Llegamos a Nashville en un vuelo interno operado por American Airlines. Un vuelo de 2h y media bastante movidito por el viento, pero como no tengo problemas de miedos, me dormí durante bastante rato. El avión es pequeño, un estilo Ryanair con 2 asientos a cada lado y con un espacio minúsculo para estirar las piernas, pero soporable por la ilusión.
Una vez allí, fuimos a buscar nuestro coche de alquiler en la empresa THRIFTY. Queríamos un Chevrolet Impala pero nos dieron un Toyota Avalon, que tiene las mismas características. Prácticamente, todos los coches de alquiler son de grandes dimensiones, y al ser 4, cogían justas las 4 maletas en el maletero, haciendo un pequeño tetris.
Lo primero que hicimos al subir al coche fue buscar la emisora de Elvis Radio. La dejo aquí anotada ya que me volví loca buscándola: XM19 . Al ser la Elvis Week, hacían un programa especial, hablando gente que estaba en Memphis, todos relacionados con el Rey.
Nos fuimos al Motel 6 Airport, donde íbamos a pasar allí una noche. Descargamos bártulos y nos fuimos a comernos la noche por Nashville.
Nos encontramos con amigos que habían ido también por su cuenta y con Club Elvis Spain, y cenamos en Sun Diner, un sitio muy concurrido por fans del Rock And Roll, donde el lema de la Sun Records estaba por todo el local. La comida estaba muy buena, con raciones muy grandes y con buena música.



