Llegué a mi destino hacia las 20h, llamo al timbre, y me abre un chico indio que no tiene la más mínima idea de quién soy o qué hago allí. Le digo que soy de airbnb, llama a su compañero de piso por teléfono, le empieza a gritar que por qué no le ha avisado de que iba alguien. Después me enseña la habitación, mugrienta, sucísima y sin sábanas limpias. Me pide disculpas una y otra vez y me dice que hubiera limpiado si hubiera sabido que iba.
Vamos, la típica situación que una persona normal se marcha corriendo de allí y se va a un hotel. Pero estaba tremendamente cansada y necesitaba una ducha urgentemente, además que sé como va el tema de Airbnb y lo ladrones que son, y es casi imposible recuperar tu dinero (además para ser justos luego mirando bien mi reserva no se especificaba en ningún lugar que me fueran a proporcionar sábanas limpias) así que le dije que no se preocupara, que me iba a duchar y a dormir. El chaval me ayudó a limpiar mi cuarto y echó a lavar las sábanas.
Me metí en la cama y me dormí al instante. Me desperté a las 6 de la mañana y estuve un rato informándome en internet sobre cómo podía recuperar mi dinero e irme de allí, también estuve mirando hostales pero eran demasiado caros para mi presupuesto, especialmente si no me devolvían el de este. La habitación era acorde a las fotografías, una pequeña habitación cutre con un colchón en el suelo y un pequeño armario empotrado, las paredes están llenas de grietas y la cocina y el cuarto de baño algo sucios. Ya sabía que iba a ser así y no me importaba, era muy barato, está en pleno centro de la ciudad, y el tipo que me la habia alquilado parecía muy simpático por email. Me había estado escribiendo con él durante semanas, me había dado muy buena impresión y me había dicho que sus compañeros de piso estaban al corriente y que me estarían esperando a la hora que yo llegaba. Se trata de un piso compartido de 3 estudiantes de ingeniería. Todo estaba acorde a la descripción, pero claro, llegar desde la otra punta del mundo y meterte en casa de unos desconocidos que NO SABEN QUIEN ERES, me hizo sentir insegura e incómoda allí.
A día de hoy, que ya llevo una semana viviendo aquí, he de decir que estoy muy a gusto, que le he cogido mucho cariño a mi pequeña habitación, que adoro el balconcito que tiene, y que mis nuevos "compis" son muy buenas personas y confio mucho en ellos. Además no hacen ruido ni traen invitados, están casi todo el día en la universidad, así que no me puedo quejar. Pero claro, en ese momento, me quería ir.
A las 8am salí con dirección a la escuela de francés envuelta en bufandas guantes y gorros. El camino de casa a la escuela son unos 15 minutos, pero había unos 30cm de nieve durante todo el camino que me hiceron ir más lenta (me encanta la nieve, disfruté mucho el camino). Desayuné en un Tim Hortons (una cadena de cafeterías tipo Starbucks pero más barato de Canada, muy popular, tienen cosas muy ricas y es barato) y a las 9 entré a la escuela, donde primero hice todo el papeleo pertinente, y luego me hiceron durante varias horas diversos test y exámenes orales a fin de determinar mi nivel. Me pusieron en el nivel intermedio


Salí a las 14.30 (las clases son de 9 a 14:30 de lunes a viernes) y pasé varias horas caminando por el centro de la ciudad: Place des arts, la calle Saint Catherine que es una calle larguísima llena de todo tipo de tiendas, la ciudad subterránea, etc. Después volví a mi apartamento, coloqué todas las cosas en el armario, leí un rato y me dormí.
Al día siguiente, después de las clases, unos chic@s del curso me preguntaron si quería ir con ellos a visitar la catedral de Notre Dame. No me apetecía mucho pagar 5 dólares por ver una iglesia, la verdad, pero lo consideré el precio a pagar para forjar una amistad con ellos jaja. Estuve con ellos pasando la tarde y a día de hoy he quedado con ellos varias veces. Son brasileños, en las clases de francés todos lo son excepto una chica vietnamita y una ecuatoriana.
Unos días más tarde, el jueves por la noche, salimos 3 chicos y dos chicas de fiesta a una discoteca muy popular aquí que casualmente está a unos 200m de mi casa. Realmente me apetecía tomarme unas copas, pero los precios eran abusivos, allí todo el mundo bebía solo cerveza. Hacia las 2 de la mañana mi "nueva amiga" la única chica que iba a parte de mi, empezó a vomitar y a estar tan borracha que no podía ni andar (con 4 cervezas, no lo pude entender pero bueno) y... no tuve más remedio que traerla a mi casa. No sé cual es la política de Airbnb sobre llevarte gente a dormir sin consultar pero seguro que no es buena jaja, además al llegar a casa estuvo vomitando y haciendo un montón de ruido, y despertó a mis compañeros. Le preparé como pude la cama del dormitorio que hay vacio, la dejé durmiendo y me fui a la cama pensando que al día siguiente me iban a echar. Por lo demás la noche fue tremendamente divertida, he conocido aquí en Montreal a personas de muchas nacionalidades distinas con la que me he sentido como en casa, estoy encariñándome demasiado rápido de mis compañeros, va a ser triste marcharme.
Al día siguiente, viernes por la mañana, me desperté temprano, me duché, levanté a mi amiga, la acompañé a una parada de metro y me fui andando a clase. El curso me encanta, estoy aprendiendo mucho, ójala pudiera quedarme mucho más tiempo, dos semanas no me parece nada ahora. Por la tarde pretendía disculparme con mis compañeros por llevar una invitada, pero finalmente fui una cobarde y no salí de mi habitación en toda la tarde, y ellos tampoco me dijeron nada.
Dejo algunas fotos de estas tardes que he estado de turismo, en el próximo capítulo describiré mi pequeña aventura en Mont-Royal.
*** Imagen borrada de Tinypic ***
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