Sin duda alguna este fue uno de los días más chulos e interesantes de todo el viaje a la Riviera (por desgracia sólo hicimos una excursión, aunque mirando el lado positivo, este fue el incentivo, quitando el Hotel, por supuesto, para regresar de nuevo algún día: queda muchísimo por ver). Lo peor: tener que levantarse sí o sí tan temprano jejeje
Así pues, debido a que a las 6:30am nos esperaban en el lobby del Riviera, yo me levanté sobre las 5:30 más o menos para poder darme una ducha tranquilo y sin prisas. Mi mujercita tardó un poco más en levantarse, pero para las 6:30 estábamos ya en el lobby preparados para irnos de excursión. Lo malo era que hasta las 7am no abren los restaurantes, así que tuvimos que conformarnos con el zumito y los dulces que se podían pedir/coger en la barra del lobby. Consejo: mucha gente suele pedir la noche de antes que les preparen sandwiches o bocadillos para llevar al día siguiente... nosotros no caímos en eso, pero vamos, que si sois personas de comer lo recomiendo para tener algo durante el paseo que echarse a la boca, ya que sólo se come una vez en toda la excursión.
Haciendo memoria, recuerdo que además estaba algo "nervioso"... me explico. La excursión la contratamos con la agencia Excursiones Riviera, gracias a la recomentación que nos hizo matigine a través de este foro (total, luego nos enteramos que sólo había ido como 9 veces a la Riviera, así que tampoco tenía mucha experiencia, verdad? jejeje), y yo mismo les pedí que si podían nos pusieran con ella y su hija en la excursión, sin pensar si luego sería buena idea o no xDD La verdad, que eso fue una de las mejores cosas que hice, porque luego no sólo mereció la pena disfrutar de su compañía durante la excursión, sino que luego hemos podido compartir los últimos 2-3 días y tener ahora una bonita amistad (no olvides que te tengo fichá para cuando decidamos volver, eh? jajaja). Aún recuerdo que las vi sentadas en un sofa pero, como no sabía quiénes eran, no les dije nada hasta que subieron a la van (y tardé un poco en hablar, pero una vez empezado... jaja). Pero sigamos por donde iba que me desvío del tema.
Una vez dentro de la van y, tras las debidas presentaciones, nuestra primera parada sería Chichén Itzá, donde además llegamos muy temprano y eso nos benefició bastante pues el calor que hizo durante todo el día no fue tan molesto hasta las 11-12 del medio día, hora en la cual ya habíamos dejado las ruinas atrás. Una recomendación es que para esta excursión se lleve, por si acaso, una gorra o sombrero, así como agua (ya sea porque la llevas desde el hotel o porque puedas pedirla a las personas que organicen la excursión). En nuestro caso, como no llevábamos sombreros, nos compramos uno de paja y uno de los típicos de explorador antes justo de entrar a las ruinas, ambos por 10€ (no es barato para la calidad que tenían, pero tampoco nos pareció excesivamente caros). El agua que llevábamos era tanto de la habitación como un par de botellitas que nos dieron.
Cartel a la entrada - Punto de reunión para orientarnos
Ya dentro, empieza el típico "wow!!", puesto que lo primero que nos encontramos fue la impresionante pirámide del Chichén Itza, conocida como la pirámide de Kukulkán... Preciosa, sin palabras, salvo la pena de no poder subir arriba (según nos contó nuestro guía, porque hay "animales", puesto que no se les puede llamar de otra forma, que se dedican a escribir sus nombres en la parte superior o por las escaleras, lo que obligó a cerrar el paso a la cima... una pena). Aquí estuvimos 5 minutillos, para aprovechar que había más gente y ver otras zonas con menos afluencia de personas y evitar aglomeraciones. Así que 2 o 3 fotillos, y seguimos la visita.
Chicén Itzá - Pirámide de Kukulkán
La siguiente parte a la que llegamos, fue el observatorio, muy bien conservado, donde se nos explicó cómo los mayas eran unos auténticos astrónomos, observadores del cielo y las estrellas... Gracias a observar tanto es como sacaron su calendario maya, muy exacto, presente en muchas de las construcciones (número de escalones de las pirámides, pequeñas esculturas, etc), el cuál tenía un sistema vigesimal.
Observatorio... Cuesta trabajo hacerse a la idea de que ya entonces existían lugares así
Un ejemplo de la representación de su calendario lo podemos ver en la pirámide de Kukulkán, que son los 91 escalones de cada parte de la pirámide, haciendo un total de 364 días, más una plataforma superior que hace el total de 365 días. No me quedé con mucho más de información, porque es demasiada en un día, pero para eso tenemos libros, internet, revistas, etc, donde poder consultar. Como curiosidad, hay una estatua de cabeza serpiente en la pirámide, a la que se le puede ver el cuerpo en forma de sombra, gracias a los ángulos que forman los 9 niveles de la pirámide, sólo durante los días de equinocios y solsticios, aunque por los días que fuimos no se pudo ver, pero vimos una foto y nos dijeron que todo el terreno se llena de gente... debe ser impresionante (Matigine nos dijo que si estuvo en una ocasión y que la cantidad de gente puede agobiar incluso).
Después del observatorio fuimos a la construcción que se le conoce como La Iglesia, un pequeño edificio de un sólo cuarto que debe su nombre a su cercanía al supuesto "convento" de las Monjas y a la exuberante decoración de su fachada superior. También se veía en los edificios una escultura de un elefante con una trompa hacia arriba (como ídolo para llamar a la lluvia) y hacia abajo (para calmar al tiempo y que no hubiesen tormentas y demás). Es como para mantener un equilibrio entre ambos. Sorprende lo bien que están conservados.
Detalle de las paredes y Convento de las Monjas
Después vimos el Osario o Tumba del Gran Sacerdote, otra pirámide más pequeña que había de regreso a la pirámide de Kukulkán. También en esta ocasión se pueden ver las serpientes en las escalinatas.
Tumba del Gran Sacerdote... muy parecida a la pirámide de Kukulkán
Después de esa parte, fuimos de nuevo a la pirámide central, donde nos enseñó el sonido que se produce al hacer una palmada delante de la pirámide... parece como un pájaro con gripe... pero sin duda lo mejor fue el comentario que hizo nuestro guía cuando escuchamos el sonido de imitación del jaguar, producido por un artefacto que se vende en los puestecillos: "para mí es como el sonido que hace un gato que se está atragantando y quiere expulsar pelo por la boca"... escuchen ustedes y juzguen jejeje
Luego vimos el Chac-mool que hay a unos metros de distancia. Es una escultura de un escriba sentado, aunque según como se mire, parece que lo que se viese fuese el culo del escriba jeje El caso es que estaba bien conservado para los años que hace que se esculpió.
Chac-mool ... A mi me recuerda a una persona con el "trasero" en pompa... o no? xDD
Y ya por último, antes de salir de Chichén Itzá vimos el campo del Juego de Pelota, donde se nos explicó que eran equipos de 7 personas (6 + 1 capitán), cuyo objetivo era meter una pelota de caucho por un aro de piedra situado a unos 6 metros del suelo, sin poder usar las manos ni los pies, sino zonas del cuerpo como el tronco o los muslos. Para mí sería imposible meter la pelota, pero casi mejor... porque el equipo ganador tenía como premio la decapitación del capitán, eso sí, con todos los honores. Sigo pensando que lo mejor de las competiciones es participar, así que mejor que ganen los otros... jejeje
¿Una partida antes seguir con la excursión? Me pido el peor equipo xDDDD
Nos dejaron unos minutos para las típicas fotos por la zona o hacer compras en diferentes puestos (algunos aconsejados por él mismo, ya que conocía a los que llevaban esos puestos de muchos años). Nosotros compramos una tortuga pequeña de obsidiana, con un caparazón de amatista y concha de abulón. Hay que regresar, porque me quedé con las ganas de comprarme una máscara mediana-pequeña de madera, las cuales son únicas y hechas a mano... impresionando ver cómo las hacen, porque parece complicado, muy complicado. También hay fotos que una vez salido del recinto pensé que habría sido bueno hacernos, como por ejemplo, una al estilo de los Beatles delante de la pirámide, o una de todo el grupo saltando delante de la pirámide...
Detalles que se podían comprar en Chichén Itzá
El siguiente destino era el cenote It-Kil... sin palabras. Al entrar dentro de la cueva y ver desde arriba esas lianas colgando del techo y llegando al agua practicamente... se le corta a uno la respiración. Es muy profundo, desde el agua hasta el fondo es de 49 metros si no recuerdo mal y no se ve el fondo. Sí algunos pececillos negros que nadan por ahi y apenas tienen miedo de los visitantes. Y no, no fui capaz de saltar desde lo más alto, pero sí desde la mitad... un logro para mi, que ya pensaba que no me atrevería ni a eso jeje Un consejo que a mi me ayudó para los más indecisos es ir saltando cada vez desde un escalón más. Tras un buen baño, aquí tuvimos la oportunidad de tomar un buffet que no estuvo mal (la comida no está incluida, y salía por unos 40 pesos la cerveza y por unos 30 pesos los refrescos.
El cenote It-Kil desde la entrada
El cenote It-Kil a pie del agua
El último destino eran las ruinas de Ek-Balam, ya un poco cansados, pero con ganas de poder subir a la cima de la pirámide que hay, puesto que desde arriba aseguraban unas vistas preciosas. Así pues, hicimos una visita guiada por el recinto, parando principalmente en una especie de habitación maya, para ver cómo se construían, y delante de la pirámide donde se conserva, la Acrópolis, con un friso de escayola, espléndidamente conservado, que reviste la puerta con las fauces abiertas y los colmillos de una serpiente o monstruo, arriba de éstas el rey en su trono y a los lados las figuras de guerreros alados. También vimos que hay una zona de juego de pelota, más pequeña que la de Chichén Itzá, pero muy bien conservada.
Arco que se ve al principio de la visita, cerca de una habitación donde nos enseñaron cómo construían
Juego de pelota de Ek-Balam y Acrópolis
Friso de escayola de la Acrópolis de Ek-Balam, muy bien conservado
Desde arriba de la pirámide, las vistas, como bien nos dijeron, eran impresionantes (un consejo es subir de lado, no de frente, y la bajada o de culo o igual, porque si no el esfuerzo sobre las rodillas puede ser muy grande).
Sin palabras... una vista espléndida desde la cima de la Acrópolis
La vuelta a casa fue tranquila. Llovió un poco pero todo tranquilo. Al legar, además, habíamos quedado con unos amigos para tomar algo también y aprovechamos para ir a la fiesta ibicenca que hicieron en la piscina de agua salada.
Fiesta Ibicenca en la piscina de agua salada
Un día largo, que será difícil de olvidar.
Buenas noches...