VIERNES 28 JUNIO
Hoy nos levantamos temprano. Es nuestro primer desayuno en este hotel. Aquí el comedor es sin paredes, está rodeado de vegetación, te sientes un poco como en la jungla. Hay que tener cuidado con las avispas, que están todo el rato viendo que pillan. También ha cocineros preparando tortillas francesas y huevos. El desayuno es variado está bien.
Estábamos en la habitación ultimando los detalles cuando suena el teléfono. Ya nos están esperando en la recepción para la excursión. ¡Pero si son las 8 y nos dijeron entre 8:15 y 8:30! Pues otra vez corriendo para la van. Sólo estamos nosotros, pero en otra zona llamada la Laguna recogemos a un grupo de japoneses. Ya con la van completa rumbo a nuestro barco. En unos 45 minutos ya estábamos en nuestro destino. Justo al bajar de la van había una señora que empezó a colocar a la gente en la muñeca un hilo de lana negro y otro amarillo. Yo que a estas alturas del viaje ya no confío ni de mi sombra me niego a que me lo coloque. Cuando me explicó que era para el todo incluido le dejé que me la pusiera.
Nos reunieron a un montón de gente en una zona con mesas y banco a la sombra. Estábamos rodeados de tiendecitas. El producto estrella eran las bolsas impermeables de diferentes tamaños. Nosotros ya llevábamos una del Decathlon, pero no nos hizo falta. Luego en el barco las alquilaban por 100 bahts. Allí me compré un gorro de paja por 100 bahts 2,50 euros. Con tanta prisa me dejé mi gorra en el hotel.
Nos llevaron a todos hacia el muelle y allí nos distribuyeron en barcos según el color de la pulsera. Para esta excursión elegimos el barco lento por recomendación del chico de la agencia. Aquí lo importante es disfrutar del paisaje y así lo ves mejor. Todos íbamos en el piso de arriba sentados en bancos y cubiertos con un toldo para dar sombra. Al comenzar la travesía el guía nos explicó en un mapa lo que íbamos a ver y comenzaron ya a darnos bebida y fruta (plátanos y rambutanes)
Estábamos en la habitación ultimando los detalles cuando suena el teléfono. Ya nos están esperando en la recepción para la excursión. ¡Pero si son las 8 y nos dijeron entre 8:15 y 8:30! Pues otra vez corriendo para la van. Sólo estamos nosotros, pero en otra zona llamada la Laguna recogemos a un grupo de japoneses. Ya con la van completa rumbo a nuestro barco. En unos 45 minutos ya estábamos en nuestro destino. Justo al bajar de la van había una señora que empezó a colocar a la gente en la muñeca un hilo de lana negro y otro amarillo. Yo que a estas alturas del viaje ya no confío ni de mi sombra me niego a que me lo coloque. Cuando me explicó que era para el todo incluido le dejé que me la pusiera.
Nos reunieron a un montón de gente en una zona con mesas y banco a la sombra. Estábamos rodeados de tiendecitas. El producto estrella eran las bolsas impermeables de diferentes tamaños. Nosotros ya llevábamos una del Decathlon, pero no nos hizo falta. Luego en el barco las alquilaban por 100 bahts. Allí me compré un gorro de paja por 100 bahts 2,50 euros. Con tanta prisa me dejé mi gorra en el hotel.
Nos llevaron a todos hacia el muelle y allí nos distribuyeron en barcos según el color de la pulsera. Para esta excursión elegimos el barco lento por recomendación del chico de la agencia. Aquí lo importante es disfrutar del paisaje y así lo ves mejor. Todos íbamos en el piso de arriba sentados en bancos y cubiertos con un toldo para dar sombra. Al comenzar la travesía el guía nos explicó en un mapa lo que íbamos a ver y comenzaron ya a darnos bebida y fruta (plátanos y rambutanes)
GUIA EXPLICANDO EL RECORRIDO
RAMBUTÁN
El paisaje es precios, pero las fotos no le hacen justicia, si la haces muy de lejos sale como con niebla, y si la haces de cerca las montañas son tan grandes que solo sale un trozo. Impresiona ver esas montañas tan grandes, tan verticales y que por la parte de debajo están erosionadas con unas formas muy curiosas.
[align=justify]Sobre las 12:30 nos pasaron del barco grande a unos long- tails, y en ellos nos llevaron al poblado flotante a comer. Este va muy rápido y tienen que tapar los laterales con plásticos para no mojarnos. Al llegar es muy curioso ver las casas sobre pilares encima del agua
. El paisaje es precios, pero las fotos no le hacen justicia, si la haces muy de lejos sale como con niebla, y si la haces de cerca las montañas son tan grandes que solo sale un trozo. Impresiona ver esas montañas tan grandes, tan verticales y que por la parte de debajo están erosionadas con unas formas muy curiosas.
[align=justify]Sobre las 12:30 nos pasaron del barco grande a unos long- tails, y en ellos nos llevaron al poblado flotante a comer. Este va muy rápido y tienen que tapar los laterales con plásticos para no mojarnos. Al llegar es muy curioso ver las casas sobre pilares encima del agua
POBLADO FLOTANTE
La comida fue normalita, una degustación con diferentes platos típicos. El pollo nos gustó. Como aún faltaba un rato para la hora de ir al barco decidimos dar una vuelta por el pueblo. El guía nos dijo el nombre del restaurante para que preguntásemos a la hora de regresar (fue un gran acierto, de otro modo nos habríamos perdido).
Las calles son muy peculiares puestecitos a ambos lados y vas sobre pasarelas sobre el agua. Nos dirigimos al colegio, queríamos ver el famoso campo de futbol flotante. Justo a la entrada del colegio había una señora y un ladi-boy con unos gibones. Nos hicimos unas fotos, tenían pañales y uno hasta un biberón. La cara de mis hijos era pura emoción.
GIBÓN
Luego entramos en la zona del colegio. Todas las clases están abiertas. Es curioso ver los zapatos de todos los niños en la puerta de cada clase. Los más pequeños estaban intentando dormir la siesta. Llegamos al campo de futbol, que es parte del patio del colegio. Estos niños deben pasarse todo el día recogiendo el balón del agua. El campo está justo en el mar y no hay ninguna protección especial para detenerlo.
CAMPO DE FUTBOL FLOTANTE
De regreso compramos algunas camisetas de esas con el dibujo de la isla de James Bond a 3,75 euros. Lastima no tener más tiempo seguro que habría comprado más cosas. Menos mal que sabíamos el nombre del restaurante, de lo contrario no lo habríamos encontrado, todas las calles parecen iguales. Al llegar al hotel el guía estaba esperando en la puerta a que regresásemos, por si nos perdíamos. Fuimos los únicos que paseamos por el pueblo. Pues yo creo que si se merece un paseíto. Esperamos un poco a la hora indicada y mientras tanto disfrutamos viendo unos caballitos de mar de esos alargaditos que nadaban tranquilamente por allí.
Montamos otra vez en nuestro Long-tail y de allí nos fuimos a unos barcos grandes que estaban fondeados y hacían de embarcadero para el paseo en canoa. Nos pusimos dos en cada canoa y un conductor nos llevaba para contemplar el paisaje. Fue muy chulo. Pasos a través de una de las montañas. Había unas formaciones rocosas muy curiosas. Nuestro conductor nos iba diciendo los nombres de algunas de las cuevas y a que se parecían. También había murciélagos allí viviendo. En otra zona nos comentó que vivían monos, pero no vimos ninguno. Había mucho manglar en esta zona y era curioso ver como los árboles nacían en medio de la roca de una pared vertical ¡No sé cómo se agarraban!
Uploaded with ImageShack.us
PASEO EN CANOA
Regresamos al embarcadero y allí nos recibieron con unas bebidas de colorines. Con el calor que teníamos estaba buenísimo. Los niños se sentaron a disfrutar de sus bebidas pero…Una japonesa nada discreta alucinaba con los ojos de X y estaba empeñada en que D se quitase las gafas para ver si los tenía igual. Los pobres niños se sintieron muy incómodos y vinieron corriendo a nuestro lado.
Uploaded with ImageShack.us
KHAO PING KAN
Regresamos al long-tail y nos llevó a otra Khao Ping Kan son dos islas unidas. Tiene Varias cuevas y una enorme piedra caliza apoyada en otra. Pero lo mas característico es Ko Tapu, un peñón de piedra a unos metros de la costa y de 20 m de altura. Es famoso por haber salido en la película de James Bond el Hombre de la Pistola de Oro.
ISLA DE JAMES BOND
No se el motivo, pero yo me imaginaba que entraríamos con el barco por el lado de ese peñón, pero no es así, los barcos atracan en el otro lado de la isla. Esto facilita mucho el poder hacer una buena foto sin tener barcos por en medio. La isla es muy pequeñita pero muy chula. Después de un montón de fotos los niños se sentaron un ratito. Pues no me lo podía creer otra vez llegaron enfurruñados, pues otras japonesas obsesionadas con los ojos de X ¿pero que le pasa a este niño que es irresistible para las asiáticas? A la hora fijada regresamos al long-tail y de allí al barco grande. Nos acercamos a una de las islas la de Lawa y fondeamos. La gente comenzó a lanzarse al agua. Mis chicos se lanzaron con gafas de bucear, pero el agua estaba oscura y no se veía nada. Yo preferí bajar en en canoa. Como el agua no se movía fue muy fácil remar por allí. Los niños que en principio no querían la canoa se lo pasaron pipa subiendo y lanzándose desde allí. Fue un rato muy agradable y con el calor que teníamos se agradecía mucho el chapuzón.
Uploaded with ImageShack.us
NUESTRO BARCO
Terminado el chapuzón, todos al barco y regreso al puerto de Ao Por mientras nos tomábamos fruta y bebidas frescas. Una vez allí a nuestra van y regreso al hotel.
Después de un rato de relax tomamos un taxi para ir al centro de Kamala. Está a 3 km, pero los taxistas están compinchados y tienen precio fijo: 200 bahts 5 euros ¡Una animalada para ser Tailandia! Cambiamos dinero y fuimos a pagar el resto de las excursiones. Le comentamos a One lo bien que nos lo habíamos pasado y reservamos para el día siguiente la excursión de Khaolak y para el siguiente le de Phi Phi (para el día anterior ya no quedaban plazas) Cenamos por la zona el restaurante nos gustó mucho, y fue todo un detalle el decorar los platos con orquídeas.
En el pueblo había varios seven eleven. Allí compramos un repelente de mosquitos que huele muy bien y no es nada pringoso por menos de 2 euros. Cuando nos cansamos tomamos un tuk tuk por 150 bahts para regresar al hotel. Es toda una aventura. Los tuk tuks en la costa son totalmente diferentes. Vas sentado y no hay puerta de atrás, es muy fácil caerse a la carretera. Llegamos sanos y salvos. A la camita que mañana nos espera otro día movidito.
[/align] Las calles son muy peculiares puestecitos a ambos lados y vas sobre pasarelas sobre el agua. Nos dirigimos al colegio, queríamos ver el famoso campo de futbol flotante. Justo a la entrada del colegio había una señora y un ladi-boy con unos gibones. Nos hicimos unas fotos, tenían pañales y uno hasta un biberón. La cara de mis hijos era pura emoción.
GIBÓN
Luego entramos en la zona del colegio. Todas las clases están abiertas. Es curioso ver los zapatos de todos los niños en la puerta de cada clase. Los más pequeños estaban intentando dormir la siesta. Llegamos al campo de futbol, que es parte del patio del colegio. Estos niños deben pasarse todo el día recogiendo el balón del agua. El campo está justo en el mar y no hay ninguna protección especial para detenerlo.
CAMPO DE FUTBOL FLOTANTE
De regreso compramos algunas camisetas de esas con el dibujo de la isla de James Bond a 3,75 euros. Lastima no tener más tiempo seguro que habría comprado más cosas. Menos mal que sabíamos el nombre del restaurante, de lo contrario no lo habríamos encontrado, todas las calles parecen iguales. Al llegar al hotel el guía estaba esperando en la puerta a que regresásemos, por si nos perdíamos. Fuimos los únicos que paseamos por el pueblo. Pues yo creo que si se merece un paseíto. Esperamos un poco a la hora indicada y mientras tanto disfrutamos viendo unos caballitos de mar de esos alargaditos que nadaban tranquilamente por allí.
Montamos otra vez en nuestro Long-tail y de allí nos fuimos a unos barcos grandes que estaban fondeados y hacían de embarcadero para el paseo en canoa. Nos pusimos dos en cada canoa y un conductor nos llevaba para contemplar el paisaje. Fue muy chulo. Pasos a través de una de las montañas. Había unas formaciones rocosas muy curiosas. Nuestro conductor nos iba diciendo los nombres de algunas de las cuevas y a que se parecían. También había murciélagos allí viviendo. En otra zona nos comentó que vivían monos, pero no vimos ninguno. Había mucho manglar en esta zona y era curioso ver como los árboles nacían en medio de la roca de una pared vertical ¡No sé cómo se agarraban!
Uploaded with ImageShack.us
PASEO EN CANOA
Regresamos al embarcadero y allí nos recibieron con unas bebidas de colorines. Con el calor que teníamos estaba buenísimo. Los niños se sentaron a disfrutar de sus bebidas pero…Una japonesa nada discreta alucinaba con los ojos de X y estaba empeñada en que D se quitase las gafas para ver si los tenía igual. Los pobres niños se sintieron muy incómodos y vinieron corriendo a nuestro lado.
Uploaded with ImageShack.us
KHAO PING KAN
Regresamos al long-tail y nos llevó a otra Khao Ping Kan son dos islas unidas. Tiene Varias cuevas y una enorme piedra caliza apoyada en otra. Pero lo mas característico es Ko Tapu, un peñón de piedra a unos metros de la costa y de 20 m de altura. Es famoso por haber salido en la película de James Bond el Hombre de la Pistola de Oro.
ISLA DE JAMES BOND
No se el motivo, pero yo me imaginaba que entraríamos con el barco por el lado de ese peñón, pero no es así, los barcos atracan en el otro lado de la isla. Esto facilita mucho el poder hacer una buena foto sin tener barcos por en medio. La isla es muy pequeñita pero muy chula. Después de un montón de fotos los niños se sentaron un ratito. Pues no me lo podía creer otra vez llegaron enfurruñados, pues otras japonesas obsesionadas con los ojos de X ¿pero que le pasa a este niño que es irresistible para las asiáticas? A la hora fijada regresamos al long-tail y de allí al barco grande. Nos acercamos a una de las islas la de Lawa y fondeamos. La gente comenzó a lanzarse al agua. Mis chicos se lanzaron con gafas de bucear, pero el agua estaba oscura y no se veía nada. Yo preferí bajar en en canoa. Como el agua no se movía fue muy fácil remar por allí. Los niños que en principio no querían la canoa se lo pasaron pipa subiendo y lanzándose desde allí. Fue un rato muy agradable y con el calor que teníamos se agradecía mucho el chapuzón.
Uploaded with ImageShack.us
NUESTRO BARCO
Terminado el chapuzón, todos al barco y regreso al puerto de Ao Por mientras nos tomábamos fruta y bebidas frescas. Una vez allí a nuestra van y regreso al hotel.
Después de un rato de relax tomamos un taxi para ir al centro de Kamala. Está a 3 km, pero los taxistas están compinchados y tienen precio fijo: 200 bahts 5 euros ¡Una animalada para ser Tailandia! Cambiamos dinero y fuimos a pagar el resto de las excursiones. Le comentamos a One lo bien que nos lo habíamos pasado y reservamos para el día siguiente la excursión de Khaolak y para el siguiente le de Phi Phi (para el día anterior ya no quedaban plazas) Cenamos por la zona el restaurante nos gustó mucho, y fue todo un detalle el decorar los platos con orquídeas.
En el pueblo había varios seven eleven. Allí compramos un repelente de mosquitos que huele muy bien y no es nada pringoso por menos de 2 euros. Cuando nos cansamos tomamos un tuk tuk por 150 bahts para regresar al hotel. Es toda una aventura. Los tuk tuks en la costa son totalmente diferentes. Vas sentado y no hay puerta de atrás, es muy fácil caerse a la carretera. Llegamos sanos y salvos. A la camita que mañana nos espera otro día movidito.