Para empezar, decidimos ir al Down Town, a ver el ayuntamiento y el Staples Center. Después de dar un par de vueltas por la zona, al no poder aparcar si no era en Parking. Se bajaron mi mujer e hijos a ver el estadio, a mí me daba un poco igual. Al final pude aparcar en la calle y pude acercarme a ver el estadio, aunque solo por fuera. Dentro lo único que te dejan visitar es la tienda, que tiene precios prohibitivos.
Mi hijo no se quería ir de USA sin ver un estadio de Futbol Americano o Beisbol, por lo que decidimos acercarnos al estadio de los Dodgers. No imaginábamos ninguno lo grande que puede ser un estadio de Béisbol. Y no solo el interior, sino también los exteriores. Nos quedamos todos impresionados, con las extensiones de Parking, accesos, tienda, etc.


De aquí, al paseo de la fama. Aparcamos en el parking que hay en el centro comercial donde se encuentra el Dolby Theater. Si comes en el centro comercial, te regalan dos horas de Parking. Por lo que te sale más barato, que dejarlo en cualquier parking de los exteriores. Dimos una vuelta, viendo las estrellas de los personajes más conocidos, entramos en algunas tiendas de suvenir, y comimos en uno de los muchos locales del centro comercial.
De aquí nos fuimos a Pasadena. Queríamos ver por la tarde el Down Town, que habíamos leído que era histórico y tenía bastante ambiente. El centro es bonito y tiene bastantes zonas donde cenar, y aunque la mayoría estaban llenos, en la calle no había casi gente. Cenamos en The Cheseecake Factory, nos lo habían recomendado unos amigos, y nos gustó bastante.