Día 1. Salimos ✏️ Travel Journeys of Spain

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El día anterior habíamos dejado la autocaravana preparada, habíamos metido todas las cosas que nos queríamos llevar y habíamos hecho la compra en un supermercado. Para pasar la noche la dejamos en una nave que tenían mis padres porque a mí me daba un poco de reparo dejarla completamente cargada en plena calle.

El depósito viene más o menos a una cuarta parte así que decidimos emprender camino y parar a repostar antes de salir de Madrid.

Nuestra ruta por la M 50 a la A3 y una velocidad de más o -85 90 km/h , con la autocaravana no se puede correr mucho más y menos si es la primera vez que la coges. Para cuando llegamos a la A31 ya había más soltura y hasta cogimos los 100 km/hora.
El vehículo venía equipado con control de crucero lo que hace mucho más cómodo el conducir largas distancias.

Primera parada a las 11:00 de la mañana y aprovechamos para ir al baño y almorzar un poco en la autocaravana, es una gozada estar sentadito calentito dentro del vehículo. Además comer de lo que llevamos es mucho más barato que picotear o comprar cosas en una gasolinera.
Aprovecho la parada para comprobar que las cosas que llevabamos en los armarios no se ha movido mucho y recolocar algunas que hacían algunos ruidos.

Seguimos camino por la A30 y luego la AP7 hasta Mazarrón. Nos perdieron un poco las instrucciones del Google y terminamos teniendo que cruzar todo Cartagena con la autocaravana algo que no recomiendo para conductores novatos.

Después de perdernos acabamos en una carretera bastante regular con muchas curvas que termina en el Alamillo/ puerto de Mazarrón y unos 5 km más adelante llegamos al camping. El acceso es muy fácil y no atiende una recepcionista muy simpática. Nos da un plano marcando las parcelas libres y nos invita a dar una vuelta para elegir la que más nos guste. Todas son muy amplias y bien delimitadas con toma de agua y luz, bastante llanas, aunque echamos de menos unos pequeños calzos como los que tienen algunos de nuestros vecinos. Elegimos una parcela muy cercana a los baños, pilas y servicios que tampoco queda lejos de la recepción, el super, el restaurante, las piscinas...

Si hubiésemos sabido que nos iba a hacer un tiempo genial con 26° nos habríamos traído una mesa y unas sillas para poner en el exterior porque la verdad es que se agradece el salir del vehículo de vez en cuando.

Comemos algo rápido en la auto, dormimos un poco para desquitarnos del madrugón que habíamos tenido esa mañana y nos disponemos a visitar el camping que no es muy grande pero sí que está muy cuidado y además en esta época del año tiene muy poca gente, principalmente extranjeros.
Nos damos nuestro primer bañito en las piscinas, una de ellas cubierta, y siguiendo el ejemplo de nuestros vecinos extranjeros vemos una peli y nos acostamos prontito.

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