![]() ![]() HONEYMOON EN POLINESIA FRANCESA ✏️ Blogs de Oceania
"Disfrutarlo mucho". Fue lo que más nos dijeron antes de realizar este maravilloso viaje al otro lado del globo. Y sin duda lo hemos hecho. Leer el diario y entendereis porque...Autor: Pepejavi Fecha creación: ⭐ Puntos: 4.8 (48 Votos) Índice del Diario: HONEYMOON EN POLINESIA FRANCESA
Total comentarios: 46 Visualizar todos los comentarios
Etapas 7 a 9, total 12
A la mañana siguiente nuestro vuelo salía de Moorea a las 12 con destino a la última isla que visitaríamos: Bora Bora. Hicimos el check-out y pagamos la cuenta. Por cierto en el Sofitel de Moorea no utilizamos el wifi, por lo que no puedo decir si es rápido o lento, pero el precio recuerdo que era de 500 xpf por hora.
Nos vinieron a recoger para el traslado al aeropuerto, facturamos sin problemas (no superábamos 40 kg entre las dos maletas) y esperamos la salida de nuestro vuelo. A la 1 del mediodía aterrizamos en Bora Bora entre admiración (por lo que veíamos), incredulidad (después de meses viendo fotos y preparándolo ya estábamos allí) y sorprendidos (porque realmente Bora Bora tiene la laguna más bonita, al menos de las que nosotros habíamos visto, parece una gran piscina). Nos pusieron el collar de flores, encima del de conchas de Morreas, y nos dieron las pegatinas para ponérselo a nuestras maletas con el numero de habitación (y nos olvidamos de ellas). Montamos al barco del Intercontinental Thalasso, y fuimos pasando por todos los hoteles (Four Seasons, St Regis-ya lo dijo otro viajero, pero es que el ultimo OW del St Regis es especialmente ostentoso-, el Le Meridien, y por fin, el Intercontinental Thalasso. Nos llevaron a recepción, nos dieron un zumo mientras hacíamos los papeles del check-in y nos hicieron una foto de bienvenida con el monte Otemanu al fondo (cuando se hace el check-out te la regalan). De allí te suben en un cochecito eléctrico y te llevan a la habitación pasando por las instalaciones del hotel y explicándote los horarios y demás detalles a los que no prestas atención porque vas embobado mirándolo todo. Al entrar a nuestro OW teníamos una cara de tontos de mucho cuidado, y cuando salimos a la terraza ya ni os cuento. Yo me senté en la parte de abajo de la terraza y estuve 10 minutos disfrutando del momento. Nos bebimos el champán allí sentados. Por tener la tarjeta Intercontinental Ambassador teníamos un plato de frutas, agua mineral todos los días, late check-out a las 4 el DÍA de salida y upgrade “gratuito” a OW shappire. Nos toco el 226, y la profundidad del agua (algo que me preocupo bastante meses anteriores) era de unos 2 metros. Digo lo de la profundidad porque yo anduve preguntando esto como si fuera lo más importante y os digo que en el Thalasso todos los OW son exactamente iguales, lo único que los diferencia es la orientación y distancia al resort. Hoy, después de haber visto todas las habitaciones por fuera, no me hubiera importado lo mas mínimo haber tenido un OW esmerald con vistas al resort, porque allí todo es fantástico, ya estés mirando al resort, ya al monte Otemanu. Como ya era la hora de comer y estábamos fascinados en nuestro OW, decidimos pedir la comida en la habitación (ensalada cesar y sándwich club por 38.000 xpf, además aplican 1000 xpf siempre que te lleven algo a la habitación). Fue una comida especial (no por la comida en si, que estaba muy buena, sino por el sitio donde nos encontrábamos). Aprovechamos la tarde a bañarnos en la laguna sin salir de nuestro OW. A las 7 nos arreglamos para ir a cenar. En el Thalasso hay dos opciones el restaurante Le Sands (más informal, con muy buena comida aunque no sofisticada, pero de cantidad aceptable) y Le Reef (muy elegante, comida exquisita y cantidad muy poca). Cenamos en Le Ref., porque en los dos restaurantes la medía pensión incluye un entrante, segundo y postre. Pedimos de entrantes foie y unas verduras, de segundo solomillo y pavo y de postres helado de vainilla y una bola de chocolate con caramelo (todo riquísimo, pero que si no fuera por el chocolate del postre me hubiera ido con hambre a la cama). Etapas 7 a 9, total 12
A las 6:30 puse el despertador y nos levantamos para desayunar. El Buffet es en el restaurante “Le Reef” y tienen bastante variedad (bacon -eso si tostado como le gusta a los americanos-, salchichas, huevos, tortillas hechas en el momento, tortitas con nutella, bollería riquísima, embutidos, gran variedad de frutas, yogures, incluso tenían pescado marinado, imagino que para cumplir las expectativas de los japoneses).
Recogimos nuestro equipo de buceo y toallas que presta gratuitamente el hotel y nos fuimos al embarcadero del hotel, donde a las 9:00 nos esperaba Christopher para realizar con él la excursión “Reef Discovery”. Es un tipo muy simpático, nada más subir a su lancha nos preguntó nuestros nombres y estuvo muy atento de mi mujer porque le dijimos que le daba miedo hacer snorkel (iba acojonada por si veíamos tiburones). En la primera parada que se hace en esta excursión supuestamente había probabilidad de ver rayas, pero no fue así. No obstante vimos gran cantidad de peces y sirvió para que a mi mujer se le quitara el miedo (Christopher la acompañó todo el tiempo) y en la segunda parada saltó la primera al agua, jeje. Después de unos 30 minutos puso rumbo a la segunda parada situada al sur de Bora Bora. Por el camino paraba para explicarnos la formación de la isla. Es muy bonito ir en una lancha a esa velocidad y viendo los cambios de tonalidad del azul de la laguna. Al llegar a nuestra segunda parada nos tiramos al agua con tan mala suerte que la carcasa de mi cámara acuática se abrió y desastre absoluto. No ha vuelto a funcionar (jamás os compréis la Olympus Tough 3005, porque tiene un mecanismo de apertura de la batería muy sencillo que con cualquier leve movimiento bajo el agua se abre. Un verdadero fastidio porque allí vimos los peces más espectaculares del viaje. Incluso Christopher sacó una morena enorme del coral. Desde allí pusimos rumbo a los jardines de coral cercanos al aeropuerto de Bora Bora, donde no hay gran cantidad de peces, pero las formaciones coralinas son muy bonitas. Desde allí, y algo furioso por no poder fotografiar todo lo que mis ojos veían, nos dirigimos por la parte sur de la isla de nuevo al hotel Thalasso (pasando a dejar a otra pareja por el Hilton, por cierto, que pasada el OW presidencial del Milton, es enorme). A la 1 llegamos al hotel, nos dimos un chapuzón en la piscina con vistas al Otemanu y comimos en la playa del restaurante “Sands”, una pizza y una ensalada con budweiser y coca-cola por 3.630 xpf. Por cierto, la excursión con Christopher yo la volvería a hacer sin dudarlos, os la recomiendo, además si tenéis intención de hacerla el aconseja que sea el primer día, así tendréis una vista general de la isla. Por la tarde estuvimos en el OW hasta que anocheció. Fuimos a cenar de nuevo al restaurante “Le Reef”, que yo lo definiría como caro, exquisito y con muy poca cantidad en los platos. Raviolis (1 para ser preciso), Foie, Cordero y Mahi Mahi (no superaba el tamaño de una barrita de merluza pescanova), 3 bolas de helado y otro postre de chocolate verdaderamente bueno, más un apple mojito y copa de vino chileno, por 17.200 xpf (aunque realmente solo pagamos 3000 xpf de las bebidas, porque teníamos medía pensión). Este restaurante es muy fino y de cocina muy elaborada. Nos fuimos dando un paseo a la habitación. Por el DÍA el aire se agradece porque en caso de calmarse el sol sería insoportable, pero por la noche era algo molesto ir andando y escuchar soplar el aire tan fuerte. De todos modos mi opinión es que el Thalasso esta muy bien ubicado, protegido por la vegetación del motu. La pareja de españoles que se alojaban en Bora Bora en el Sofitel Marara nos dijeron, cuando nos vimos en Papeete, que en su OW soplaba muchísimo aire, y es que en esa zona de la isla el aire puede llegar a ser un inconveniente (ellos nos dijeron que les había gustado muchísimo mas Moorea que Bora Bora, pero nosotros creemos que apreciar la belleza de Bora Bora depende muchísimo del hotel elegido; nosotros sin duda opinamos que Bora Bora tiene más que merecido el turístico sobrenombre de ser “La Perla del Pacífico”. Etapas 7 a 9, total 12
A las 7 de la mañana sin despertador abrimos el ojo. Hacía bastante aire y el día no pintaba muy bien. Fuimos a desayunar al buffet y regresamos a la habitación. Aun no daba el sol en nuestra terraza (hasta las 10:30 en el OW 226 no aparecía el sol), y aprovechamos para conectarnos a Internet (900 xpf por 1 hora, en el Thalasso es bastante rápido; hay wifi en las zonas comunes, y conexión con cable ethernet en todas las habitaciones por el mismo precio). A las 11 regresamos a la habitación y estuvimos tomando el sol (es impresionante estar en la terraza del ow, con total privacidad, bañándote en la laguna y tomando el sol), hasta las 2, que es la hora a la que acuden una docena de mantas raya a la playa del hotel, y el chico de la piscina las alimenta. Algunas se dejan tocar y son muy suaves, se pasa un rato agradable en la playa viéndolas pasar a escasos centímetros e incluso rozándote. Cuando se termino lo de las rayas coincidió con una boda tahitiana en la playa de la laguna del hotel y estuvimos cotilleando un rato.
De alli nos fuimos al restaurante “Sands” para comer. Ensalada césar, steak sándwich, budweiser y coca-cola por 3950 xpf. Aprovechamos a tomar el sol en la playa hasta las 4:30 pm, que se levantó de nuevo el aire y el sol se empezaba a esconder. Nos dimos una ducha y fuimos a tomar una cerveza a la playa, junto al restaurante “Sands”, donde había música en directo, y es muy agradable tomar algo allí escuchando el mar, la música y viendo caer el sol detrás del Otemanu. Esa noche cenamos en el buffet polinesio del restaurante “Le Reef”. Los buffets temáticos son los lunes, miércoles y viernes (polinesio, japonés y el otro creo que es cocina internacional, respectivamente). Los días de buffet hay también un espectáculo polinesio muy bonito y entretenido. De allí a dormir, dando un agradable paseo por las pasarelas sobre el agua que conducen hasta los overwater. Cuando llegamos el servicio de habitaciones había preparado la cama, encendido las luces, y también nos habían dejado un papel del spa (por si no nos habíamos enterado aun que había spa). Aprovechamos esa noche a ver la película de Robin Hood, que teníamos como complemento gratuito por tener la tarjeta Ambassador. Etapas 7 a 9, total 12
📊 Estadísticas de Diario ⭐ 4.8 (48 Votos)
![]() Total comentarios: 46 Visualizar todos los comentarios
CREAR COMENTARIO EN EL DIARIO
Diarios relacionados ![]() ![]() ![]() ![]()
![]() |