Nueva jornada en el Norte de la isla. Esta vez con un claro objetivo: disfrutar de una barbacoa que gané en un sorteo de instagram. Esta experiencia nos condicionaba la organización del día, así que organizamos la jornada para visitar las playas del norte.
Atravesando la isla para llegar al destino, paramos en el TEMPLO AMMA TOOKAY que cuenta con una interesante leyenda...dicen que unos campesinos, en el s. XIX, quisieron plantar cañas y tuvieron que retirar unas piedras. Una de ellas, en concreto, se les resistió. El dueño del terreno, tras intentarlo, tampoco pudo, incluso le dio varias patadas en su intento de retirarla (y años más tarde, perdió dicha pierna...) Como consecuencia, los habitantes empezaron a tomarlo como un lugar con energía divina y empezaron a orar allí. Posteriormente, se levantó un templo alrededor de la piedra, que algunos interpretaron como la figura de Amma Tookay, madre del universo.
Era domingo, día de culto, así que respetamos sus tradiciones y rodeamos el templo pero no entramos. Me parece súper interesante observar y escuchar sus oraciones, su olor a alcanfor e incienso, sus devotos caminando de un lado a otro realizando sus ofrendas... cultura mauriciana en estado puro



Continuamos el viaje hacia el norte, en concreto al lugar indicado para la barbacoa CAP MALHEUREUX, y allí, debajo de un gran árbol, con un montón de mesas y música en directo, dimos nuestro nombre, nos asignaron mesa, y nos sirvieron lo que ellos llaman barbacoa (no es lo que conocemos aquí como tal), sino un plato con carne y pescado hechos a la barbacoa y acompañado de arroz, ensalada...estuvo muy bien, nos encantó, y pudimos disfrutar del ambiente local, ya que esas barbacoas solo se hacen los domingos, que es el día en que los locales descansan en las playas.
A continuación visitamos la iglesia de madera Notre Dame Auxiliatricie, cuyo tejado rojo y paredes blancas hacen un bello contraste con el azul de la bahía y del cielo.
Se levantó en honor a los naufragios que hubo en la zona, y es que por algo se llama Cap Malheureux...el Cabo de la Desgracia.

Después decidimos recorrer las playas bajando hacia el sur.
Visitamos:
- Pereybere
- Grand Baie
- Mont Choisy
- Y Trou Aux Biches
Ninguna nos cautivó especialmente. El día estaba revuelto por aquella zona, y al ser domingo estaba lleno de locales, se hacía casi imposible hasta aparcar. Incluso en una de ellas encontramos sargazo. Supongo que entre diario tendrán otra perspectiva mejor.
Y algo que ya nos pasó el año anterior, ceder el paso a las cabras. Me encantan este tipo de cosas que suceden donde y cuando menos te lo esperas:

En cuanto pudimos volvimos a coger la carretera principal y elegimos un mirador para la puesta de sol: Jetée de Case Noyale. Y como nos gusta a nosotros, vacío. Allí pudimos volar el dron tranquilamente y disfrutar de otra preciosa puesta de sol:



Finalmente y antes de llegar a nuestro hotel, paramos de nuevo en La Prairie, nuestro lugar de referencia para atardeceres, y la vida y el dron nos regalaron este:

Cenamos, tomamos algo y pronto a descansar, mañana toca hiking de nuevo con Ashwin!
