Día 3: lunes.
Salimos muy temprano camino de Petra, a más de 200 kms.
La primera parada es en MÁDABA, para ver la iglesia ortodoxa griega de San Jorge, donde nos enseñan el mosaico del S. VI que representa el mapa de la Palestina bíblica. Se agradece la visita por el mosaico, aunque muy deteriorado, por la parada en sí, aunque llevamos poco tiempo de viaje, y por el tipismo del pueblo, pues del autobús a la iglesia hay que andar poco más de 5 minutos, pero callejeando entre puestos tipiquísimos, con gallinas, etc.

De Mádaba al MONTE NEBO. Que conociendo su significado, el sitio en sí con sus mosaicos y sus vistas de la "tierra prometida", sobre todo cuando no hay calima, pues también es muy bonito. Incluye parada comercial en una fábrica-tienda de mosaicos.

Y de ahí, a tragar kms. de carretera, con parada para comer. El siguiente destino era visitar las ruinas de la fortaleza templaria de Kerak. Lo que llaman un castillo en ruinas. Pero nuestra documentación del viaje nos había enseñado que no merecía la pena, asi que negociamos con el guía cambiar este destino por "La pequeña Petra", que no entraba en nuestro paquete. Y así lo hicimos, ahorrando kms. y ganando tiempo.
Llegamos a la PEQUEÑA PETRA y aunque hay unos puestos autóctonos como esperando a los turistas, la verdad es que aún no está como destino típico y nos encontramos casi solos. Y desde luego mereció la pena, pues todos llevábamos una idea clara de lo que es Petra, y al ver a la "pequeña", con su desfiladero y sus portadas esculpidas en la roca, era el mejor aperitivo para el dia siguiente.

TODOS CONVENCIDOS, GUIA INCLUIDO del acierto del cambio de ruta! Ganamos tiempo, pues para ir a Kerak había que salir de la ruta, vimos algo que a todos nos gustó más, y ganamos tiempo para poder asistir al espectáculo nocturno que se celebra en Petra, aunque solo una pareja lo hizo y su opinión del evento no era coincidente.
El hotel BEIT ZAMAN precioso por su tipismo, y su sauna, y su piscina climatizada, y su... todo!
Salimos muy temprano camino de Petra, a más de 200 kms.
La primera parada es en MÁDABA, para ver la iglesia ortodoxa griega de San Jorge, donde nos enseñan el mosaico del S. VI que representa el mapa de la Palestina bíblica. Se agradece la visita por el mosaico, aunque muy deteriorado, por la parada en sí, aunque llevamos poco tiempo de viaje, y por el tipismo del pueblo, pues del autobús a la iglesia hay que andar poco más de 5 minutos, pero callejeando entre puestos tipiquísimos, con gallinas, etc.


De Mádaba al MONTE NEBO. Que conociendo su significado, el sitio en sí con sus mosaicos y sus vistas de la "tierra prometida", sobre todo cuando no hay calima, pues también es muy bonito. Incluye parada comercial en una fábrica-tienda de mosaicos.


Y de ahí, a tragar kms. de carretera, con parada para comer. El siguiente destino era visitar las ruinas de la fortaleza templaria de Kerak. Lo que llaman un castillo en ruinas. Pero nuestra documentación del viaje nos había enseñado que no merecía la pena, asi que negociamos con el guía cambiar este destino por "La pequeña Petra", que no entraba en nuestro paquete. Y así lo hicimos, ahorrando kms. y ganando tiempo.
Llegamos a la PEQUEÑA PETRA y aunque hay unos puestos autóctonos como esperando a los turistas, la verdad es que aún no está como destino típico y nos encontramos casi solos. Y desde luego mereció la pena, pues todos llevábamos una idea clara de lo que es Petra, y al ver a la "pequeña", con su desfiladero y sus portadas esculpidas en la roca, era el mejor aperitivo para el dia siguiente.


TODOS CONVENCIDOS, GUIA INCLUIDO del acierto del cambio de ruta! Ganamos tiempo, pues para ir a Kerak había que salir de la ruta, vimos algo que a todos nos gustó más, y ganamos tiempo para poder asistir al espectáculo nocturno que se celebra en Petra, aunque solo una pareja lo hizo y su opinión del evento no era coincidente.
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