Hoy tocaba madrugar. Tras no haber dormido nada, nos levantamos a las 4:00 para subir a Punthuk Setumbu, una pequeña colina a 5 kms del templo de Borobudur, en donde mucha gente va a ver el amanecer, con el templo en medio de la selva, entre brumas, y los volcanes Merapi y Merbabu al fondo.
Sin desayunar ni nada nos subimos como "paquete" uno en cada moto, y los chavales que llevan el Lotus 2 nos llevan al lugar. Aparcamos y después de unos 15 minutos subiendo por un camino sin pérdida alguna llegamos al punto de observación. Aquí hay unos puestos que ofrecen bebidas y pocas cosas más. Tomamos un café que venden en sobres (era café con azucar, nada de soluble, y estaba tan bueno que en nuestro viaje de vuelta nos trajimos) mientras esperábamos la claridad... que no llegó. Estaba nublado y la lejanía no se apreciaba.


Borobudur bajando desde Punthuk Setumbu:

A las 5:45 decidimos regresar. Ya era de día y allí segúian las nubes. Y en media hora nos presentamos en la puerta del templo de Borobudur e iniciamos nuestra visita, con las entradas ya adquiridas el día anterior en Prambanam.
En el acceso al control se nos acercaron algunos pocos vendedores ambulantes (para nada los vi pesados, como había leido por ahí, y tampoco tantos, tal vez por la época o por la hora), pero eso sí, a la salida nos estaban esperando...
Y al igual que en Prambanam tampoco nos dijeron que nos pusiéramos el sarong, así que empezamos nuestra visita, por el gran paseo de acceso inicial mientras algunos jóvenes estudiantes se nos arrimaban para charlar.

Bajo mi punto de vista la belleza de este templo reside en su grandiosidad. El templo budista más grande del mundo. Con una estructura piramidal de ocho plantas, y las tres últimas circulares, se recorre de forma perimetral cada planta y se asciende a la siguiente por escaleras laterales que comunican todas ellas. Aunque puede resultar monótono recorrer las cinco primeras plantas, no dejan de ser diferentes cada una, de impresionar con los distintos relieves, estupas, y budas, relfejando las supuestas enseñanzas del budismo. Las últimas tres plantas contienen las grandes estupas acampandas que todos conocemos, coronadas todas ellas por una gran estupa cerrada central.


Nuestra visita duró 2 horas y media. A la salida nos esperaban aquellos vendedores que vimos a la entrada y a los que compramos algunos recuerdos. Luego se nos hizo interminable la salida del recinto, pues tienes que pasar sin poder evitarlo por toda una serie de tiendecitas de recordatorios y demás.
El homestay, Lotus 2, se encuentra cerca del recinto, y volvimos andando. Eran cerca de las nueve y el bullicio ya era patente. Nada que ver desde luego con la noche anterior, que llegamos y que aquello parecía todo desierto.
Tras rehacer las mochilas y dejarlas abajo, nos dan un desayuno normalito y acto seguido, sobre las 10 de la mañana, nos vamos en las motos, al igual que Punthuk Setumbu a hacer Candi Selogriyo.
El tour de unas cuatro horas, una para ir (aprox. 30 kms al norte de Borobudur), otra para volver y un par de ellas andando y visitando el lugar, es recomendable 100% y fuera de las rutas turísticas habituales. El templo en sí no es gran cosa, pero el acceso a él, los 4 kilómetros que los separan andando desde donde dejamos las motos -en una pequeña aldea: Kembangkuning- es un camino sin pérdida ninguna que atraviesa extraordinarios paisajes rurales y campestres.
Kembangkuning, desde donde arranca el camino, calle arriba:


El templo a lo lejos:



Tras estas cuatro horas, vamos a visitar una pequeña fábrica donde se dedican a hacer el famoso café Luwak, con los animalitos incluidos, mucho café en cestas y al final degustación y compra de un paquetito, que uno es amante del buen café.

Y rápidamente, porque se nos pone a llover, nos llevan a comer a un warung cercano al homestay, y depués a por las mochilas, y como no paraba de llover nos acercaron en las motos a la estación de de autobús, cerquita también de la entrada al templo de Borobudur para trasladarnos a Yogya.
Son las 4 de la tarde y el microbús que nos indican, destino a Jombor ya está allí, como esperándonos. Nos subimos no sin antes despedirnos de los dos chavales, que aunque el Lotus 2 no fue de nuestro agrado, ellos se merecían todas las atenciones por el trato recibido.
Al momento arrancamos,el microbús medio vacío, con destino a la estación de autobuses de Jombor. En 1 hora nos presentamos y enlazamos con el Trans Jogya el número 2A que en media hora más se presentó en la "Stasiun Tugu", estación central de tren de Yogya, en plena calle Malioboro, cercana al Andrea Hotel, nuestro siguiente alojamiento.
Y lo que iba a parecer fácil, localizar el Andrea Hotel, se convirtió en un suplicio. Al menos ya no llovía. Y es que no hubo forma de llegar, incluso con GPS. Me orienté muy mal, bastante mal, y tras un buen rato perdidos por alrededor, dando vueltas de aquí para allá, conseguí centrarme un poco y localizar la calle principal cercana, y gracias a la ayuda de un paisano, un buen hombre que nos acompañó hasta la misma puerta, llegamos tras más de media hora dando vueltas.
Previamente ya el día anterior habíamos contactado con el dueño de Andrea Hotel avisándole del plan que teníamos y que llegaríamos por la tarde. Y nada más llegar ya se imaginó que éramos los de España.
En cuanto al Andrea Hotel, no está nada mal encuanto a calidad/precio. Las habitaciones son pequeñitas con aire acondicionado y pequeño cuarto de baño/ducha. En cuanto a la localización, la calle en sí es un estrecho callejón donde hay varios sitios de servicios turísticos (hospedaje, restaurantes, lavanderías, viajes) en la conocida zona de Sosrowijayan, cercano a Malioboro Srtreet y a la estación de ff.cc. de Tuga Yogya (la principal estación). Lo lleva Sammy, creo recordar que es suizo, pero nuestra gran y grata sorpresa es que habla español !!!. Así que después de darnos habitación y la ducha correspondiente, nos tomamos un par de cervecitas mientras hablamos con él y nos aporta cosas interesantes para el viaje.
Después de un buen rato allí, damos una pequeña vuelta por los alrededores, compramos una tarjeta SIM de datos que Sammy nos había aconsejado (ver etapa inicial), nos acercamos a la estación de ff.cc. a sacar los billetes para mañana pero las taquillas ya están cerradas. y vamos a cenar a un restaurante al lado del Andrea, que tenía nombre español: Mi casa es tu casa. El origen del nombre hay que buscarlo en el antiguo dueño, pues creo que se separó de la mujer indonesia, quien se quedó con el negocio. Buen sitio para cenar tanto comida mediterránea como indonesia a un precio módico (ver sección de Gastos).
Ya eran sobre las 22:30 horas cuando nos vamos a dormir, que estábamos derrotados del madrugón y la mala noche anterior.
GASTOS: (2 personas)
-Excursión Punthuk Setumbu: 260.000rp
-Excursión a Selogriyo: 350.000rp
-Habitación Lotus 2: 275.000rp
-Comida: 90.000rp
-Cena: 140.000rp
-Tarjeta SIM datos 12GB: 90.000rp
IMPRESIONES DE LA ETAPA: Tal y como comenté en la etapa anterior, lo negativo, la habitación de Lotus 2. Selogriyo: recomendable. Borobudur: tan impresionante como Prambanam. Segundo día consecutivo de movernos en transporte público, y experiencia muy positiva y a la vez ágil para ser un servicio público.