Hoy toca madrugón de 5 am para visitar el lago Sandoval, actividad estrella de la zona. Nos acercan al grupo con la barca motor hasta la entrada al parque para caminar unos tres km antes de volver a subir a una barca a remos, que nos llevará por un bonito pero corto canal rodeado de arboles hasta desembocar en el lago.


Al ser muy pronto hay mas animales, menos barcas y mejor temperatura. No se os ocurra entrar al lago pasadas las 11 pues será todo lo contrario.
Vemos alguna garza, muchos Shanshos (que son pájaros que no pueden volar mucho) una zona con monos que buscan alimento (estos no comen galletas) y una pequeña serpiente.

A la que el sol aprieta, el paseo en barca ya no se disfruta porque los bichos ya se ocultan protegiéndose del calor y porque en la barca te achicharras. Se realiza parada en un pequeño albergue para desayunar y wc a un Sol antes de continuar el lento asado en la barca hasta el punto de salida.
Eso si, con el sol salen los caimanes y podemos ver durante unos segundos uno impresionante de color negro, que se mete al agua enseguida después de golpear con la barca las ramas que lo protegen.
De vuelta al Logde, ya no hay mas actividades hasta la noche, así que solo queda que relajarse, bañarse en la piscina, comer con arroz y tomarse alguna cerveza.

Después de la cena, con arroz, el guía nos lleva por otro sendero, mucho mas bonito que el de ayer, en busca de criaturas nocturnas. La estrella es la tarántula, que se puede ver en algún árbol y agujero en el suelo.

Los escorpiones se supone que también abundan, aunque el único que vimos estaba tan inmóvil tanto al ir como al volver que igual era un imán de nevera.

Y no vimos nada mas, así que a dormir, no sin antes caer en una ciénaga donde me llené de barro hasta las rodillas mientras el guía intentaba pescar peces a machetazos. Cosillas de la selva.