Aproximadamente a las 10:25 de la mañana llegamos a el aeropuerto de Seúl tras muchas horas de avión y un pequeño paseo por Roma, volamos desde Madrid con Alitalia y aprovechamos para dar una vuelta que nunca viene mal. El vuelo sin incidentes, no es de las mejores compañías que he volado pero llegamos a destino.
Queríamos coger el tren que sale desde la estación de Incheón a las 12:07 de la mañana, el numero 131 directo a Busán para no tener que estar bajando en Seúl, aunque todos pasan por Seúl, pero finalmente no nos dio tiempo entre que sacamos dinero, compramos en el 7 Eleven de la salida número 5 la T-Money, tarjeta monedero para mi súper útil en corea pues pagas metros, buses (en ambos te hacen un pequeño descuento y los trasbordos entre metro-bus te descuentan bastante), puedes comprar en los supermercados y sobre todo no andas con calderilla en los metros ni sacando ticket, pues la pasas a la entrada por los tornos y a la salida y te va descontando la cantidad correspondiente.
Solo hay que seguir estos carteles para llegar al tren
No dirigimos a al tren que hace todas la paradas y nos lleva a Seul, precio aproximado unos 4600w a Seúl Station y tarda una hora aproximadamente. Usamos la T-money para pagar este trayecto y así no estar sacando los ticket en la máquina aunque es muy fácil también hacerlo en las máquinas y se puede hacer en Inglés. Una vez llegamos a Seúl Station nos dirigirnos a la taquilla de KTX, donde compramos el billete a Busán,lo pagamos con tarjeta, 59.800 won por persona.Comimos algo en la estación rápido y compramos sushi para llevar, tengo que reconocer que como el sushi de Japón no hay nada. Localizamos nuestro anden, todo muy fácil, pues en las pantallas se localiza rápido el andén y está en Ingles y ya solo queda subirte a tu vagón y buscar tu sitio. Ahora nos quedaban unas 2 horas y media por delante donde entre ver el paisaje, bastante seco pues estábamos en pleno marzo, y alguna cabezadita se nos pasó rápido.
Ilustración de cómo sacar los tickets
Ticket de tren
Una vez llegado a Busán Station, cogimos el metro hasta la estación de BEOMNAEGOL que era donde estaba nuestro hotel, precio del trayecto de metro unos 1200 con T-Money.Salimos por la salida 8 y sobre las 5 de la tarde ya estábamos en el hotel.
Kimchee Busan Guesthouse -precio 123€ para tres noches habitación Doble.
Qué decir del hotel, estaba muy bien, escogimos habitación Twin ,era muy grande y confortable.El problema es que no se podía pagar con tarjeta de crédito, así que tocaba ir a sacar dinero, en la entrada tenían un cajero pero era solo para tarjetas locales, por lo que después más adelante averiguamos, pues en varios cajeros que probamos no nos expendía el dinero, y al final nos dimos cuenta que solo podíamos sacar en los que decía GLOBAL.
Fotos de la habitación
Salimos a dar una vuelta por Busán y así hacer nuestra primera toma de contacto y partimos hacia la playa de Gwangalli, para ver el famoso puente de Busán iluminado.Para llegar cogimos otra vez el metro, cogimos nuevamente la línea 1 hasta Seomyeon (119), donde cambiamos a la línea 2, en dirección a Jangsan y nos bajamos en la parada GEOUMNYEONSAN (210) y salimos por la salida 3. Una vez allí nos guíamos por un pequeño mapa que pongo a continuación y llegamos a la playa sin problemas.
La playa de Gwangalli (광안리 해수욕장) tiene 1,4 km de largo y 64m de ancho de playa. Es famosa por su arena fina y un lugar popular de reunión para la gente local. La playa se encuentra dentro de una cala abarcado por el gigantesco puente Gwangan que se ilumina por la noche con colores cambiantes y muy bonito de ver.
Tras pasear por la zona, comer algo y sacar dinero nos fuimos para el hotel en metro que ya llevábamos muchas horas de viaje acumuladas en nuestro cuerpos y tocaba lidiar con el jet Lag, cosa que siempre es durilla, a las 3 de la mañana hora local ya tenía los ojos como platos con ganas de salir a comerme el mundo
Queríamos coger el tren que sale desde la estación de Incheón a las 12:07 de la mañana, el numero 131 directo a Busán para no tener que estar bajando en Seúl, aunque todos pasan por Seúl, pero finalmente no nos dio tiempo entre que sacamos dinero, compramos en el 7 Eleven de la salida número 5 la T-Money, tarjeta monedero para mi súper útil en corea pues pagas metros, buses (en ambos te hacen un pequeño descuento y los trasbordos entre metro-bus te descuentan bastante), puedes comprar en los supermercados y sobre todo no andas con calderilla en los metros ni sacando ticket, pues la pasas a la entrada por los tornos y a la salida y te va descontando la cantidad correspondiente.
Solo hay que seguir estos carteles para llegar al tren
No dirigimos a al tren que hace todas la paradas y nos lleva a Seul, precio aproximado unos 4600w a Seúl Station y tarda una hora aproximadamente. Usamos la T-money para pagar este trayecto y así no estar sacando los ticket en la máquina aunque es muy fácil también hacerlo en las máquinas y se puede hacer en Inglés. Una vez llegamos a Seúl Station nos dirigirnos a la taquilla de KTX, donde compramos el billete a Busán,lo pagamos con tarjeta, 59.800 won por persona.Comimos algo en la estación rápido y compramos sushi para llevar, tengo que reconocer que como el sushi de Japón no hay nada. Localizamos nuestro anden, todo muy fácil, pues en las pantallas se localiza rápido el andén y está en Ingles y ya solo queda subirte a tu vagón y buscar tu sitio. Ahora nos quedaban unas 2 horas y media por delante donde entre ver el paisaje, bastante seco pues estábamos en pleno marzo, y alguna cabezadita se nos pasó rápido.
Ilustración de cómo sacar los tickets
Ticket de tren
Una vez llegado a Busán Station, cogimos el metro hasta la estación de BEOMNAEGOL que era donde estaba nuestro hotel, precio del trayecto de metro unos 1200 con T-Money.Salimos por la salida 8 y sobre las 5 de la tarde ya estábamos en el hotel.
Kimchee Busan Guesthouse -precio 123€ para tres noches habitación Doble.
Qué decir del hotel, estaba muy bien, escogimos habitación Twin ,era muy grande y confortable.El problema es que no se podía pagar con tarjeta de crédito, así que tocaba ir a sacar dinero, en la entrada tenían un cajero pero era solo para tarjetas locales, por lo que después más adelante averiguamos, pues en varios cajeros que probamos no nos expendía el dinero, y al final nos dimos cuenta que solo podíamos sacar en los que decía GLOBAL.
Fotos de la habitación
Salimos a dar una vuelta por Busán y así hacer nuestra primera toma de contacto y partimos hacia la playa de Gwangalli, para ver el famoso puente de Busán iluminado.Para llegar cogimos otra vez el metro, cogimos nuevamente la línea 1 hasta Seomyeon (119), donde cambiamos a la línea 2, en dirección a Jangsan y nos bajamos en la parada GEOUMNYEONSAN (210) y salimos por la salida 3. Una vez allí nos guíamos por un pequeño mapa que pongo a continuación y llegamos a la playa sin problemas.
La playa de Gwangalli (광안리 해수욕장) tiene 1,4 km de largo y 64m de ancho de playa. Es famosa por su arena fina y un lugar popular de reunión para la gente local. La playa se encuentra dentro de una cala abarcado por el gigantesco puente Gwangan que se ilumina por la noche con colores cambiantes y muy bonito de ver.
Tras pasear por la zona, comer algo y sacar dinero nos fuimos para el hotel en metro que ya llevábamos muchas horas de viaje acumuladas en nuestro cuerpos y tocaba lidiar con el jet Lag, cosa que siempre es durilla, a las 3 de la mañana hora local ya tenía los ojos como platos con ganas de salir a comerme el mundo