Región de Salzburgo ✏️ Blogs de Austria

Hoy nos levantamos y nos vamos a ir al pueblo de al lado
Dienten es el pueblo más cercano a Mühlbach en dirección oeste. Es un pueblo rodeado de un entorno impresionante. Puede que me guste aún más que Mühlbach porque tiene muchos prados y es algo más abierto. Para disfrutar de todo este entorno con mejores vistas, decidimos subir en un telesilla de 6 personas que sale desde el centro del pueblo. Es el Sesselbahn Bürglalm. La instalaciones del telesilla son modernísimas.
Subimos muy cómodamente. Ya desde el final del telesilla hay una buena vista. Pero con una pequeña marchita de unos 20 minutos llegas hasta un punto en el que hay una vista impresionante del Hochkönig y de picos más lejanos, como el Kitzteinhorn de Kaprun, el Grossvenediger, y el impresionante mar de piedras (Steinener Meer).







En ese punto, un señor nos pregunta de donde somos y entablamos una interesante conversación con él. Nos dice que es de Lienz, pero nosotros entendemos Linz. Cuando nos está explicando los picos que se ven, nos dice que detrás de uno de los picos está Lienz. Entonces le decimos que nosotros estuvimos alojados en el pueblo de Ainet, al lado de Lienz. Y nos dice que lo conoce perfectamente porque es de Lienz. Le explicamos que le habiámos entendido Linz y nos dice que no somos los únicos. Nos cuenta que hace unos años, se iba a celebrar el cierre de un cuartel militar en Lienz. Se contrataron músicos e iban a asistir algunos políticos porque se iba a celebrar una gran ceremonia y una fiesta. La sorpresa fue que cuando llegó la hora, en Lienz no estaban más que los vecinos, los musicos y los invitados. Los políticos se habían ido a Linz….jajajajaja. La mujer nos dice que es que sus políticos no son muy listos... ya tenemos algo en común.
Conversamos con él y su mujer un rato y nos cuenta que España les gusta, pero que para pasar las vacaciones es muy caro... Coincidimos en que para pasar unas vacaciones como las que solemos pasar nosotros por Europa, en las mismas condiciones, en España saldría por un pastón.
Nos despedimos de ellos y nos deseamos unas felices vacaciones.
Andamos de vuelta y vemos que también por allí hay unas cuantas Alms. En una de ellas hay un recorrido kneipp. Es muy típico en Austria y en países de alrededor encontrarse con algo relacionado con Kneipp. Keipp fue uno de los precursores de la hidroterapia y de la medicina natural en la época del renacimiento. Era un sacerdote alemán y por eso por estos países de alrededor hay multitud de lugares donde puedes meter tus pies en agüita y hacer recorridos descalzo para suavizar y cuidar los pies y el cuerpo. Lo puedes encontrar en medio de la montaña, en parques de ciudades y pueblos… Recordamos lo bien que lo pasamos (unos más que otros) haciendo un camino de pies descalzos que hay en Dorstetten, en la Selva Negra, que discurría a lo largo de prados y bosques por encima de diferentes texturas, con agua, barro, sobre piñas…
Hacemos unas cuantas fotos más y nos bajamos en el telesilla hasta el pueblo de Dienten.
Hemos echado toda la mañana allí.
Vamos a casita a comer



...y por la tarde toca de nuevo tarde de relax. Nos vamos a ir a otras termas… Esta vez a las Felsentherme.

(Las siguientes fotos no son mías)






Estas termas se encuentran en Bad Gastein, pueblo que ya digo que se nota que tuvo épocas mejores. Las Felsentherme, se colocan las últimas en mi ranking de termas. Estuvimos hace 10 años y desde entonces parece que no han reformado nada. La zona de saunas sí parece que la hayan reformado y aunque muy pequeña, está bastante bien. Tiene una zona interior con unas 7 u 8 saunas y una zona exterior con buenas vistas con otras dos saunas. Bueno… para pasar un rato no está mal. Pasamos unas 3 o 4 horas GRATIS gracias a nuestra tarjetita (sin ella 23,50 euros 4 horas). Volvemos para casita, cenamos algo y dormir.



Continúa en la siguiente etapa...

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Hoy toca día en Salzburgo. La tarjeta de Salzburgerland para 12 días, además de todo lo que he contado, incluye 24 horas de entrada libre en todas las atracciones de Salzburgo. Como sólo vale para 24 horas, planificamos un poco lo que queremos hacer y a dónde queremos entrar y salimos de casa prontito. Salzburgo es una ciudad que ya conocemos y el plan para hoy, comienza en Untersberg, una montaña a 12 kilómetros de Salzburgo desde la cual se ve la ciudad y mucho más.
Un teleférico te lleva desde Grödig, por una impresionante subida, hasta los 1853 metros de altura. Es impresionante la subida y la vista desde arriba.
Salzburgo se ve muuuy pequeñito y en unas vistas de 360 grados se ven los picos de los Alpes de Berchtesgaden, en Baviera, Alemania hasta todos los picos más típicos de la región de Salzburgo y regiones de alrededor. Muy impresionante.
Algunos puntos de la frontera entre la región de Baviera (Alemania) y la región de Salzburgo (Austria), discurren por encima de la montaña.





Bajamos y ponemos rumbo a la ciudad. Aparcamos donde siempre, en el parking excavado en la montaña y nos dirigimos hacia el río para coger un barco. Le digo al hombre de la taquilla que me hable en Alemán pero al ver que soy española me habla en algo rarísimo que dice que es italiano pero es mentira ...jajaja. y no entiendo nada…jaja. Le digo dos o tres veces que por favor me hable en alemán pero no me hace ni caso porque dice que español e italiano es lo mismo… pero es que tampoco habla italiano...jajaja. Total que el hombre loco por fin nos da los tikets para el barco y embarcamos. Esto quizá es lo que menos nos gusta del viaje. No merece la pena para nada porque desde el rio no ves nada interesante que no veas desde tierra y el recorrido es realmente soso. Pensamos en otros “cruceritos” como en París, Amsterdam, Estrasburgo etc… que por mucho menos dinero merecen muchísimo más la pena. Para compensar lo soso del recorrido el “capitán” hace unas cuantas monerías para turistas y terminamos dando vueltas en el río con el barco a modo de vals. Prescindible en opinión de todos. Por lo menos ha sido gratis. (Con la tarjetita. Sin ella 18 euros).




Damos una vueltita por la ciudad, comemos en un Nord See para no perder mucho tiempo y nos dirigimos a la Festspielhaus. Hay tres visitas diarias, una de ellas a las 15;30h y da la casualidad de que son las 15;15h. Así que decidimos entrar… y tomamos una buena decisión porque nos parece bastante impresionante. Se trata de la sala de conciertos y óperas de Salzburgo, que atrae a millones de personas al año. Para las obras clásicas hay que reservar con 9 meses de antelación, justo cuando sacan el programa porque si no, te quedas sin entrada.
La visita nos toca en inglés y un señor que se nota que disfruta con lo que hace y que le gusta la música, nos va llevando por diferentes espacios contándonos anécdotas y cosas muy interesantes del lugar. Tras pasar por el recibidor y por la zona de bar (llena de botellas de Möet Chandon), entramos en una sala impresionante, el Felsenreitschule, excavado en la roca. Esta sala se construyó sobre lo que fue la antigua escuela de equitación de los arzobispos de Salzburgo.
Se extrajeron 55.000 metros cúbicos de piedra de la ladera del monte Mönchsberg para dejar sitio a la enorme caja escénica, que con 100 metros de anchura es una de las mayores del mundo. La profundidad del escenario es de 25 metros, y la boca tiene una anchura de 30 metros y una altura de 9.
Impresiona. Somos unas 15 personas, sentadas en las butacas frente al escenario y a la impresionante pared de piedra tallada.
Más tarde nos lleva a otra de las salas, la que más público acoge en la que esa misma noche tendrá lugar la última representación de la temporada de la ópera Falstaff .
Están haciendo las pruebas de iluminación y sonido y tras contarnos anécdotas del lugar sentados en las butacas, nos lleva al escenario y por detrás de este, donde están todos los entresijos. Justo al lado hay un pabellón enorme, lleno de árboles, muebles etc… que según nos cuenta, es el decorado de la ópera Cosi fan tutte que comenzará a representarse mañana. Por lo que esa misma noche, al terminar la representación de Falstaff, tienen que retirar todo y poner los escenarios de la nueva ópera…. Vaya nochecita les espera…
Nos ha parecido una visita interesantísima. El hombre era muy simpático y se notaba que le encantaba el mundillo. Nos ha servido además para estar un poco fresquitos y quitarnos el enorme calor de fuera.








Salimos por debajo de la montaña y cogemos el coche para dirigirnos al museo y la fábrica Stiegl. En el librito donde vienen todas las atracciones a las que da acceso la tarjeta, vienen todos los datos y direcciones así que ponemos el navegador y no perdemos tiempo.

La fábrica Stiegl es la más grande de Austria. Aparcamos y nos sorprende la poquísima gente que hay. Con la entrada al museo (Gratis con la tarjeta, 10 euros sin ella) Te dan, a cada uno, 3 cervezas, una bolsita de galletitas de cerveza y un regalo.
Visitamos el museo totalmente solos. Es enorme y muy interesante pero también hace un calor impresionante. Si te quieres detener en todo y verlo en profundidad, da perfectamente para 2 horas, y es muy ameno porque hay muchas cosas diferentes. Impresionante museo, la verdad.

Tras la visita, salimos directamente al Biergarten, donde damos nuestras entradas, y nos van sirviendo, una tras otra las tres muestras de cerveza. Son jarras de 200 ml de tres tipos de cervezas distintas. Las tres buenísimas. Cada uno tenemos nuestra preferencia. Pedimos algo de comer para acompañar a las cervezas. Se está fenomenal. Nos habría gustado comer hoy allí pero debí mirar mal los horarios y pensábamos que cerraban pronto y no nos daba tiempo a llegar. Pero no era así. Abren durante todo el día.

Después de las cervecitas y el picoteo, vamos a la tienda a recoger nuestro regalito. Nos dan a elegir entre botella de cerveza y vaso y escogemos todos vaso. Un bonito vaso original de Stiegl, para nuestra colección.
Total, que 18 cervezas, 6 vasos, 6 bolsitas de galletitas de cerveza y una visita al museo… todo gratis. Sin tarjeta, 10 euros… que tampoco está nada mal.
Compramos unas cosillas en la tienda y vuelta para casita. Yo no estoy acostumbrada a beber, y 600 ml de cerveza me han mareado un poquillo… jeje.. vamos, que después de la visita de antes a la sala de conciertos, voy en el coche de vuelta a casa, cantando el Aria de La Dama de la Noche, de La Flauta Mágica... ): Parece que la cerveza hace que salga un don oculto ...jajaja; ):;















Continúa en la siguiente etapa...

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Antes de poner rumbo a nuestro destino de hoy, vamos a hacer una visita a una “sennerei” que he descubierto por internet el día anterior. Está al final de la carretera de nuestra casa a unos dos kilómetros. Una sennerei es como.... una quesería- vaquería alpina, como los Alpages que encuentras en los cantones de Vaud y Fribourg, en Suiza, donde se dedican básicamente a hacer queso. Por lo visto el quesero Pauli es bastante famoso por la zona y tiene varios premios, así que allí vamos.
Se trata de una construcción sencilla de piedra, como un Alm de los que os hablaba antes.

Las 3 siguientes fotos no son mías




Entramos y hay un pequeño mostrador con unos 10 tipos de queso. Pauli nos da a probar la mayoría y nos llevamos para casa unos 5 o 6. ¡¡Espectaculares!!




Aprovechamos además para comprar también mantequilla hecha por Pauli… espectacular… y dos litros de leche cruda que dejamos en la nevera para hervir cuando lleguemos a casa.


La mantequilla la hace en unos moldes enormes de madera con grabados.

Ya por fin, con queso, leche y mantequilla de verdad, ponemos rumbo a nuestro destino de hoy.



Hace unos días descubrimos un pueblo que nos encantó. Se trata de Werfenweng. El camino hasta él es precioso y el pueblo está situado en un lugar rodeado de montañas espectaculares.



Hemos leído además que es un pueblo ecológico que te da todas las facilidades para que no tengas que coger el coche durante tu estancia, prestándote vehículos eléctricos, bicicletas, transporte en coche de caballos. Se anuncia como un pueblo silencioso, de relax, para alejarse del estrés…. Hombre, por esta zona… poco o ningún estrés hemos tenido durante estas dos semanas, pero sí es cierto que el pueblo tiene un aire muy familiar y tranquilo. Sin duda a tener en cuenta para otra vez. La verdad es que teníamos casi reservada una casa en este pueblo pero nos dimos cuenta de que no había flexibilidad para la entrada y salida y tenía que ser de sábado a sábado, así que al final no la cogimos.

Bueno, pues después de estas buenas impresiones del pueblo, vamos a subir en el Ikarus, una cabina que sube a una de las montañas que rodean el pueblo. Intentamos subir el día siguiente a la tormenta, pero el viento había tirado árboles y se habían dañado partes del recorrido así que lo intentamos hoy.
El paisaje otra vez, nos vuelve a dejar con la boca abierta, y eso que está algo nublado y la visibilidad no es muy buena. 360 grados de vistas impresionantes a 1832 metros. Damos unos paseos por arriba, descubrimos más picos impresionantes (se ve también el Hochkönig desde otro ángulo), me hago amiga de unas cuantas vacas y bajamos.











Y después de estos momentos de relax y silencio en las montañas, vamos a soltar un poco de adrenalina. Nos dirigimos a Abtenau para hacer la que dicen que es la bajada en trineo de verano más excitante de Europa. Hemos visto muchas veces muchos trineos de verano y en Davos, montamos en uno, pero este tiene dos kilómetros de bajada, de curvas, rectas, túneles…
Se asciende con una cabina para 8 personas hasta la cumbre del Karkogels y una vez allí te montas en el trineo, te aseguran y cuando el semáforo se pone verde… allá vamos!!! Los niños menores de 7 años bajan acompañados de un adulto y tienen la velocidad limitada a 30 Km/h.

Aquí tenéis un anuncio de la bajada.










Nos encanta!! Disfrutamos como enanos. Se cogen velocidades de vértigo y en las curvas, aunque al principio da respeto tomarlas tan deprisa, poco a poco vas ganando confianza y cuando llegas al final, estás deseando volver a subir. Vas atravesando prados, te metes por bosques y pasas rozando a algunas vacas que, aúnque tienen cuerdas electrificadas, parece que les gusta la marcha... Ha sido una buena experiencia.
Mi padre nos gana a todos batiendo el record de velocidad, nadie le supera en el rato que estamos allí...
Compramos unas fotos de recuerdo que nos han hecho durante la bajada… que ya que nos ha salido GRATIS… (Sin la tarjeta, la subida y la bajada: 10,90 euros).
Para descender también puedes hacerlo con unas bicicletas que se llaman Trotis. Nosotros lo hicimos hace unos años en Klosters y también fue genial. Son unos vehículos de dos ruedas muy gordas, con una plataforma para bajar de pie y también son muy divertidas.
Nos damos un paseo por el pueblo de Abtenau y compramos unas cosillas para hacer un picnic.

Nos dirigimos ahora al Salzburger Freilichtmuseum, al museo al aire libre de la región de Salzburgo…. Se trata de un terreno de 50 hectáreas en el que hay, distribuidas por prados, montañas y bosques, unas 100 construcciones de antiguas casas de las diferentes subregiones de la región de Salzburgo. (Flachgau, Pongau, Pinzgau, Lungau y Tennegau). Desde el siglo 16 hasta el siglo 20. Dentro de cada casa, están los muebles y herramientas originales. Hay desde casas normales, a casas de huéspedes, escuelas, capillitas, la casa del herrero, del carpintero una tienda antigua en la que puedes comprar, una antigua central eléctrica, molinos… y así, hasta más de 100 construcciones a cual más bonita.

Aquí dejo un planito del impresionante museo.


Mi recomendación, si os gusta, pasar casi todo el día allí. La información que llevábamos decía que la visita llevaría unas 2 o 3 horas. Nosotros estuvimos 4, viéndolo no muy detenidamente porque al final estabas de casitas hasta las narices…jeje. Hay un tren que atraviesa el museo, que tiene tres estaciones a lo largo del recorrido. Hay numerosas mesas de picnic por todos los lados, una zona de picnic cubierta en un antiguo granero y también hay restaurante con 150 plazas.


Esta es una de las estaciones del tren que recorre el museo.



La tienda antigua... por dentro es preciosa.






LA casa del herrero






El antiguo puesto de peaje de la carretera del Gossglockner.


Un cartelito antiguo




Estamos prácticamente solos durante todo el recorrido, lo cual se agradece, porque otro de los museos similares que conocemos, es el de la Selva Negra, y allí van cientos de autocares cada día... (ya lo hablamos cuando estuvimos; Las excursiones y mucha gente van al Titisee, al museo de la Selva Negra, a las cataratas de Triberg y poco más... y ya está... ya consideran que han visto la Selva Negra, y es ahí donde te encuentras gente. Luego te sales de esos sitios, y por lugares mucho más impresionantes encuentras muy pocas personas... Es lo que pasa en todos los lados.
En esta región en la que estamos y alrededores, encuentras mucha gente en Salzburgo, en la cueva de hielo, en el Nido del águila y poco más... luego te sales de ahí y se está tranquilisimo sin aglomeraciones en ningún lado.
Es el caso de este museo... yo pensaba que iba a ser como el de la Selva Negra pero hay lugares en los que estás totalmente solo y en el parking hay unos pocos coches y ningún autocar.
Salimos de allí a la hora del cierre. Ah! También hay una zona Kneipp para refrescarse y relajarse que nos viene muy bien para quitarnos un poco el calor.

Entrada al museo 10 euros. Con la tarjeta GRATIS!


Hora de cenar, y hoy vamos a hacerlo en los Agustinos de Salzburgo. Metemos la dirección en el navegador… miento, ya la teníamos metida desde que empezó el viaje, y aparcamos en el parking descubierto para más de 400 coches.
Esta cervecería es la más grande de Austria, con 5000 metros cuadrados y además tiene un Biergarten (un jardín) con sitio para 1500 personas. La cerveza sale directamente de barriles de madera y tú mismo tienes que coger la jarra (de medio o un litro) de una estantería y llevarla a que te la llenen después de refrescarla bajo una de las fuentes que hay. Para comer, puedes llevarte la comida de casa o comprarla en uno de los pasillos del monasterio, que simula un mercado tradicional, donde, en cada puesto, te venden comida preparada de distintos tipos. Hay un puesto de ensaladas, otro de cosas a la parrilla, otro de pollos, panadería etc… Después de coger la jarra, buscas un hueco en uno de los muchos salones que hay y te sientas donde quieres. Luego vas a buscar la comida que te apetezca y la vas llevando a la mesa. Por unos 10 euros por persona puedes cenar fenomenal con medio litro de cerveza….




Para airearnos un poco vamos a dar un paseíto por los jardines de Mirabelle, que se está fenomenal, y después, a casita, que hoy ha sido un día cansadito.
El pobre conductor bebe en solitario pero ya en casita...jaja.




Continúa en la siguiente etapa...

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