Viaje al Norte de la India con conductor ✏️ Blogs de India

Hoy salimos pronto hacia Jaisalmer, la carretera no es mala y el conductor es muy ducho con el volante. Vamos parando en algunos sitios para hacer algunas fotos. Antes de llegar como vamos muy bien de tiempo, Mahendra nos propone ver Fort Pokran, lo cual aceptamos, allí nada más llegar se nos acerca uno de los guardias de allí y se nos pone a hacer de guía, lo cual no nos parece mal, aunque ni su inglés ni su español son fluidos, pero bueno nos enseña aquello bastante bien y nos hace fotos, aquí todos los guías han desarrollado una gran habilidad para hacer fotos curiosas, y así ganarse la propina. Después de visitar el palacio nos despedimos de él no sabemos cuánto darle, le soltamos 200 rupias y a juzgar por lo contento que se pone parece que no hemos sido tacaños, incluso decide acompañarnos un poquito más. Subimos por la parte alta del fuerte, ya solos, hacemos algunas fotos del fuerte y de lugareños y regresamos al coche donde nos espera el conductor echando una cabezadita a la sombra. Cogemos el coche y llegando a Jaisalmer decimos que queremos cambiar dinero, elconductor nos para en un sitio donde él mismo nos cambia el dinero a un cambio bastante mejor de todo lo que hemos encontrado desde nuestra llegada, llegamos al Hotel Fort Rang Mahal, de impresionante aspecto exterior, Nos deja en el Hotel de Jaisalmer para que descansemos una media hora ya que enseguida empieza la excursión. Aprovechamos para comer algo de lo que llevamos de España, ya que no hay tiempo de ir al restaurante. Salimos del hotel donde también como en otros hoteles nos han hecho una mejora de la habitación reservada, nos han dado una habitación bastante grande y buena, en recepción se nos acerca un joven a hablar con nosotros, del que suponemos es alguien en busca de propina y apenas le hacemos caso, hasta que vemos a nuestro conductor y entre los dos nos explican que éste va a ser nuestro guía en Jaisalemer. Nos explica que su nombre es muy complicado y que le llamemos Jay o Sergio. Vamos primero a los Cenotafios Reales (Bada Bagh), son mausoleos hechos en honor a Maharajás y gente importante que fallecía. En estos cenotafios hay unas esculturas que suelen constar del Maharajá a caballo y unas cuantas mujeres, que eran las esposas del Maharajá que se habían inmolado junto al Maharajá, si las muerte del maharajá era en la batalla, las mujeres se inmolaban para no caer en manos de sus enemigos. Como se nos ha hecho tarde para ir al sunset de Jaisalmer a ver la puesta de sol, la vemos desde los cenotafios y es una vista bonita, pero un poco estropeada por los molinos de energía eólica que hay en la zona. Acabada la puesta de sol nos dirigimos hacia Jaisalmer, donde nos dicen que nos va a dejar en el hotel para descansar, les decimos que no, que nos dejen en el centro de Jaisalmer que lo que queremos es pasear y ver la ciudad y cenar y que nos recojan después. Al final se queda Jay con nosotros y nos va enseñando un mercado que hay por el fuerte. Loli dice que quiere ver saris, Jay nos lleva a una tienda donde nos enseña montones de saaris, yo a los pocos minutos ya estoy harto de ver saaris, a Loli le gustan, pero los buenos son caros para algo que probablemente no te vayas a poner nunca, al final salimos de allí diciéndolo que lo pensaremos para el día siguiente. Terminamos de dar un paseo y nos lleva Jay a cenar al restaurante que queríamos nosotros The Trio, la terraza tiene mucho encanto y unas vistas espectaculares sobre el palacio del Maharajá y allí cenamos de maravilla, aunque otra vez más, pollo, pollo Tandori con Thali, que está riquísimo con una cervecita (botellín de 650 cc) Loli toma una cena vegetariana, un par de botellas de agua de litro y yo un postrecito, la cena ha sido estupenda por unos 10€ cada uno. Jay ha estado con nosotros todo el rato, aunque el sólo ha tomado un Lassi, aunque le insistimos que pidiera algo para cenar. Al acabar nos llevan al hotel, donde por la noche aún nos sorprende más la espectacularidad del hotel, una piscina iluminada preciosa, un jardín muy bonito con el bufet del restaurante en el jardín, la habitación es muy grande, el mobiliario no excesivamente moderno, para nosotros comparado con España la habitación con su enorme baño estaría entre 4 y 5 estrellas, el exterior del hotel es una maravilla.

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Hoy Jay nos enseña el fuerte de Jaisalmer, Jay conoce mucho de la historia de Jaisalmer y de la India, es muy joven pero sabe mucho. Jaisalmer nos sorprende por lo limpio y por lo masificado turísticamente que está. Entramos a ver los templos Jainíes que están inmaculados de limpios, nos descalzamos para la visita, al salir nos espera jay y vamos viendo el resto del fuerte y al acabar nos lleva a la terraza del hotel Mhandir Palace para allí tomar una cocacola ver las vistas de Jaisalmer, la ciudad dorada y que Jay nos siga contando historias de la India, de las castas, de su forma de vida… Al terminar y a petición nuestra nos lleva a ver unos Havelis donde hay artesanía, a mí no me interesa absolutamente nada de lo que se vende allí, a Loli sí, al final se compra una tela o tapiz, que es bonito aunque no se para que lo quiero, nos empezaron pidiendo 60 € nos lo llevamos por 40, me imagino que lo normal sería pagar 30, pero bueno, ya no quiero perder más tiempo. De allí Jay nos propone un restaurante, pero le decimos que le agradecemos la propuesta pero que queremos ir a comer al restaurante Mónica, allí comemos muy bien los 3, Jay se quedó con nostros, comimos de maravilla con una cervecita muy, muy fresquita y pagamos unos 11 € para los 3, alucinante. Al acabar, nos despedimos de Jay no sin antes darle su propina y prometerle que hablaremos bien de él en el foro. Mahendra nos lleva a la excursión en camello en el desierto de Thar, puede que sea una turistada, pero el paseo a la hora que ha escogido es una maravilla, vamos cada uno en un camello en un grupo y cada camello tirado por un conductor de camellos, el mío un señor ya mayor y el de Loli por el hijo, un niño de unos 8 años, damos el paseo y nos sentamos en las dunas para ver la puesta de sol y hacernos algunas fotos con los cazaturistas de la zona, pero hay una señora con una bebé tan preciosa que no puedo dejar de caer en la tentación de hacerme una foto. Al acabar la puesta de sol regresamos en el camello al parking, allí nos quitamos unos cuantos kilos de arena de los zapatos, damos la propina al camellero y el conductor nos lleva al hotel, en la carretera vemos que para, no sabemos para qué hasta que una vez parados vemos una vaca allí en medio, menos mal a que la vio con tiempo, con esto se me pasa la idea inicial de hacer los viajes de noche para aprovechar más los días, allí nos espera a que nos duchemos para llevarnos a cenar a su casa, donde nos ha invitado a cenar ésta noche con su familia, nos esperan sus encantadoras esposa e hija. Cenamos los tres, pues su mujer y su hija, Nimita, ya han cenado. Nos ponen unos aperitivos y un thali muy rico y muy bien elaborado. Tras cenar, conversar con ellos un poco y hacernos unas fotos, le damos a Mahendra algún medicamento, pues está muy resfriado, se ve que ayer tenía calor se puso agua fría en la cabeza y hoy está con fiebre, pero el hombre en ningún momento se ha quejado. Nos devuelve al estupendo hotel donde nos hacemos más fotos y pasamos la noche.

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Nos levantamos, desayunamos, preparamos las maletas y tras hacer más fotos en el hotel, nos recoge Mahendra, volvemos a pasar por su casa, donde recogemos a su esposa para llevarla al colegio donde trabaja de directora, está a unos 45 minutos de viaje y nos agrada la idea de compartir un rato de viaje con una mujer tan agradable. Al llegar al colegio, le están esperando unas encantadoras niñas uniformadas, para que les de las llaves y abrir la escuela, nos hacemos unas fotos con ellas y continuamos nuestro viaje.
Atravesamos Jodhpur, una ciudad bastante atascada y llegamos a nuestro hotel, el Park Plaza, por fuera es un hotel moderno sin la vistosidad de los palacios de los días anteriores pero con una habitación, que también nos han mejorado, excelente. Como tenemos poco rato hasta que hemos quedado con el guía, comemos algo de nuestras reservas de ibéricos españoles, nos cambiamos y salimos para iniciar nuestra visita. A las 3 ya nos están esperando el conductor y el guía y nos dirigimos a ver los Cenotafios Reales, son mucho más impresionantes y bonitos que los que hemos visto hasta ahora. De allí nos dirigimos hacia el fuerte Meherangarh, es un fuerte impresionante, muy bonito, lo visitamos con las explicaciones de nuestro guía, al acabar nos dirigimos ya anocheciendo a ver la Torre del Reloj y el mercado, después de esto el guía nos ofrece ir a ver una tienda donde se venden productos textiles de renombre tipo Hermés Louis Vuiton,… le decimos que se lo agradecemos pero que preferimos ver la ciudad, así que damos una vuelta más por el mercado y luego nos encontramos con el conductor, que me invita a tomar un lassi delicioso, hacemos unas fotos más y volvemos al hotel , donde Loli aprovecha para comprar dentro del hotel unas babuchas. Vemos que en el jardín hay música en vivo, nos acercamos a hacernos unas fotos haciendo el chorra y bailando junto a los músicos, así que el espectáculo lo damos nosotros, pero nos reímos un poco. Nos arreglamos y nos espera el conductor para llevarnos al restaurante que me habían recomendado, como Mahendra está un poco malo, le insistimos que no nos espere, que volvemos en un tuc-tuc, hay que insistir le un poco y acepta pero antes nos deja negociado con un tuc-tuc al precio de 50 rupias y que el chico nos espere mientras cenamos, no me puedo creer que por menos de 1 euro alguien nos espere más de una hora y nos lleve al hotel. El restaurante On the Rocks, es un restaurante encantador metido en una roca y con árboles, un paraje muy bonito, que al ser de noche no podemos apreciar totalmente, cenamos muy bien, eso sí, ésta vez sin cerveza porque hay elecciones y hay ley seca durante 2 días, cenamos con agua pero una cena excelente en un sitio de lujo por unos 10€ cada uno. Después de cenar allí nos espera nuestro conductor de tuc-tuc nos lleva para el hotel, nos hacemos unas cuantas fotos y le pagamos sus 50 rupias, como el chico nos mira con cara de pena, haciendo un alarde de generosidad decidimos darle 100 rupias, la verdad que vale la pena solamente por verle lo contento que se pone. Eso sí, en el tuc-tuc de noche se pasa un poco de frío, sobre todo si vas en manga corta. Volvemos al hotel y aprovechamos el wifi para chatear con la familia y nos acostamos.

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