos en los que habían cocineros preparando diferentes platos árabes.

Nos sentamos frente al espectáculo de baile y música que estaba actuando (estaba la mesa reservada…),

y enseguida nos sirvieron entrantes y panes típicos. En cuanto dimos buena cuenta de ello, era buffet libre, nos levantamos y nos dirigimos a los diferentes puestitos donde los cocineros te servían según el que eligieras, una especialidad diferente. Después de cenar, cambiamos de lugar y subimos a la teteria de arriba del complejo. Un buen te a la menta y un poco de shisa bajo las estrellas y creía que estaba levitando…

En fin, fue una velada extraordinaria y que quedará en el recuerdo. Si podéis permitíroslo, no dudéis en ir una noche. Está fuera de todo circuito típico de turistas, y es algo espectacular. Ah!, se me olvidaba, se llama Bab Al Shams Resort, www.meydanhotels.com/babalshams

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