MUNICH, SALZBURGO Y VIENA: UN VIAJE MUY ESPERADO ✏️ Blogs de Austria

Hoy nos dejamos el día para visitar 100% Munich. Por la mañana lo primero que hicimos fue ir a devolver el coche ya que no lo íbamos a usar mas e ir a Marienplatz desde donde salen los tours gratuitos de Sandemans, nosotros lo habíamos reservado por internet pero no hace falta. Al lado de la columna de Maria ya veréis a los diferentes guías y sus idiomas. Nos tocó una Madrileña muy salá (Lara) y fue una autentica gozada, íbamos con el pequeñajo y lo tuvo las 3h entretenido, explicándole cosas, corriendo con él por Munich, jugando y culturizándonos al resto. Después lo tuve una temporadita hablando de Lara y de lo bien que se lo había pasado. Está genial para hacerte una idea de la historia del país y situarte en la ciudad viendo lo más relevante. El Tour empieza a las 10.30h para poder escuchar a las 11h el carrillón mientras te cuentan su historia.
El nuevo ayuntamiento de estilo neogótico es una auténtica belleza que no te cansas de mirar e intentar descubrir todos sus detalles, el dragón escalando el lateral del ayuntamiento es increible, y oir el carrillón mientras ves las figuras girar en su danza es un espectáculo que llena la plaza de gente mirando al cielo para no perderse ni un movimiento.
Cuando acabó nos fuimos caminando a ver la catedral de Freuenkirche (Nuestra querida señora) la iglesia mas grande con capacidad para cerca de 2000 feligreses y para mi bastante sencilla, durante muchos años fué el edificio más alto de Munich porque había una ley que prohibía edificar por encima de ella. Durante la segunda Guerra Mundial fue destruido parte del techo y una torre. Cuando entras dentro puedes ver la famosa "Huella del diablo" que según la leyenda la dejó de rabia al sentirse engañado por el constructor de la catedral, y por el tamaño de la misma creo que usaba un 44 mínimo...vaya pies!
Salimos de ahí y fuimos caminando a descubrir la calle de los tramposos, en honor de los Muniqueses que durante el mandato de Hitler pasaban por esa calle para evitar pasar por la calle de al lado y cuadrarse y hacer el saludo nazi ante la esvástica. los de las S.S se percataron de tal agravio y los que pasaban por allí más de dos veces eran castigados. Ahora hay una linea dorada en el suelo en honor a esos valientes silenciosos. También es super curioso como todavía en el cartel de la calle se puede ver el antiguo nombre de la calle que era Hitler, no hay nada como un vinilo para tapar el pasado, así de sencillo!
Y no olvideis tocar los leones que están en la puerta de Alte Residenz que trae suerte, pero sólo los tres primeros, el cuarto te la quita.
Al lado está la famosa "Teatinerkirche" fundada por los Saboya en agradecimiento por el nacimiento del heredero, la pena es que por fuera estaba en obras y no pudimos ver su hermosa fachada. Es de estilo barroco y mucho más pequeña que la catedral y para mi mucho más bonita, el estuco de su interior la hacen casi resplandeciente, todavía más en contraste con su púlpito negro.
Paseando por las calles fuimos a ver el famoso Teatro Nacional por 3 veces restaurado por los "leves" problemas que sufrió con el fuego en varias ocasiones, la versión actual es una recreación de la original.
Ya era casi las 13.30h y nos fuimos a acabar la ruta en la maravillosa cervecería Hofbräuhaus que es la cervecería más antigua y famosa de Munich y nos encantó la historia de los pantalones Bavaros y de cómo los cerveceros usaban un palo por debajo de la mesa para golpear las piernas de sus “vecinos” y avisar que iban a descargar sus vejigas en aquel momento…pies arriba!!, todo fuera por no levantarse de la mesa y perder su asiento y su cerveza. Aunque el olor tendría que ser… no me extraña que las mujeres no tuvieran muchas ganas de entrar (también lo tenían prohibido) en aquellos momentos.
Como ya estábamos en la hora límite de las 14h nos fuimos a comer al restaurante que está en plena Marienplatz ("Ratskeller") debajo del ayuntamiento y que también nos había recomendado una amiga que había estado allí varias veces. Sólo puedo decir que es Excepcional, son como varias plantas y zonas delimitadas como si fueran diferentes mundos, a nosotros nos tocó una mesa altísima en mitad de una especie de pasillo. El servicio espectacular y super atento (nos hicieron fotos al grupo sin preguntárselo) el precio eso si, un poco caro, aunque también hay que pensar que estamos en pleno centro de Munich, aunque tengo claro que cuando vuelva, repetiremos!.
Después de comer seguimos haciendo rutilla y decidimos entrar en el Rathaustrum (Antiguo ayuntamiento) que había leído que escondía el Museo del juguete de los niños alemanes y realmente es mágico. Subes una escaleras de caracol que hay dentro de una torre como de cuento de hadas y que te llevan a varias plantas llenas de juguetes antiguos que algunos son una maravilla, el precio es de 3€ y además por sus ventanas tienes unas vistas increíbles de toda Marienplatz y haces unas fotos espectaculares, aunque tienes que hacer un poco de equilibrio en una escalerilla de pared para poder llegar a los ventanales, pero todo sea por esas vistas!!
Seguimos callejeando y nos fuimos a ver la Iglesia de Alter Peter, es la segunda iglesia más importante de la ciudad y queríamos subir a su torre que tiene un mirador con espectaculares vistas, aunque ya no nos dejaron subir por la hora, así que nos quedamos con las ganas!!. De ahí nos fuimos a presentar nuestros respetos a Julieta (regalo de verona a Munich), sobretodo mi cuñado y mi maridín que se lanzaron a ello sin dudarlo (si frotas su pecho encuentras el amor), y por lo que se podía ver en el color del bronce de la figura, mucha más gente!. Paseando llegamos al Mercado de Vitualienmarkt que es inmenso, aunque hay que decir que ya por las horas muchos puestos estaban recogiendo, merece mucho la pena perderse por sus calles y comparar precios, mis cuñados que están más metidos en estos asuntos de las frutas y verduras, alucinaban con las diferencias con España, yo como compro poco ni me enteraba la verdad, eso sí increíblemente ordenado todo.
Lo que tenía muchas ganas de ver por que había leído mucho de ella era la iglesia de Asamkirche (Sendlinger Straße 32) una minúscula iglesia rococó pero que resultó ser tan preciosa como habíamos leído. Llegamos justo para entrar abrir los ojos como platos de lo recargado que estaba, hacer “Ooooooh” y que nos invitaran a irnos que ya era la hora de cerrar, así que si vais, ir con tiempo porque hay muuuucho detalle para ver.
Y de aquí comenzó nuestra odisea, mi marido quería ver a los surferos del Englischer Garten (U-Bahn U3 o U6. Paradas en Odeonsplatz o Universität Horario: 10.00 a 22h)que es el Central Pàrk de Munich. Los vió en un programa de la Tv y allá que fuimos a su búsqueda y nunca mejor dicho, porque cogimos el metro y nos confundimos de parada mil veces, eso sí nos sirvió para ver las 3 puertas del antiguo recinto amurallado de Munich hasta que logramos llegar a la parada correcta para entrar al parque.
La verdad que yendo de camino veíamos a muchos grupos con las tablas y los monos de surf por la calle, daba la sensación que te ibas a encontrar con la playa a la vuelta de la esquina, vamos que no es una moda de un grupito perdido por la mañana, lo hacen muchos y a cualquier hora, nosotros entre que los buscábamos, recorríamos el parque y llegábamos al sitio, nos daban las 8h de la tarde, ya de noche y aquello estaba lleno de tios surfeando serían como unos 8 o 9, es curioso de ver si os pilla de paso la verdad y un buén final para el intenso día de hoy.

---

Este creo que fue el momento que peor lo pasamos de todo el viaje, que angustia!!!!. Los billetes del tren los había comprado por internet, y nos habían salido a 10.00€/pax con camarote para los 5, realmente muy buen precio y así podíamos ir tranquilos sin tener que comprar el billete en la estación, y menos mal porque menuda nos esperaba!! Nos levantamos temprano y salimos de casa sobre las 7h porque nos salía el tren a las 8.18h, lo teníamos todo organizado, coger el U-BAHN U3“Fornsterdieren Allen” hasta “Sedlinger Tor” y transbordo a U2 hasta “Hauptbahnhof Central station” unos 24 min lo que nos daba tiempo de sobra para llegar al tren. El metro llegó perfecto nos fuimos ha hacer el transbordo y comenzó el caos. Esperando al metro que no llegaba y el andén cada vez con más gente y por megafonía dando mensajes en Alemán que no teníamos ni idea que decían mientras veíamos que había gente que se marchaban, menos mal que había una chica españolita que nos oyó y nos tradujo que había averías y venía con retraso. Pasamos de esperar y nos fuimos con nuestras maletas a coger otro metro hasta la estación central. Una vez allí ya la desesperación total, la conexión entre la U-Bahn y la estación estaba en obras y aquello estaban fatal señalizado, venga a ir por los túneles donde señalaban los carteles y nada y vuelta para atrás y subíamos por unas escaleras mecánicas y nos llevaban a la calle y vuelta para abajo. Preguntando a la gente y la mitad nos mandaban de vuelta para atrás y los otros nos miraban como locos que queríamos atacarlos o algo y nosotros viendo que eran ya las 8.10h y que perdíamos el tren. Al final después de andar por esos laberintos durante más de 20min vimos a unos revisores y allá que nos lanzamos casi con lagrimas en los ojos de alegría y desesperación, nos cogieron los billetes y cuando vieron la hora alucinaron, nos indicaron para subir por unas escaleras mecánicas que juraría que eran las que ya habíamos subido pero que por algún efecto mágico tipo como la peli de Harry Potter, te llevaban al anden en vez de a la calle. Comenzamos a correr como locos (nuestro tren estaba en la última via e iba a salir YA), volando con las maletas, apartando a la gente y casi saltamos dentro del tren justo para que se cerraran las puertas. En ese momento ya no sabíamos si llorar, reir o qué. Nos fuimos recorriendo el tren hasta llegar a nuestro camarote, soltamos las maletas nos sentamos de golpe y creo que perdimos el conocimiento todos del stres. Menos mal que tuvimos tiempo de sobra para relajarnos y llegar a Salzburgo en “Modo vacaciones” a las 10.00h de la mañana.
Cuando llegamos nos fuimos a buscar el apartamento para descargar la maletas, pensando que estaba lejísimos, nos pusimos a esperar un bus que nunca llegaba, así que miramos en internet y decidimos ir andando porque realmente estaba a 2 calles de allí (ya os dije que soy Rioga y calculo faltal las distancias). El apartamento lo cogimos porque estaba céntrico y con parking gratis y eso es un lujo, aunque no lo recomiendo, era un poco horrible. Creo que era de las “primeras casas” que se construyeron en Salzburgo y no lo habían arreglado nunca, algo tenía que tener el ser tan céntrico, con parking y tan barato… al menos no nos hizo falta nunca durante nuestra estancia coger el bus para volver al apartamento.
Una vez dejamos todo nos fuimos a ver los Jardines de Mirabell (Mirabellplatz 4) que hacía un sol de veranito mágico y como fan que soy de “Sonrisas y lagrimas” este sitio era de visita obligada y más siendo Patrimonio de la Humanidad por la Unesco.
Aquí los niños de la familia Trapp liderados por la institutriz María entonan el famoso “Do-Re-Mi” y había guías con aparatos de música poniendo la cancioncilla y bailando alrededor de la famosa fuente, eso y una boda japonesa con los novios haciéndose fotos y todos nosotros haciéndole fotos a sus invitadas que iban preciosas con los Kimonos tradicionales, la novia iba a lo Sisi, cosa que me pareció un espanto, aunque supongo que si yo fuera a su país me casaría con sus kimonos así que…para gustos, los colores!. El Palacio es de 1606 y se erigió por encargo del Arzobispo Wolf Dietrich von Raitenau para su amante Salome Alt. Hoy en día alberga las oficinas del alcalde de Salzburgo, así como los despachos del ayuntamiento, y tiene unas increíbles vistas de la Fortaleza de Hohensaalzburg desde sus jardines. Nosotros no entramos dentro y preferimos pasear por los jardines que son preciosos, hay un jardín lleno de enanos que da mucho juego para las fotos y te ries un rato. Después de mil fotos en las que casi era imposible no salir con 7000 personas al lado decidimos ir hacia el centro de Salzburgo, antes de cruzar el rio es impresionante la imagen de la fortaleza de Hohensalzburgo sobre la ciudad.
Las calles del centro son preciosas, empedradas y con los carteles de las tiendas sobresaliendo de las fachadas en forja y sobretodo pasear por su famosa calle Grano que es sin duda la mas comercial de todas. Pasamos por delante de la casa natal de Motzar aunque lo dejamos para otro día, de lo llena de gente que estaba y nos fuimos paseando a la zona de catedral a ver la famosa plaza de Kapitelplatz con su bola enorme su hombre subido en ella y el ajedrez gigante, donde por supuesto estaban echando una partida, todo ello rodeado de puestos callejeros y al pie de la maravillosa fortaleza.
Y ya era hora de empezar a usar nuestra Salzburgo car que había comprado por internet y empezar a amortizarla subiendo a la fortaleza. Desde luego esta tarjeta es un lujo, es como si te dieran las llaves de todo Salzburgo y te dijeran: “sírvase usted mismo”, a parte de que te la envían por correo a tu casa con un montón de guías y planos de la ciudad.
Para llegar a la fortaleza lo mejor es subir en el funicular que está al pie de la montaña (C/Festungsgasse,4) sale bastante seguido y te va dejando ver unas vistas de la ciudad increíbles. Y una vez arriba, a callejar!!
Hohensalzburgo está considerada como la mayor fortaleza de Centroeuropa conservada en su totalidad, además de tener el honor de que nunca ningún enemigo la tomó en su totalidad. En una de sus salas puedes ver un video de cómo se fue construyendo por partes y es increíble. Como íbamos con el peque fuimos a ver el museo de las marionetas, aunque no entramos a ver el espectáculo que la opera no nos va mucho. Pero tienen una exposición de marionetas que se pueden visitar free y son muy chulas. Seguimos callejeando y desde luego la fortaleza puede abastecerse sola, no me extraña que no la conquistara nadie aquello es inmenso, casi mas grande que un pueblo, y sus torres de defensa con los cañones desde los cuales tienes unas vistas increíbles de todo Salzburgo. También visitamos el museo de la fortaleza pero como a nosotros no nos gustan este tipo de museo (armas, uniformes y demás) lo pasamos bastante rápido, además de que empezaba a nublarse el día y auguraba lo que iba a ser el resto de nuestro viaje por Salzburgo…
Después de mil fotos con la ciudad a nuestros pies y recorrer un poco más sus patios, decidimos bajar para comer algo que no se nos fuera tan de presupuesto como el restaurante de la fortaleza. Como después íbamos a hacer la ruta en barco por el rio Salzach (gratis con nuestra Salzburgo car) nos fuimos a comer a un Macdonalds, sí lo se, somos lo peor, y a parte que la broma nos salió casi más cara que comer en un restaurante normal. Y aquí comenzó nuestra lucha por no pagar al entrar en los baños públicos. Me parece un robo que si has consumido tengas que pagar 1€ por ir al baño, así que como buena catalana y gracias a que los austriacos creen en la buena fe de las personas y no cierran la barrera del todo pues...
Las rutas en barco www.salzburgschifffahrt.at comienzan en el puente viejo Makartsteg, ya veréis la caseta para sacar los tikets y las colas, y te llevan a los largo del rio hablándote de las casas de algún famoso director (Karajam) o compositor que viven por allí y llegan hasta el puente peatonal de Überfuhr, duran unos 50min y salen casi cada hora (12h, 13h, 15h, 16h y 17h) nosotros cogimos el de las 17h. Además como estaba lloviendo y el barco es cubierto pues no importa tanto, lo mejor es el final de la excursión cuando el capitán (un tío muy majo nuestro capitán) puso un Valls a toda pastilla por la megafonía del barco y empezó a hacer bailar literalmente al barco en mitad del rio, venga a dar vueltas mientras el hacía como de director de orquesta y reía como un loco sin parar. Vamos que la excursión está bien para hacerla si tienes la Salzburgo Car y te entra gratis, nuestro lema era “Hay que amortizar”, sino es una turistada en la que no me dejaría el dinero. Como ya era tarde nos fuimos paseando hasta casa a descansar del maravilloso día y cruzando los dedos para que dejase de llover mañana.

---

Después de ducharnos y desayunar empezamos de nuevo el día…lloviendo!!. Como estábamos a 15min del centro decidimos ir andando tranquilamente a ver la casa de Mozart (Getreidegasse, 9) que estaba casi vacía, todas los cientos de personas que ayer abarrotaban las calles y que casi costaba pasar hoy habían desaparecido como el sol, bueno “no hay mal que por bien no venga” todo para nosotros!.
Cuando llegas te llama la atención el curioso el sistema de timbres de la puerta principal para llamar, algo muy adelantado a su época la verdad. Aquí vivió la familia de Mozart durante 25 años desde 1747 a 1773, y se puede ver las habitaciones originales, mobiliario, los instrumentos que tacaba, su órgano, la cocina rústica con sus aperos de cobre etc… es muy interesante si eres un apasionado del personaje como yo, ¡¡Ay cuanto daño nos ha hecho la película “Amadeus” de Milos Forman!!. La entrada son 10€ o Free con la Salzburgo car. Después nos fuimos a ver la catedral de Salzburgo (Domplatz 1) que llegó a ser la catedral románica más grande al norte de los Alpes. Realmente es una preciosidad y tiene la pila bautismal donde fue bautizado Motzar así como el órgano donde tantas veces tocó, la puerta de bronce de la entrada que representa la fe, la caridad y la esperanza es de una belleza sobrecogedora. La entrada en gratis y se puede visitar de 8h a 19h.
Cuando salimos estaba cayendo una lluvia increíble así que decidimos esperar, hasta que nos dimos cuenta que teníamos “las llaves” de la ciudad y que dentro de la catedral está el museo. Así que allá que entramos a dar una vueltecita. Te hacen guardar las cámaras en consigna pero si quieres hacer fotos desde la zona del órgano y de la catedral desde arriba te las dejan sacar, así que estuvimos admirando el órgano “de Mozart” en todo su esplendor y manoseándolo un poco para impregnarnos de su historia.
Lo curioso es que desde este museo por las terrazas se accede al museo de arte moderno y como ya están acostumbrados a la lluvia tienen unos jarrones en la terraza llenos de paragüas para que puedas pasar de un lado a otro sin mojarte, buena idea!!.
Cuando ya nos cansamos de tanto arte y viendo que la lluvia iba para largo decidimos seguir la ruta y ver la Abadia de San pedro y las catacumbas (C/Franziskanergasse). Es el cementerio más antiguo de Salzburgo y calificado como el más hermoso, y la verdad que es una preciosidad a los pies de la montaña.
La parte más antigua son las catacumbas que están excavadas en la misma roca, durante tiempo fueron utilizadas como casa para ermitaños, principalmente monjes de la abadía, la entrada cuesta 1€ o free si tienes la tarjeta famosa. Mientras vas subiendo tienes unas vistas preciosas de la ciudad y del cementerio y ves el increíble trabajo y el esfuerzo que tuvieron que hacer con los medios de entonces para excavar semejante estructura en la roca, siempre me maravillo de estas cosas la verdad!.
De ahí nos fuimos a dar una vuelta por la zona comercial y como teníamos la tarjeta (sin tarjeta 11€) decidimos ir a ver la cervecería Stiegl-Brauwelt (C/Brauhausstrasse 9) que la recomendaban mucho en los foros y además te invitan a una degustación de 3 cervezas y ves su museo. De nuevo momentazo por perdemos 30 veces antes de llegar, nos bajamos una parada antes y venga calle arriba y calle abajo hasta que la encontramos, menuda odisea!! , está como a las afueras y tiene la fábrica y unas instalaciones enormes con museo, restaurante, tienda etc…
Al final con tanta perdida llegamos a las 16.15h y cierran a las 17h, en taquilla nos dijeron que el tour por la cervecería ya había salido y que si nos queríamos apuntar que corriéramos, así que para allá que entramos y cuando llegamos con el grupo…en inglés! Así que nos fuimos a nuestro ritmo leyendo los carteles que hay por las salas y que están en 6 idiomas (incluido el castellano) , es muy curiosa la colección de botellas del mundo que tienen e incluso los diferentes coches de transporte etc…cuando acabas, pasas por la tienda y te dan un vale con 3 cervezas a escoger en su restaurante y a parte te dan de regalo 1 botella de cerveza de 0.2L con la etiqueta en edición coleccionista yo cogí la se “Super Stiegl” la cerveza de los superhéroes ja ja ja y a parte un imán para la nevera. Os aconsejo que os las bebáis y que no intentéis traerlas como recuerdo, mira que yo soy previsora y ni caí en que exceden del tamaño permitido en cabina, así que se las quedaron en el aeropuerto de viena mientras yo despedía con lágrimas en los ojos a mi “Super Stiegl” y maldecía interiormente la maldita máquina de Rx del aeropuerto. Ni mi infalible “mirada del gato con botas” sirvieron para ablandar al seguridad grrrrrrrrrr.
El tiket de las 3 cervezas lo vas a canjear al restaurante que menos mal no cierra hasta las 12h de la noche. El sitio es una preciosidad de madera rústica, con unas lámparas colgantes enormes de madera y mesas redondas, un sitio donde parece que retrocedas en el tiempo.
Así que decidimos comer allí unas hamburguesas con patatas increíblemente buenas y fue una de las mejores tardes de risas que nos echamos con tanta cerveza, muchas la verdad para quién no bebe nunca. Cuando salimos ya no llovía así que volvimos a coger el autobús de vuelta (esta vez sin percances) y unos cuantos se fueron al apartamento y nosotros decidimos ir a hacer lo que más me gusta y siempre hacemos, ver la ciudad de noche, es increíble como cambia.
Después de recorrer el centro acabamos en un Macdonals (sí, volvimos a caer) precioso que hay en la calle Grano al lado de una chimenea de pantalla comiendo unos pasteles que nos llamaron a gritos desde la calle. Y ya de vuelta a casa que íbamos con el pequeñajo y ya empezaba a estar cansadete

---