Para hoy teníamos pensado la subida al teleférico pero como estaba en cerrado decidimos improvisar otro plan y alquilamos un par de motos para movernos por la isla.
El alquiler de las dos motos nos costó 14 € para todo el día.
Una vez tuvimos nuestras motos la primera parada fue:
* SEVEN WELLS > Para llegar a ellas deberás subir unas cuantas escaleras pero merece la pena. No te olvides del bañador (y del repelente), si tienes tiempo merece la pena quedarse un rato y hacer picnic en la zona. Hay un parking "de pago" en la base para aparcar el coche o la moto y después tienes que subir una subida bastante importante con muchos escalones hasta llegar a las cascadas.
*** Muy importante en cualquier caminata que vayas hacer en Malasia por zona de vegetación, ponte mucho repelente de mosquito, sino te acribillaran.***
Llegamos a las cascadas, la verdad que me esperaba un poco más pero los niños se lo pasaron en grande tirándose por las rocas resbaladizas. El agua está fría.


Después de estar un rato bañándonos recogimos las motos y fuimos hacia la playa de Tanjung Rhu Beach y por el camino paramos en varias playas para darnos un baño y comer algo.

Una vez llegamos a la playa, esta parecía el paraíso, sin apenas gente, agua muy caliente y azul.

Después de estar varias hores en la playa fuimos hasta el monumento del Águila (lo encontramos de casualidad en el Maps, no recuerdo ni el nombre).

Después a la zona LAKSA IKAN SEKOG para cenar y ver el atardecer.
Este punto nos decepciono bastante, los puestos de comida era muy pobres y la puesta de sol tampoco era nada del otro mundo.


Cuando acabamos de cenar regresamos a la zona del hotel y aunque teníamos la moto hasta las 9 de la mañana del día siguiente decidimos devolverla ya que no la íbamos a utilizar mas.
La libertad que nos dio ese día la moto fue muy guay y estuvo bien aprovechada.
