California combo: Los Angeles, Joshua Tree y Disneyland ✏️ Blogs de USA

Hoy volvemos a Disneyland y a parte de montar en las pocas atracciones en las que no tuvimos tiempo de montar ayer, repetiremos en muchas.


Se nos resiste la atracción Great Moments with Mr. Licoln, un teatro en el que un animatronic caracterizado como el popular presidente de los Estados Unidos da un emotivo discurso.

Pues ni esta vez ni la anterior lo hemos podido ver. Esta vez, y por un corto período de tiempo, están aprovechando el teatro para proyectar un “sneak peak”, un trocito de la nueva película de Aladdin. Hay una pequeña exposición en el hall con el vestuario y props utilizados en el rodaje.

Consejos:

Si el lector se queda con sólo un consejo, que sea éste: Llegue temprano. Llegue antes de que abra el parque. Idealmente una media hora antes.

Probablemente la zona de la entrada abra un poco antes de la hora marcada y en estas primeras horas de apertura hay muchas menos colas en el parque y se aprovecha mucho mejor el tiempo.


Mi segundo consejo (y éste es divertido, no como madrugar ): Vale la pena pasar por el City Hall, justo en la entrada del parque, y pedir una chapa (o button). Es gratis y os la personalizarán con vuestro nombre.

Hay chapas distintas para todas las ocasiones: La 1ª visita, cumpleaños, luna de miel, graduación y cualquier tipo de aniversario.

Y no sólo vale la pena tener un souvenir gratuito, sino que mi marido se pidió la de “cumpleaños” (este viaje es mi regalo de cumpleaños de este año ) y la mayoría de empleados del parque le decían “Happy birthday!”. Algunos incluso le cantaban la cancioncilla y otros divertidos detalles.

Con anterioridad, cuando nos hemos pedido la chapa de “1st visit”, los empleados nos dan la bienvenida y cuando hemos llevado la de “luna de miel”, todos nos felicitaban.

Disneyland está repleto de detalles curiosos, uno de ellos es una diminuta casita en un árbol del duendecillo Patrick, es un personaje de un cuento de Disney de 1955.

Se puede observar la puertecita, una chimenea, una ventana y un farolillo diminuto en un árbol, detrás de unas papeleras en la entrada de la atracción de Indiana Jones. Muy poca gente conoce este detalle y la familia que estaba sentada al lado nos miró extrañados cuando nos asomamos detrás de las papeleras ilusionados por el hallazgo.


Esta noche y para despedirnos del parque asistimos al entretenido y sorprendente show en el lago, Fantasmic, dónde cobran un inesperado protagonismo los villanos de las películas que todos conocemos. Eso sí, siempre con un final feliz, que estamos en Disneyland.

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Hoy visitamos el segundo parque de Disneyland Resort.

Disney California Adventure está situado justo enfrente del tradicional Disneyland y es un homenaje al estado americano que vio nacer el universo Disney.

Las zonas que forman el parque son inspiraciones de espacios reales:
Grizzly Peak tiene un asombroso parecido al parque Yosemite
Pacific Wharf parece un escenario sacado directamente de San Francisco
o bien zonas tematizadas con alguna saga:
los juguetes de Toy Story son los protagonistas de Pixar Pier
y en Cars Land tanto los edificios como el paisaje son tal como los de las pelis del simpático Rayo McQueen.


Una de las pocas novedades desde que estuvimos la última vez es la Torre del Terror, ahora transformada en una emocionante y divertida aventura de la película de Marvel Guardianes de la Galaxia.


El sitio ideal para comer es Pacific Dwarf, una plaza con mesas y sillas al aire libre, rodeada de puestos de comida. Yo elijo un plato del restaurante chino y mi marido una sopa dentro de un pan redondo de masa madre, muy típico de San Francisco.

En este momento están haciendo el evento anual Food & Wine y hay muchas paraditas con degustaciones pero nos parecen algo caras.

Hay entretenimiento en vivo por todo el parque.


Una de nuestras atracciones favoritas del parque es Radiator Spring Racers, en Cars Land. Las colas son muy largas pero tenemos varias estrategias para evitarlas.

Truco nº 1: subir a primera hora de la mañana. Justo al entrar al parque nos dirigimos allí y aunque había un empleado que nos advertía que haríamos más de media hora de cola, valió la pena quedarse porque la espera fue menor.

Truco nº2: Cogimos un “fast pass”. En la entrada a Cars Land hay unas máquinas que te dan un tiquet para volver a una hora determinada (dentro de un intervalo de una hora) y entonces pasas por una cola express. La espera quizá fue de diez minutitos.

Truco nº3: Usamos la cola “single rider”. Es para personas que van solas o no les importa montar solas. La desventaja es que no podemos sentarnos uno al lado del otro, uno monta en un coche y el otro se espera hasta que llega su turno, pero como ya hemos montado tantas veces juntos, no nos importa ir separados de vez en cuando.

Y el truco nº4 no lo hicimos, pero también lo recomiendo : subir por la noche cuando se esté haciendo el espectáculo en el lago, todo el mundo estará allí, así que las colas de las atracciones se reducen mucho. Pero nosotros no nos queríamos perder el show.


En cuanto al show nocturno, World of Colour, es un espectáculo de agua, luz, fuego, imágenes y música que vale mucho la pena, con las vistas de todo Pixar Pier iluminado, el parque cuando oscurece, es precioso.


Y un último detalle, en el bosquecito que rodea la atracción Grizzly River Run siguen viviendo las mismas gatitas preciosas que conocimos hace dos años. Una de ellas es especialmente cariñosa, nos paramos al lado de la verja, se nos acercó y se dejó acariciar.



Si el lector quiere más información de Disney California Adventure, puede encontrarla en el diario de nuestro anterior viaje.

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Hoy es el último día de nuestro viaje.

Por la mañana paseamos por Downtown Disney, el paseo comercial al lado de los dos parques. Repleto de tiendas de merchandising Disney y otras marcas conocidas.

Comemos en uno de los muchos restaurantes de la zona.

Por la tarde cogemos las maletas del hotel y llamamos un Uber. Es la forma más rápida para llegar al aeropuerto, aún así son unos tres cuartos de hora (dependiendo del tránsito) y 50 dólares.

Las alternativas en transporte público son, o bien un autobús directo, que tarda una hora y cuesta 20 dólares por persona o bien una combinación laboriosa y eterna de autobuses, trenes y/o metros que nos hubiera robado varias horas y un buen puñado de energía.

El vuelo, sin incidencias. Ya estamos en casa, después de nueve días que han dado para mucho: ciudad, naturaleza y parque temático, nuestra combinación perfecta.

Como en todos mis diarios, deseo que el lector haya disfrutado de la lectura y le sea útil la información que he compartido. Y si han disfrutado de las fotos, el mérito, como siempre, es de mi marido.

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