Nos levantamos temprano, desayunamos en el hotel y antes de las 9:00 ya estábamos en la calle. A escasos metros de nuestro hotel, en Rudolfpltaz, se encuentra la puerta de Hahnen, una de las 12 puertas medievales que llegó a tener Colonia. Su estado de conservación es magnífico.




Desde Rudolfplatz parte Hohenzollernring, que es la principal zona de ocio de Colonia, repleta de bares, discotecas, pubs, restaurantes, cines, teatros, etc…Por la noche está repleta de gente. Caminamos por esta calle hasta llegar a Friesenplatz, donde cogimos el metro hacia Dom/Hauptbahnhof, para ver la Catedral de día, visitarla por dentro y subir a la torre. Al salir de la estación te encuentras con Bahnhofsvorplatz (Plaza de la Estación). Dado que es el sitio más céntrico de Colonia siempre hay muchísimo ambiente ya que al movimiento de viajeros que llegan y parten de la ciudad se une que junto a la estación se encuentra la Catedral, el monumento más visitado de Alemania.

Si la noche anterior, ya nos sorprendió la Catedral, por el día no nos sorprendió menos. Es espectacular.



Visitamos la Catedral por dentro. Nos pareció majestuosa. Una auténtica maravilla.



Destacan sus hermosas vidrieras.


Y la joya de la corona de la Catedral de Colonia: La Tumba de los Reyes Magos

La entrada a la Catedral de Colonia es gratuita, aunque la subida a la Torre cuesta 4 euros. La oficina donde se compran los tickets está saliendo de la catedral a la izquierda. Por supuesto, dada mi afición por los miradores y sitios altos no pude pasar la oportunidad de subir a lo más alto. Hay que tener en cuenta que la subida no es fácil. Son unos 500 escalones y, especialmente el último tramo, es complicado al tratarse de estrechos escalones de madera pero…..el esfuerzo merece la pena porque las vistas son increíbles:





Bajamos de la torre y dimos un paseo por Domplatte y Roncalliplatz, que son dos de las plazas que rodean la catedral:
