Marsella, 10 de noviembre (7-16) ✏️ Diarios de Viajes de Mediterráneo

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Son las 6:55 y ya estamos atracados en Marsella.


Hoy también tenemos bus gratuito de la naviera Si no se tiene esa suerte, recordar que hay bus gratuito del puerto, sólo hay que seguir la línea verde hasta la parada, unos 15 min andando También habría bus público, un poco más adelante, el 35T, ambos tendrían parada cerca de Joliette, el del puerto sería dentro del recinto portuario y el público en la misma plaza Joliette
El bus que pone la naviera tiene la parada frente a la Catedral, dentro del recinto portuario, más cerca del centro, aunque a nosotros hoy nos vendría mejor la de Joliette, ya que queremos coger el tranvía 2 que tiene allí su parada para ir al Palacio Longchamp Cuando se hace el aviso de que podemos bajar, nos dicen que hoy habrá una prueba deportiva y hay algunas calles cerradas, sobre todo en el centro, teóricamente no nos afectaría mucho, ya que esta vez no llegaremos a esa zona
Sobre las 9:30 salimos del barco y tenemos que esperar un poco a llenar el bus, pero pronto estaremos ya cerca de la Catedral, ya vemos que hay una carrera en marcha, justo en la explanada superior de la Catedral tienen una zona de llegada, hay que ir con cuidado para atravesar las calles, ya que los corredores están pasando por la zona, pero con cuidado nos situamos en la parte trasera de la Catedral, ya sólo queda seguir la calle en dirección contraria para llegar a la parada del tranvía en la Plaza de Joliette Para ir al Palacio Longchamp hay que coger el tranvía 2 dirección La Blancarde, se puede sacar el billete en la parada o dentro del tranvía, Tap&Go, lo que sale más barato (1,70 €) ya que no se imprime billete (2 €) A mí no me dejó pagar con el teléfono, pero sí con la tarjeta


Unos minutos después nos bajamos en la parada Longchamp, ya se ve el edificio


La historia del edificio viene dad por el canal de Marsella, construido en el siglo XIX para remediar la falta de agua potable en la ciudad, mediante el desvío de agua del río Durance. En la meseta de Longchamp se erigió una gran torre, diseñada con un semblante majestuoso y todo lujo de detalle, que se convertiría en el palacio de Longchamp. El diseñador del complejo, Henri-Jacques Espérandieu, lo proyectó en torno a la torre de agua, tomando elementos relacionados con el agua, como fuentes y pequeñas cascadas. En el centro, la gran alberca que reúne el agua que iba a ser repartida a la ciudadanía. La primera piedra se colocó el 15 de noviembre de 1839, tardarían 30 años para que los trabajos de construcción del complejo se finalizaran. Consta del pabellón-torre de agua central, el Museo de Bellas Artes de Marsella (en el ala izquierda del palacio), el Museo de Historia Natural de Marsella (en el ala derecha del palacio), un jardín público (al frente) con espacios verdes albercas con cascadas y estatuas alegóricas que representan la gloria del agua, la fertilidad y la abundancia. El parque Longchamp (detrás), donde se encuentran el Observatorio de Marsella, un jardín botánico y un jardín zoológico, cuyos animales fueron reemplazados en 2013 por esculturas animalistas tras la celebración de los eventos de la Capital Europea de la Cultura.


Es un lugar muy agradable y estuvimos mucho rato observando las esculturas, la arquitectura, los juegos de agua Decidimos que ver los dos museos sería demasiado para mí, así que nos decidimos por ver el de Historia Natural, parecido al de Madrid, pero más pequeño Es gratuita la colección permanente y tiene carteles en castellano


Nos gustó mucho venir hasta el Palacio Longchamp Volvemos a coger el tranvía 2 en dirección contrario y regresamos a la Catedral, donde ya han acabado las carreras


Ahora nos toca hacer una visita a su interior. La Catedral fue construida, según los planos del arquitecto Léon Vaudoyer, en la segunda mitad del siglo XIX, entre 1852 y 1893, sobre una explanada fuera del centro de la ciudad, entre el Vieux-Port y el "nuevo" puerto comercial, cerca del distrito de la Joliette y del Fuerte Saint-Jean. Su arquitectura es de estilo neo románico-bizantino, al igual que Notre-Dame de la Garde. Su decoración interior en mármol y pórfido le dan un aspecto llamativo y distinto de la mayoría de construcciones religiosas. Tiene un pórtico monumental flanqueado por dos torres, seguido de una imponente nave principal que tiene 142 metros de largo y una altura que va de los 60 metros de las torres, a los 20 de la nave central pasando por los 70 de la cúpula central, de 17,70 metros de diámetro (la sexta más grande del mundo). En torno al coro se extiende un largo deambulatorio que da acceso a las luminosas capillas. El lugar en el que está erigida viene albergando edificios religiosos desde el siglo V. En el momento de su construcción se edificó ocupando parte del terreno que pertenecía a la antigua catedral románica “la vieja Mayor”. Al excavar sus cimientos se revelaron además, restos de la existencia de una iglesia paleocristiana y un baptisterio sobre el mismo lugar.


También aquí ya han puesto un Belén


Salimos de la grandiosa Catedral, pero que me ha resultado muy fría, sin alma, es lo que tiene ser “neo”


En el lateral derecho vemos los restos de la Vieja Catedral, que se han salvado gracias a las protestas que hubo, ya que se tenía previsto demoler totalmente Ahora están con trabajos de restauración


Ahora vamos a dar una vuelta por el barrio Le Panier, el barrio más antiguo de Marsella, hace años que se intenta recuperar y adecentar el barrio, con sus luces y sus sombras, pero no parece que hayan avanzado mucho desde la última vez que estuvimos por allí


Nos acercamos hasta la Vieille Charité. En 1640, tras un edicto real destinado a encerrar a los pobres y mendigos, el municipio decidió construir la Vieille Charité para acoger a los más desfavorecidos. Pero el proyecto no se pone en marcha hasta 1670 con los planos de Pierre Puget. La construcción se extendió de 1671 a 1745. El edificio acogió a los mendigos de la ciudad durante más de un siglo hasta la Revolución Francesa, momento en el que se convirtió en hospicio. En 1905, La Vieille Charité fue utilizada por el ejército. Luego, en 1922, se utilizó como alojamiento social para las personas cuyas casas habían sido destruidas. En 1943, acogió a algunas familias que habían sido evacuadas antes de la destrucción del Puerto Viejo por los alemanes. El estilo arquitectónico es representativo del siglo XVII con la magnífica Capilla de Puget de estilo barroco con su corte ovoide. La fachada frontal del edificio es del estilo del Segundo Imperio y está decorada con el tema de la caridad. Los edificios fueron construidos en piedra rosa y blanca extraída de la cantera de la Corona al norte de Marsella. El edificio tiene 4 alas, abiertas al interior y con vistas a la Capilla. Tienen 3 niveles unidos por galerías. Hoy acoge varios museos y se puede visitar gratuitamente la zona exterior. A principios del S. XX está abandonado y es Le Corbusier quien decide restaurarlo, pero no es hasta 1961 que empiezan los trabajos de restauración y duraron casi 25 años.


Ya es hora de ir de retirada, pero al llegar a la zona de La Catedral, en vez de ir hacia el puerto y volver al barco, decidimos pasear un poco hasta la zona de los nuevos museos, con su gran explana que da a la entrada del canal del Puerto Viejo, donde podemos ver varios de los fuertes que protegían la ciudad de Marsella, un lugar muy agradable y con bastante gente


Ahora sí, nos vamos de vuelta hasta el bus, hay una cola inmensa, hasta 3 buses se llenaron hasta tocarnos a nosotros, ya iba muy cansada, pero pronto estamos ya de nuevo en el barco, en nuestra última noche. A las 16:05 dejamos el puerto de Marsella, vemos el Celebrity Silhouette, que está en reparación


Nuestra última puesta de sol en el barco


Hoy vamos al teatro, tenemos el espectáculo Life, con los cantantes de siempre, con buenas voces, pero más de lo mismo, nada sorprendente


Decidimos que mañana llevamos nosotros las maletas, así no tenemos que dejarlas esta noche en el pasillo, es más cómodo para nosotros

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