domingo 22 de septiembre
VUELTA a CASA
Hoy nos levantamos a las 7 de la mañana. La luz es rosada y limpia en la terraza del Hotel Continental.

Saboreamos casi en solitario el último desayuno en el entrañable comedor.
Y en la salita de lujos anaranjados esperamos el taxi que ayer reservamos en la recepción del hotel.
El taxi amarillo entra por la Medina hasta la placita bajo el primer tramo de escaleras. Y el mozo del hotel carga nuestras maletas hasta el coche. Todo muy fácil y cómodo.
Despedida muy amable del recepcionista. Un montón de buenos recuerdos de este histórico y literario hotel y la mágica sensación de haber vivido en otro tiempo entre sus paredes.
Cruzamos una tranquila Tanger hasta el pequeño y conocido aeropuerto Ibn Battuta.
Ningún problema con el equipaje con Air Arabia. Y a las 12 del mediodía dejamos nuevamente Marruecos.

Acabamos el relajante viaje con la certeza de haber encontrado un Marruecos mucho más tranquilo, más maduro, más seguro de sí mismo. Muy distinto del Marruecos esquivo y pedigüeño de hace 30 años.
Más ordenado, más higienizado, pero conservando e incluso acentuando la vieja esencia que lo hace un país único.
Nos ha gustado comprobar los efectos de la reivindicación de la cultura bereber o amazig que se nota incluso en los rótulos de las calles escritos en árabe, francés y en los curiosos caracteres de la lengua amazig que desconocíamos totalmente.
Nos ha gustado reencontrar las perfectas y peculiares artesanías aguantando con orgullo el paso del tiempo frente a la invasión globalizadora que sufren muchos otros paises.
Nos ha gustado volver a saborear la tradicional y deliciosa gastronomía marroquí que tanto han disfrutado nuestros nietos.
Y nos ha gustado constatar el notable cambio de las gentes de Marruecos en su relación con los turistas. Al menos puedo decir que nosotros no hemos vivido ninguna situación desagradable de las que habíamos vivido hace años.
En fin, un tranquilo viaje para viajeros seniors que dedicamos a todos los que aman Marruecos y les gusta viajar A RITMO LENTO.