Nuestro siguiente hotel (Awaba Adventure Divers Village) se encontraba en las afueras de Aqaba. Justamente cerca de la zona de la playa del norte. Las habitaciones eran grandes y espaciosas, había una terraza con piscina, tumbonas y mesas. Escogimos esta localización expresamente porqué solo íbamos a estar un día allí y queríamos dedicarlo a hacer submarinismo.
Buscamos un centro de buceo donde nos dieran un buen precio y lo encontramos. El International dive center (se encuentra en el centro de Aqaba). Solamente llegar a esta ciudad fuimos a hablar con ellos para concretar hora y lugar, les pedimos que nos pasaran a buscar, ya que estábamos cerca de la zona donde íbamos a realizar las inmersiones y no nos valía la pena ir hasta el centro para luego volver a la zona de playa. Una vez concertada la cita y el precio, nos quedamos en la playa norte y nos dimos un baño en el Mar Rojo. Si podéis compraros o alquilad unas gafas para hacer snorkel, el fondo de este mar no tiene desperdicio ¡Vais a flipar!. Después de pasar lo que nos quedaba de tarde en la playa volvimos al hotel a darnos un chapuzón en la piscina. Este era nuestro momento real de “vacaciones” ya que siempre que viajamos no paramos, siempre tenemos algo que hacer y que ver.
Una vez pasada la tarde fuimos al centro a cenar al restaurante Hashem Son’s


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