Día 8: Beziers – Séte - Montpellier. 62km. ✏️ Diarios de Viajes de Francia

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Salimos de Beziers, bajando desde la parte alta de la ciudad y atravesando el gran puente de piedra y avanzamos junto al canal, atravesamos la espectacular quintuple esclusa y, durante los primeros 15 km, la ruta discurre plácidamente a través de un carril bici asfaltado. Las playas del Mediterráneo están cerca y en las carreteras colindantes vemos los atascos de entrada a las localidades costeras.

Sin embargo, pasado Portiragnes y su puerto fluvial volvemos a las incómodas pistas de tierra repletas de baches que nos acompañarán durante 12 largos kms. hasta que llegamos a Agde (km. 30), bonita localidad en la desembocadura del río Herault, donde paramos a a hacer un descanso. A partir de aquí, la orientación se hace más complicada; no encontramos ninguna señalización y seguimos camino por una carretera secundaria, un tanto transitada, que, tras 6km., nos lleva a Marseillan, y de allí, al Ethang de Thau, una espectacular laguna costera, separada por una estrecha barrera de arena del Mediterráneo donde se pueden observar multitud de aves marinas.

Los últimos 20 kms. de nuestro viaje transcurren, dejando la laguna a la izquierda y las interminables playas de Mediterráneo a la derecha, en un bonito entorno natural hasta que llegamos a Séte.

Séte (45mil habitantes) es una sorprendente ciudad costera, de ambiente pesquero e industrial, cuyo centro se encuentra atravesado por canales. Tiene mucha vida en verano, aunque, desgraciadamente, no pudimos permanecer mucho tiempo, al tener reservada la noche en Montpellier.

Después del corto paseo por Séte, tomamos el tren (6.30 eur, 30 minutos) que nos llevó hasta Montpellier.

Montpellier (287mil habitantes) es una bella ciudad, con un cuidado y extenso centro urbano completamente peatonalizado. En él, a nivel arquitectónico, destacan su animada Plaza de la Comedia, la Catedral de San Pedro, el Arco del Triunfo, el espectacular acueducto o la facultad de Medicina, la más antigua en actividad del mundo. Cenamos un ratatouille en una de sus numerosas plazoletas.

En Montpellier nos alojamos en un apartamento a unos 10 minutos andando del centro (84 eur habitación doble con baño y desayuno) con un amable y atento propietario y una amplia y cuidada habitación.

A la mañana siguinete, y tras recorrer cerca de 8km llegamos a la estación y cogemos el tren que nos lleva de vuelta a Burdeos. (4h. 50min, 46 eur por persona + 10 por bici). La tarde la aprovechamos para recorrer el centro de Burdeos y la orilla del Garona, incluyendo el famoso espejo de agua. A las 18h acudimos a la estación a devolver las bicicletas. Cenamos en el centro y a la mañana siguiente cogemos el vuelo de vuelta a Madrid.

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