A eso de las 7 de la mañana abrimos los ojos y nos levantamos. Habíamos dormido más de 8 horas y lo primero que hicimos fue dirigirnos al ventanal de la terraza para observar los colores de la laguna. No nos podíamos creer que estuviéramos en un lugar tan maravilloso, del que tantas fotos habíamos visto. Nos fuimos a desayunar en el mismo restaurante donde cenamos, con vistas a la laguna. Es un privilegio poder desayunar con esas vistas, con la tranquilidad que allí se respira y la exquisita atención de los empleados del hotel. El buffet, completo pero no con excesiva variedad, todo muy rico (especialmente la bollería, los croissants buenísimos). Desde el restaurante fuimos a recepción para coger el equipo de snorkel (gratuito), y comprar una tarjeta para el wifi (500 xpf/1 hora, bastante lento, no permitía hablar con claridad con skype). El resto de la mañana la dedicamos a bañarnos en la playa y a hacer snorkel, con el miedo que aparecieran los “sharks” que la noche anterior vimos en la zona de la recepción, pero se ve que por el dia no se atreven a pasar por la laguna…A la 1 del medio día volvimos al restaurante para comer. Cheeseburguer y sándwich club (tipo vips, pero el doble de bueno. No se si será el sitio que nos hace pensar que todo está mejor, pero es que realmente todas las comidas eran de primera), con Hinano y coca-cola Light por 4800 xpf. Después de comer reposamos en las tumbonas de la terraza de la habitación y cogí un kayak y cruce al motu que está al lado del hotel. La distancia es muy pequeña, a penas 10 minutos. Estuve un buen rato allí, disfrutando de esa pequeña porción de tierra para mi solo y regrese al hotel, donde volvimos a ver ponerse el sol a eso de las 5,30 pm.
A las 7,30 fuimos al restaurante del hotel para cenar. Esa noche de primeros foie y un tartar de mahi mahi, y de segundos solomillo y pescado de la laguna (todo verdaderamente bueno y de cantidad muy bien, y eso que yo soy bastante comilón). De postre plato de frutas frescas y chocolate pearl beach que está de vicio (bizcocho en cuyo interior está el chocolate caliente). La media pensión incluye un entrante, segundo plato y postre. Calcular que cada entrante puede estar entre 1500 y 2200 xpf, el segundo entre 2000 y 3000 xpf, y el postre unos 1300 xpf, en función de lo que pidáis (cerveza, agua y refrescos, unos 500 xpf). Después de cenar, aunque justo al lado del restaurante hay un bar donde se puede tomar algo, estábamos muy cansados y regresamos a la habitación.